ÑOÑA

Muchos latinoamericanos conocen esta palabra con diferentes significados. En esta ocasión se va a destacar una acepción que ha sido mencionada en algunas recopilaciones de dominicanismos.

A través de la historia en el habla dominicana se han empleado varias palabras para designar la primera magistratura del país. No hay que sorprenderse de que en República Dominicana se le dé un nombre a la presidencia o a la banda presidencial que se considera el símbolo del ejercicio del poder ejecutivo.

Para quien esto escribe, la ñona es la “banda presidencial”. Ese es el símbolo que el habla del pueblo ha elegido para representar la presidencia de la república. Esta es la banda que el presidente se tercia en los actos oficiales, o más bien, en actos solemnes.

En ese mismo tenor el erario nacional recibe el nombre de “vaca nacional” porque en la mayoría de los casos, los dominicanos que han llegado al poder lo han hecho para “ordeñar” el erario en provecho personal o de sus allegados

Existe la expresión en el español dominicano para señalar que alguien aspira a la presidencia de la república; se dice que esa persona desea “terciarse la ñoña”. La expresión se estructura de ese modo porque el verbo terciar significa ponerse una cosa en diagonal o atravesada y, esa es la manera en que el presidente lleva la banda presidencial en los momentos solemnes.

En otros períodos de la historia republicana la presidencia ha recibido otros nombres. D. Emilio Rodríguez Demorizi en su libro Del vocabulario dominicano (1983), sustenta que “jicotea” es el nombre que recibió “la silla presidencial” en otros momentos de la historia dominicana.

El Diccionario de cultura y folklore dominicano (2005), asienta que la expresión “la ñoña” se utiliza para referirse a la banda presidencial. Esta es la opinión que trae Orlando Inoa en su Diccionario de dominicanismos (2010) cuando escribe que ñoña ‘refiere a la banda presidencial como símbolo distintivo del presidente de la República Dominicana’.

En este tono, los dominicanos entienden que “el palacio” es el asiento del Poder Ejecutivo. Joaquín Balaguer, quien ocupó la presidencia de la República Dominicana durante varios años llamaba la presidencia de “silla de alfileres”. Naturalmente con ese nombre daba a entender lo incómodo que resultaba el desempeño de las funciones de Presidente de la República.

En ese mismo tenor el erario nacional recibe el nombre de “vaca nacional” porque en la mayoría de los casos, los dominicanos que han llegado al poder lo han hecho para “ordeñar” el erario en provecho personal o de sus allegados.

En el caso en que usa “la ñoña” esta designación puede explicarse pensando en las caricias que se le dispensan a esta banda, esto es, la codicia que despierta el ejercicio de la presidencia en un país en el cual el régimen de gobierno es presidencialista por excelencia.

BALANCE

“. . .los Estados Unidos cuentan con un sistema de BALANCES entre los tres poderes creados por su Constitución. . .”

Son muchas las fallas en traducción que han pasado a la historia. Algunas de ellas se han repetido durante años y más años. Viene a la memoria la famosa traducción del francés al español para el famoso Comité de salut publique del siglo XVIII en Francia. Muchas personas incurrieron en el error de traducirlo por Comité de Salud Pública. En realidad era el Comité de Salvación Pública.

Otra famosa traducción del francés que es hartamente discutible es la famosa novela de Albert Camus L´étranger, traducido al español, El extranjero. Debió ser El extraño. Este significado lo tiene en español la voz del francés. La noción de este “extraño” en español es, “raro, extravagante, singular”. Sobre todo, este título que se menciona como alternativa más conveniente se concierta bien si se considera el contenido de la obra.

Este “balance” aquí es otro ejemplo de error repetido hasta la saciedad. Lo que hay no es balance. En este caso lo que hay es “equilibrio”; y si se desea, “contrapeso”.

Otra famosa traducción del francés que es hartamente discutible es la famosa novela de Albert Camus L´étranger, traducido al español, El extranjero. Debió ser El extraño

En español un balance puede ser hasta una mecedora. Es un movimiento de balanceo. Un estudio de hechos favorables y desfavorables. Es una confrontación del activo y el pasivo en una empresa. Es el movimiento de un lado a otro de una embarcación.

El equilibrio es la situación de armonía, estabilidad, sensatez y moderación entre cosas distintas. Este equilibrio entre los poderes en los Estados Unidos de Norteamérica es el resultado del contrapeso entre fuerzas e influencias. Es la estabilidad lograda mediante la interacción de los poderes y el respeto a sus respectivos límites de poder.

El error se ha repetido tantas veces que será muy difícil erradicarlo. Sin embargo, debe tomarse nota de lo expuesto más arriba para limitarlo; de forma tal que se arrincone.

ABAJO – DEBAJO

“Cuba es un país donde se levanta una pieza y DE DEBAJO DE ella sale una futura estrella del deporte de las bolas y los strikes”.

En su sentido esencial, abajo significa “hacia lugar o puesto inferior”. El sentido principal de debajo es “en lugar o parte inferior”. No obstante eso, abajo puede usarse para “en lugar o parte inferior”, para señalar estado o situación. Como consecuencia de lo escrito con respecto de las significaciones fundamentales de los dos adverbios, abajo generalmente es complemento de verbos que expresan movimiento.

Debajo acompañará a verbos que indican situación. Ese es el principio, pues existen casos en los cuales puede utilizarse indistintamente uno u otro adverbio.

Abajo lleva un sentido más abstracto y absoluto, al tiempo que debajo es de sentido más concreto y relativo. El último llevará siempre un complemento con DE, que puede ser explícito o implícito en tanto resultado de esas características.

En el estado en que se encuentra el uso de uno y otro de los adverbios será muy difícil que alguien pueda incurrir en un error censurable a excepción del mal uso de las preposiciones y los posesivos

Abajo no admite la preposición A inmediatamente antes. Por lo tanto debe decirse “de arriba abajo”, sin necesidad de la preposición A, pues esta está ya incluida en el adverbio.

Ahora bien, de acuerdo con el Diccionario integral del español de Argentina (2008), abajo desempeña más funciones en el español de ese país que los que se le atribuyen en el habla de otros países. En casos de esa índole habrá que tolerar ese uso porque es un uso generalizado en ese país y denota una tendencia aceptada o utilizada en Argentina.

El mencionado diccionario muy certeramente indica que abajo es ‘en una posición inferior en una jerarquía o en la escala social’. Añade además, ‘con una parte del cuerpo apoyada contra una superficie o en una parte inferior en una jerarquía o en la escala social’. Así mismo consigna que se usa ‘para expresar oposición o rechazo’. ¡Abajo la corrupción!

En el estado en que se encuentra el uso de uno y otro de los adverbios será muy difícil que alguien pueda incurrir en un error censurable a excepción del mal uso de las preposiciones y los posesivos. La preposición A delante de abajo; y, los posesivos a seguidas de este. Ejemplo de estos posesivos, *abajo mío, *abajo tuyo. Debe decirse y escribirse “debajo de mí” y “debajo de ti”.