Fue el Colegio La Salle que realizó la iniciativa de alfabetizar ciudadanos excluidos de Cienfuegos y otras barriadas. Desde los años 70 hasta nuestros días, cuando el conjunto de diputados de hoy, no estaba en política, varias organizaciones llegaron a Cienfuegos a donar ropas, alimentos, utencilios y más. El Hermano lasallista Alfredo Morales, se ingenió el lema originario de los Evangelios (Marcos y Mateo) y de la Opción Preferencial por los Pobres: “si se donan ropas, deben ser las mejores de cada estudiante”. Que nadie entregue ajuares roídos, sino los mejores atuendos de cada familia. Mis beneficiarios que nunca conocí en Cienfuegos, se sorprendieron pues Tía Teresa laboraba en la tienda de ropas Lacoste de Macy’s, New York.
Esta solidaridad no se redujo a simples donaciones caritativas, pues La Salle se encargó de trabajar la sostenibilidad social en Cienfuegos. Recuerdo que la empresa Mera, Muñoz y Fondeur (MMF) facilitó la construcción del Centro de la Juventud y la Cultura (CJC), donde 30 años después Carlos Alfredo Fondeur y el equipo del Plan Estratégico convocó asambleas para consensuar proyectos para esta comunidad. La PUCMM aperturó proyectos de salud y educación. Los gobiernos del PRSC y del PLD construyeron escuelas, hospitales y centros. Incluso hoy FONPER, CORAASAN y Obras Públicas tienen en operación varios proyectos. Diversas ONGs educaron los dirigentes comunitarios en empoderamiento ciudadano y toda una estrategia de gestión social fue implantada participativamente en Cienfuegos.
Hasta que un grupo de diputados y dirigentes comunitarios fraccionalistas varios de los cuales no tenían Cédula Serie 31, comienzan a divulgar informaciones sin fundamentos; planteando fragmentar nueva vez la ciudad y el municipio de Santiago, era un consenso social que Cienfuegos y los barrios de la zona sur (Pekín y Cristo Rey), en la escasez de obras que ejecuta el Estado en Santiago, eran las comunidades más beneficiadas con proyectos estratégicos. Incluso hoy se concluye el paso vial elevado de entrada a Cienfuegos y CORAASAN organiza la construcción del nuevo acueducto por bombeo.
Aunque usted no lo sepa, la propuesta de “Santiago Oeste” no se ubica cardinalmente en el Oeste, sino en el Noroeste, lo que por definición geográfica es un contrasentido. El conjunto de 58 parajes y barrios y su respectiva población, que los fraccionalistas se adicionan caóticamente para crear un supuesto municipio, no están reconocidos por la Oficina Nacional de Estadística (ONE), ni existen en la cartografía de esta entidad, ni tampoco están avalados por planos y mapas del Instituto Geográfico y Cartográfico Nacional “José Joaquín Hungría Morell”, creado por la Ley 208-14. Estamos ante una acción sin precedentes que pretende generar una nueva metástasis territorial que profundizará el desorden urbano y según la cartografía satelital actualizada que poseemos, provocará crecimiento hacia zonas de alta vulnerabilidad y riesgo.
La propuesta de fraccionar Santiago de los Caballeros, pretende poner en operación por primera vez en la República Dominicana, el fraccionamiento de una ciudad. Pocos lo entienden, pero si se valora el mapa ideado por los fraccionalistas, lo que se afecta es la ciudad. Cuando se han generado otras creaciones de municipios, incluyendo la que aconteció en Santo Domingo, las diversas propuestas armonizan lo urbano y rural, esta no. En consecuencia, no podemos permitir que el furor electoralista y clientelismo, fraccione la ciudad, y sobre todo uno de sus principales asentamientos urbanos, el más históricamente protegido por Santiago: Cienfuegos
La nación registra 32 provincias, 158 municipios y 233 distritos lo que significa que en las últimas décadas, se han duplicado las demarcaciones territoriales en más de un 100%. Nuevos territorios que no tienen identidad, ni personalidad territorial. En prácticamente todos los casos, las delimitaciones de las nuevas unidades administrativas adolecen de criterios técnicos, de precisión y coherencia, todo lo cual se traduce en caos generador de ingobernabilidad, corrupción, favoritismos políticos y la ausencia de una política realmente descentralizadora y respetuosa de la sociedad local. En la otra seguimos.