La seguridad ciudadana es una responsabilidad esencial del Estado; la integridad física de las personas, sus propiedades y bienes; pero sobre todo lo más preciado: la vida. Qué tanto valoraría la sociedad que las máximas autoridades de la Nación tengan respuestas efectivas a tan importante tema-problema.
¿Es la seguridad ciudadana un problema de la Policía Nacional? ¿Qué tan responsables son los jueces y fiscales? ¿En qué contribuye el flamante Departamento Nacional de Investigación, DNI? ¿Y el Ejército Nacional u otras instancias de las Fuerzas Armadas, tales como los organismos de investigación especializados J2 y el G2? ¿Qué tan efectiva es la seguridad ciudadana en relación a los accidentes automovilísticos, especialmente las alarmantes estadísticas de accidentes de motocicletas? ¿Por qué somos el segundo país en el mundo en muertes provocadas por automóviles? ¿Por qué la vida y bienes han alcanzado tan alto grado de inseguridad que alarma a todas y todos? ¿Cómo interpretar que a la fecha más de 20 policías han sido asesinados en el cumplimiento de su deber?
Como han demostrado expertos nacionales e internacionales estudiosos de la seguridad ciudadana en la República Dominicana, no es sólo un problema policial o aún desde esa perspectiva, no se puede dar una respuesta simple como cambiar el Jefe de la Policía Nacional.
Si bien muchos de los problemas hay que buscarlos y enfocarlos desde la óptica policial, no debe satanizarse a la Policía Nacional y mucho menos pretender que la solución principal está en un “jefe” que produzca la gran transformación, el gran cambio esperado.
Como la generalidad de los problemas del país el tema-problema de la seguridad ciudadana tiene profundas implicaciones de gerencia estatal. No son pocos los casos de delincuentes que han tenido un trato benigno del sistema de justicia y salen libres para volver a delinquir. No se explica ni justifica la inutilidad en cuanto a la seguridad ciudadana de varias instituciones como el DNI, G2, J2 y otras instancias de las Fuerzas Armadas y que junto a la Policía se estima en más de 50 mil efectivos y que sin guerras a la vista tan poco aportan para dar mayor seguridad a la sociedad dominicana.
La seguridad ciudadana como tema capital del Estado demanda de una solución integral y de profundidad en el corto, mediano y largo plazos.
Se necesita de un Plan Maestro de Seguridad Ciudadana en el marco de la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030, que a partir de un riguroso diagnóstico indique las herramientas y el camino para tan esperada contribución a la sociedad.
No es sólo la Policía.