Siempre nos meten gato por liebre.
Después del trauma del viernes 13 en Paris… ¿se acuerda alguien del avión ruso?
Una pregunta interesante: ¿Ha visto alguien alguna foto de los cadáveres de los terroristas “suicidados” en Francia? ¿No será todo orquestado para aterrorizar al mundo?
Se nos entrena para que aceptemos las noticias como “ciertas” pero no analizamos la metodología empleada por los que nos dan las noticias. Alguien ha descrito el fenómeno como “la libertad de la prensa contra la libertad de la empresa”.
El periodismo profesional se ha convertido en un periodismo de conveniencia, “preferimos olvidar para no molestar”, dice la periodista dominicana, Margarita Cordero. A veces esto se reduce a pura propaganda barata.
Por ejemplo, apenas dos días después de la tragedia del Airbus A-321 ruso (¡construido precisamente en Francia!), Barack Hussein Suetoro Obama declaró desde Washington que “probablemente se trataba de una bomba plantada por yihadistas”. Lo que no dijo fue de cuales jihadistas se trataba… ¿de los jihadistas “buenos” o de los jihadistas “malos”.
Curiosamente, unos días antes de esta tragedia, acaecida a los 23 minutos del avión despegar del aeropuerto de Sharm el-Sheikh con 224 personas a bordo, Barack Obama había enviado un regimiento de “fuerzas especiales” (“boinas verdes”) a “asesorar” a los “yihadistas moderados” que combaten contra el gobierno de Bashar al-Assad.
“Este derribo del avión ruso es una venganza contra el gobierno de Vladimir Putin, ahora que aviones rusos están bombardeando a los “yihadistas fanáticos” en Siria”. Así opina Giomar, una joven sirio-americana que estudia en la Universidad Internacional de la Florida (FIU).
Mientras tanto, Ashton Carter, el Secretario de Defensa estadounidense, declaró desde California que “Rusia se ha involucrado en actividades provocativas y tenemos que defendernos y defender a nuestros aliados de la agresión rusa. No queremos, sin embargo, otra guerra fría ni una guerra caliente contra Rusia”.
El Papa Francisco ya ha declarado desde el Vaticano que “estamos presenciando la Tercera Guerra Mundial”. “No es una guerra tradicional, sino una guerra vicaria e indirecta, abierta en varios frentes a la vez”.
Algo parecido sucedió cuando el MH 17 de la Malaysian Airlines fue derribado en pleno vuelo sobre Donetsk, Ucrania, el 17 de julio del 2014. Suetoro Obama inmediatamente declaró desde Washington que “probablemente el avión había sido derribado por los rebeldes pro rusos”. Algo similar afirmó el gobierno ucraniano desde Kiev, acusando directamente al gobierno ruso del derribo del avión malasio.
Para tener una somera idea de la metodología empleada por la mayoría de los periódicos y de las agencias noticiosas (en todas partes se cuecen habas), analicemos las palabras de Ban Ki-Moon, el Secretario General de la ONU, a raíz de una entrevista en suelo español, publicada en el periódico “El País”. Los demás diarios españoles ni siquiera mencionaron el hecho.
Estas son las palabras de Ban Ki-Moon: “La insistencia del presidente Barack Obama de que el presidente de Siria, Bashar al-Assad, sea remplazado unilateralmente, sin contar con la aportación del mismo presidente sirio, está fuera de lugar. El futuro del presidente Bashar al-Assad debe de ser decidido por los propios sirios. Lo que está sucediendo en esa región es un crimen de lesa humanidad”. ¿Leíste esta noticia en alguna parte?
En realidad, Ban Ki-Moon ya había declarado eso mismo en Ginebra unos días antes, pero esto no se mencionó. Y no solamente no se mencionó, sino que la noticia en “El País” aparece bajo el título de “Cataluña no es un territorio con derecho a la independencia”, poniendo esta declaración en boca de Ban Ki-Moon.
El hecho es que las palabras de Ban Ki-Moon, cuando le preguntaron sobre el conflicto catalán, fueron las siguientes: “La cuestión de Cataluña es muy delicada y, como Secretario General de las Naciones Unidas, no estoy en condiciones de hacer ningún comentario, porque esta es una cuestión interna”. (Global Research.com-
3 de noviembre, 2015).
Las palabras de Ban Ki-Moon aparecen hacia el final (no necesariamente al principio de la entrevista), dándole así menos relevancia a lo que dijo. Esta es una táctica típica de los medios informativos, una manera de “debilitar” una noticia, dándole menos énfasis e insertándola estratégicamente (ni al principio ni al final), para que así pase casi desapercibida.
La clave está en la percepción, uno de los principios de la comunicación periodística.
El énfasis de la noticia estaba en la declaración del Secretario General sobre la obsesión de Obama de desembarazarse de Bashar al-Assad, no en el conflicto catalán, pero se usó este conflicto (que era en realidad lo que le interesaba al autor de la noticia) para inmiscuir a Ban Ki-Moon en el tema del independentismo catalán.
Otro ejemplo al canto fue el frenético barullo informativo a raíz de la pandemia del Ebola. Nunca se informaron las causas reales del Ebola, un virus prefabricado y “creado de antemano” con fines inconfesables, en poblaciones vulnerables, tradicionalmente desnutridas y con sistemas inmunológicos deprimidos. (Pandemias-Acento-19 de junio del 2014).
Lo mismo había sucedido antes con el virus de la fiebre Aviar al principio del gobierno de Barack Hussein Obama (2009). Este, en visita oficial en Méjico, mucho antes de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara al virus “pandemia”, se adelantó a los hechos y comenzó a aconsejar desde Méjico: “Vacúnense! ¡Vacúnense!
Los aeropuertos se convirtieron de repente en salas de hospitales, con pasajeros que andaban con caretas para no contagiarse del virus.
Algo mucho peor fueron las noticias sobre el el virus del Ebola. ¿Cuál era el interés real detrás de todos esos cucos mete-miedos de propagandas terroríficas?
Como por arte de magia aparecieron las vacunas contra todos esos virus mata-gente. Ahora se están haciendo trillonarios más laboratorios mundiales y morirá más gente.
La última vacuna ha sido en Brasil, el país más afectado en América por el virus de la “Zica”, otro virus inventado, otra variación del dengue. ¡Menos mal que “zica” no se escribe con “s”!… aunque, para los fines que nos ocupan, en eso es en lo que nos están convirtiendo. (“Population Control”, Jim Marrs.com)
De hecho, “Zica” es el nombre de unos montes en Uganda, África, donde dizque se descubrió originalmente el virus de la Zica, como también dizque se descubrió el virus del Ébola en Liberia. El nombre original de “Ebola” es el nombre de un valle donde corre también un río, ambos del mismo nombre, “Ebola”, en el Congo Belga (Zaire).Todos estos lugares son laboratorios abiertos al aire libre con sus conejillos de india siempre prestos a que experimenten con ellos.
Los medios nunca informaron que, al mismo tiempo que aparecían estos virus, “coincidencialmente” desaparecían los murciélagos y las abejas de las zonas afectadas. No olvidemos que los murciélagos se tragan a los mosquitos que transmiten los virus y que la jalea real, el propóleo y el polen de las abejas son los mejores nutrientes de la naturaleza, reconstructores del sistema inmunológico. Desapareciendo ellos, más fácilmente se transmitían los virus. Tampoco olvidemos que, destruyendo el equilibrio de los sistemas que apoyan la vida en el medio ambiente, se multiplican más fácilmente los virus y las bacterias. ¿Leíste esto en alguna parte?
Leamos siempre lo que se nos informa “cum granu salis” (con un granito de sal), para poder discernir y separar lo que se nos dice del “por qué” se nos dice y la manera en que se nos dice, para que no nos sigan metiendo siempre gato por liebre