La eliminación de las fronteras, de las identidades culturales, de las particularidades regionales entre otras cosas, es una idea que parece muy bonita (y muy peligrosa). De la Comunidad Europea, como sabemos, hoy sólo queda en común el Euro. Las naciones defienden fieramente sus particularidades, ya que atentar contra ellas es el fin.

A la canciller Merkel debe la Europa de hoy una inmigración improvisada, sin ninguna planificación, otro espectáculo político, sin duda. Lo peor de este tipo de situaciones, es que el que sale perjudicado es el que se encuentra a la merced de los acontecimientos en este caso, el inmigrante, a quien se utiliza y luego se le abandona en una especie de “no men’s land” sin resolverle absolutamente nada, que es lo que está sucediendo con esa inmigración varada en varios países, y soñando que algún día ”llegarán”.

Mientras un discurso sirva ciertos intereses, lo haremos pasar; cuando ya no interese, predicaremos lo contrario. Las masas siempre seguirán.

Así, en medio de este revuelo en la política internacional, las Naciones Unidas anuncian que se firmará un Pacto que permitirá una “ mejor gestión” de la inmigración.

¿Y quién firmará ese pacto?

La Gran Bretaña fue la primera en retirarse de la Unión, previniendo lo que vendría; el resto de Europa se niega a recibir más inmigrantes, y Trump anunció desde el principio que no firmará.

¿Adónde irán entonces los candidatos al destierro?

¿Quien firmará ? Los países como el nuestro, totalmente dependientes de la garantía ofrecida por la ayuda internacional de que seguirán en el Poder a cambio de ciertos favores.

Hay que saber que el Cristianismo llegó a echar raíces porque servía los intereses de varios grupos de Poder de la época, ¿por que ?: era más fácil dominar una mayoría con una sola creencia, que una sociedad dividida en creencias múltiples como eran las sociedades politeístas

El pacto de la ONU no es más que otra de las maniobras de la Globalización, una globalización de la que nos hablan desde hace décadas y sobre la cual se han lanzado muchos a escribir sin ahondar demasiado en lo que hay tras bastidores. El fenómeno Globalización ha estado tejiéndose durante años. El objetivo último del mismo es llevar las diversidades del planeta a una Unidad en la cual, idealmente, desaparecerán todas las diferencias.  Sin embargo atención, no creamos, inocentemente, que se trata de un proyecto loable, lleno de bondad para la humanidad, para que “vivamos todos como hermanitos unidos por el amor de Dios”.

No querramos saber lo perverso, lo macabro que encierra dicho plan.

Primero las Naciones Unidas fueron creadas por las grandes potencias y, no nos engañemos, jamás han trabajado ni trabajarán para El Bien de la Humanidad,eso es discurso para entretener el público y la prensa. El rol de las Naciones Unidas es defender los intereses de las grandes potencias. Estas ya no necesitan ni quieren inmigrantes, en consecuencia lo que veremos es lo que está pasando en Mexico: los inmigrantes quedarán varados en alguna parte, esperando poder pasar ciertas fronteras,  pero nadie les resolverá nada porque ya no interesan a nadie, no se les necesita. Inocentemente ellos gritan que mueren de hambre pero eso a nadie le importa. Se quedarán donde están y el país que les ha tocado tendrá que hacerse cargo de ellos quiérase o no.

Volviendo al tema de la globalización, de la que no se ha dicho todo, hay que saber que el Cristianismo llegó a echar raíces porque servía los intereses de varios grupos de Poder de la época, ¿por que ?: era más fácil dominar una mayoría con una sola creencia, que una sociedad dividida en creencias múltiples como eran las sociedades politeístas. De aquí que hace tiempo nos vienen “educando”  a eliminar las diferencias. Primero fue el feminismo, ahora es el LGTB, el multiculturalismo, un idioma único, una educación orientada hacia ciertos propósitos, y así sucesivamente. Lo peor es que nos lo harán tragar porque si no, no estamos “al día”, somos reaccionarios.

No nos engañemos, lo que dijimos antes sobre la perversidad y el maquiavelismo que esconden estos discursos humanitarios con los cuales tienen engañado a todo el planeta, eso hay que desenmascararlo, hay que decir a los cuatro vientos que, de manera general, las finanzas mundiales sirven todas las causas; que las mismas manos subvencionan  las guerras entre contrarios, que la revolución Bolchevique fue posible por el financiamiento de sus opositores, que quienes subvencionan el “terrorismo” son los mismos que lo combaten, y que hoy el discurso humanitario puede declarar su apoyo a la Palestina y al mismo tiempo proveer los fondos para que la “pobre Israel“ pueda existir porque siempre ha sido “víctima”. Y todavia hay que decir que otro plan macabro es eliminar mínimo más de 3,500,000 personas a diario en el planeta, porque somos demasiados y molestamos a los ricos.

Y hay mucho más.

Rosa María Andújar Persinal

Santo Domingo, 4 de Diciembre 2018

(*) p.s. Nuestro artículo se escribió previo a la noticia de la no participación del país en la firma del pacto, iniciativa que saludamos con beneplácito.