Las negociaciones sobre cuestiones ambientales no difieren mucho del resto de negociaciones, pero debido a la naturaleza transfronteriza de la mayoría de los problemas medioambientales exige que las negociaciones tengan un carácter multilateral.

Hay notables ejemplos de negociaciones medioambientales de carácter regional, como las convenciones sobre los mares regionales negociadas bajo el auspicio del PNUMA, pero por otra parte están las negociaciones medioambientales de carácter universal que cuentan de igual manera con ejemplo bastante sobresalientes como aquellas negociaciones sobre el agotamiento del ozono, sobre residuos peligrosos, el cambio climático y la biodiversidad, por ejemplo.

Algunas negociaciones abordan amenazas o problemas que no pueden prevenirse o solucionarse de manera individual por un único Estado, sino que requieren acción colectiva, para lo cual los Estados están llamados a desarrollar enfoques y estrategias de respuesta de manera mancomunada.

Cuando los gobiernos participantes comparten una visión común, el acuerdo sobre dichos enfoques y estrategias será más fácil de alcanzar, pues todos se ven afectados por la cuestión de forma similar o son igualmente vulnerables.

La situación se complica cuando las circunstancias son muy distintas, pues las partes o países involucrados no se sienten en la total necesidad de participar. El grado de exposición a una cierta amenaza es un elemento clave a la hora de determinar cuánto se involucrarán los gobiernos en las negociaciones medioambientales.

Un enfoque (que en cierto sentido) ha sido clave del éxito en muchas negociaciones sobre medio ambiente, es el concepto de diferenciación de compromisos y obligaciones, por ejemplo “el principio de responsabilidades compartidas pero diferenciadas”, que ha sido el centro de las negociaciones de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático.

Mientras que las negociaciones sobre cuestiones ambientales comparten una serie de elementos con el resto de negociaciones, se pueden destacar varios elementos importantes que las distinguen del resto, como pueden ser las que versan sobre derechos humanos, comercio o desarme.

Entre estos elementos están: el papel de la ciencia y de los científicos, la presencia en las agendas de una serie de asuntos específicos del sector junto a otros de carácter transversal,  las conexiones y el apoyo institucional, la apertura para que interesados y grupos de presión participen, así como el papel de los medios de comunicación y la opinión pública.