Durante el mes de febrero conmemoramos dos acontecimientos importantes a nivel internacional que vincula a las mujeres. El Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, además el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia. Pero la connotación de estas fechas, es el poder resaltar al ser más especial sobre esta tierra, que es un verdadero ejemplo de fortaleza y resiliencia.
El establecer fechas específicas, para destacar el histórico rol desempeñado por las mujeres, es importante; lo transcendental aquí es el reconocer primeramente a todas las que han sobrevivido por esta ancestral práctica de extrema violencia de género y un claro ejemplo de violación a los Derechos Humanos.
Como lo es la mutilación o ablación genital femenina. Práctica que desafortunadamente aún se realiza por razones religiosas y culturales enu nos 30 países de África y Oriente Medio y en alguna zona de Asia y América Latina. La segunda, sintetiza el alcance del poder femenino en las ciencias, pese a todas las limitaciones que aún enfrentan las mujeres por aspectos religiosos, etnia, raza, pobreza extrema, dependencia emocional, etc.
investigaciones de la Unesco arrojaron que “El 29% de las personas dedicadas a las ciencias y la investigación son mujeres”. Y que aproximadamente la mitad de las investigaciones a nivel mundial son lideradas por mujeres. Por otra parte, datos del Banco Mundial, arrojaron en el 2010 que, “El papel clave que ha tenido la fuerza laboral femenina en la última década, colaboró a reducir un 30 % la pobreza extrema en América Latina”.
En este mes de febrero, conmemoramos a todas aquellas que luchan por ser escuchadas y respetadas
En el contexto actual, la crisis sanitaria del coronavirus ha perjudicado directamente a niñas y mujeres en todo el mundo. A pesar del fundamental liderazgo ejercido por estas, ya que el “70% de las personas que trabajan en el sector salud son mujeres’; así como también por el alto índice de contagios, mortalidad y los efectos colaterales del virus en ellas experimentan.
Según ONU-Mujeres, “los impactos de las crisis nunca son neutrales” en cuanto a género se refiere. Y la crisis por el covid-19 no es la excepción”. Ninguna de las situaciones que cada día tratan de minimizar los aportes de las mujeres en la sociedad podrían soslayar sus trascendentales aportes; porqueellassiguenforjandosudominiomedianteimportantesiniciativas para proteger la población; como en el caso de las naciones que en la actualidad son gobernadas por mujeres, como Alemania, Taiwán, Nueva Zelanda, Finlandia.
La capacidad de resiliencia de ellas, ha sido determinante en un mundo donde los avances científicos y tecnológicos suscitan grandes transformaciones que equipara altos niveles de rendimiento, disciplina y tenacidad. Características propias de las mujeres. por ello no es de extrañar la cada vez más presencia de las mujeres en altos puestos gerenciales en las principales empresas del mundo.
Estas dos fechas resaltan a aquellas cuya fuerza de voluntad para sobreponerse ante la presión de grupos sociales que pretender diezmas la importancia de estas en sociedad es cada vez más heterogéneas; canibalizando los esfuerzo de justicia social, equidad e igualdad de género.
La historia la escriben los hombres, y es desafortunado que en la era actual, se pretenda condenar al ostracismo a aquellas cuyo único “pecado” es su capacidad de continuar avanzando; pese a los esfuerzos de mantenerlas en el anonimato dentro de una sociedad que institucionaliza las cosas como son y no las que deben ser.
En este mes de febrero, conmemoramos a todas aquellas que luchan por ser escuchadas y respetadas en una época donde la igualdad de género es el activo sostenible que reduce la ensanchada brecha de la discriminación a un ser de luz llamado mujer.