La Comisión de Saneamiento en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, UASD, sea cual sea, la oficialmente ya aprobada por Consejo Univesitario o la que disponga la Federación de Asociaciones de Profesores de la UASD (FAPROUASD), después  de obtener las 2/3 partes necesarias para cambiar la ya existente, tiene que reunirse con todos los aspirantes a la rectoría, para que firmen un pacto de apego, respeto y continuidad al proceso de transformaciones y de saneamiento que se inicia. De no ser así, estaríamos poniendo parches en los problemas fundamentales y seguiríamos igual o peor en la UASD.
Son muchos los entuertos que hay que resolver. Debemos entender que emprender un proceso de saneamiento en la UASD, amerita tener coraje y decisión política, ya que se trata de un fenómeno necesariamente traumático que lleva su tiempo y es por procesos que suelen ser lentos y que deben ser indetenibles.
Uno de los problemas más graves en la UASD que engendra el clientelismo y vicios procedimentales en selección de las autoridades y en la designación de funcionarios-as, es la forma en que se eligen las autoridadesdes en la UASD, por lo que es URGENTE cambiar la forma de elegir las autoridades en la UASD. En vez de ser elegidas por el voto directo, deben ser elegidas por evaluación de expedientes, donde sea obligatoria la cualificación de los-as candidatos, y se evalúen valores académicos, gerenciales, éticos, morales y sus perfiles, entre otros aspectos, donde el grado mínimo que deba tener cada asapirante a rector, o a las vicerrectorías en nuestra academia, sea el grado real de doctor(PhD), no el falso doctorado de grado otorgado por algunas universidades dominicanas, incluyendo a la UASD.
Eso alejaría de los predios de la UASD al "Hombre o a la mujer del Maletín". Además, permitirá que el académico elegido o la académica elegida, llegue a dirigir sin "amarres" y no se vea obligado a tener que "cumplir con la compra de promesas" por los millones de pesos invertidos en la campaña. Ahí reside una de las causas fundamentales de la "corrupción" que, de alguna forma, se replica en la UASD en diferentes áreas (administrativa, académica, estudiantil e institucional). Necesariamente hay que cambiar la forma de elegir las autoridades en la UASD, si en verdad se quiere sanear , de lo contrario, todo sería una caricatura de intenciones para entretener a incautos-as.
Las elección de los-as directores-as de las Escuelas docentes debe ser también por expedientes, al igual que el rector y los vicerrectores, menos los coordinadores de cátedras .
Por qué mi insistencia en la transformación de la selecciones en la UASD, porque es una de las fuentes primarias donde se generan la mayoría de las distorsiones institucionales y gerenciales. Una vez corregido ese cáncer institucional, a todos los puestos en la UASD se debe llegar por concursos y eso obliga a transformar los manuales de funcionamiento administrativo y los reglamentos de puestos y funciones, con el objetivo de aplicarlos respetando sus procedimientos. No es momento de buscar culpables, es momento de actuar con coraje, razonamiento y decisión política, por el bien de una academia que no merece seguir secuestrada por "pandillas", que nada más han tenido como aval sus "aportes financieros" y la oferta de votos que, como borregos, se endosan para consolidar sus cuotas de poder en cada gestión universitaria, dentro de una academia que ya no aguanta más ese modelo de truchimanerías y chantajes.
La UASD está obligada a entrar a un proceso de transformación y saneamiento desde adentro, porque de lo contrario, si parte desde afuera, el Estado va a seguir empujándola a caer en su propia red de falencias y mezquindades, hasta situarla en la autodestrucción , y no podemos permitir que eso suceda. Entremos ya al inicio de los procesos para los cambios, sin miedo, aunque nos duela, eso es por necesidad. Démosle sentido y razón de ser a esta "autonomía" que hoy se diluye en la irresponsabilidad, a la vista del mundo.
Si ese proceso de saneamiento y de cambios se inicia realmente en esta gestión, el actual rector, el doctor Iván Grullón Fernández, pasaría a la historia como el FACILITADOR del saneamiento y de los cambios en la UASD. El país y el mundo se lo agradecería. Iniciemos ahora con la forma de elegir las nuevas autoridades para el periodo 1922/1926. Es el momento de pasar de las palabras a los hechos. Dejémonos de chácharas y arranquemos con los irreversibles cambios o transformaciones  en la UASD.