In memoriam mi tia Niní Branagan Elías. (*)
1/ El sueño constante con mi Tía.
Cuando yo era niño, que realmente no hace mucho porque nunca he renunciado a serlo, tenía una tía llamada Niní, cariñosa, con mucho sentido del humor y perredeísta hasta la muerte.
Ella me llevó a los primeros mítines del Parque Colón, en momentos de peligros duros cuando los esbirros del trujillato aún salían a las calles a matar a mansalva, con una cobardía y una amargura de gente que no se resignaba a entender que la dictadura había sido derrocada con el ajusticiamiento del tirano Trujillo, el 30 de mayo de 1961.
Yo vivía ese tiempo con la ilusión infantil de que ir cada mitin del PRD me hacía importante como figurilla y la obsesión era tan grande, que cada vez que retornaba a la casa, en las escaleras de la Avenida España 17 B, con mi lápiz del la escuela pintaba en las paredes esas siglas sin cesar, PRD, PRD, de modo compulsivo. Eran garabatos de párvulo casi militante, todo ello se lo debo a mí desaparecida tía Niní, fabulosa y risueña.
2 / Un supuesto "caudillo " de billetera y olor del dinero
Desde el 20 de julio pasado, día de la "convención" del PRD de Miguel Vargas Maldonado, su chinchorro político, estoy soñando con mi tía Niní, porque ese día pletórico de sangre del PRD, de nuevo en las calles, me recordó aquellos momentos de 1961, del Parque Colón y a los esbirros trujillistas en acción.
Cuando veo los videos de ese día, no puedo más que pensar en la ironía de la declaraciones de este personaje patético y ramplón, que se llama Miguel Vargas Maldonado
En esos tiempos existía un señor que era ebanista o mecánico de origen popular profundo, llamado Balá, calié, informador y crápula trujillista de choque.
Cuando veo los videos de ese día, no puedo más que pensar en la ironía de la declaraciones de este personaje patético y ramplón, que se llama Miguel Vargas Maldonado.
Esa "convención" fue la “mejor fiesta de la democracia” sangrienta y violenta, como la supone Miguel Vargas Maldonado (otros dicen Elmorado).
¿Estoy soñando de nuevo, ha dicho que fue una fiesta democrática a cajetazo y tiros y heridos puros?
Pues entonces este señor será familia del Conde Drácula, que cuando convida a fiestas, son indispensables la sangre y la muerte.
Miguel Vargas Maldonado no quiere entender, que él no es caudillo por cuenta propia o por encanto, que la fuerza de su quehacer político está sustentado en el financiamiento del todo pago y veremos, que su "caudillismo" si lo tiene, que no lo tiene, tiene el color de los billetes según denominación.
En su delirium de presidencia a como dé lujar y caiga quien caiga, sigue la peor ruta: la de un fascista, facha brutal con fuerza y armas prestadas que pagan los contribuyentes, esos mismo a los que sus fascinerosos agreden.
3 / Miguel Vargas Maldonado: perder la guerra antes que la batalla
Cuando escribo estas líneas pienso en su familia, en el efecto que debe tener emocionalmente toda esta mala prensa que debe tirarse encima. Y lo hago porque aún con el peor enemigo, hay que situarse en el lado humano.
Pero al mismo tiempo, en mi reflexión me digo:
¿El mismo Miguel Vargas Maldonado habrá reflexionado lo que ha significado todo este espectáculo de sangre y mal gusto para su imagen futura y en la historia política del país?
La memoria de los medios no le favorece y ese es un archivo que no podrá borrar, nunca podrá borrarlos.
¿Quienes están a su lado no tienen luces para hacerle entender que no ha quedado muy bien parado en todo esto que refiere la memoria del país a su peor parte de la historia en la lucha contra el remanente del trujillato?
4 / Los halcones de Miguel Vargas Maldonado entre México del 68 y el Balá turbero del 1961
Varias coincidencias.
Anoche recordaba un excelente documental soviético que quería revisar antes de escribir este artículo, me refiero al " Fascismo Ordinario "(1965) de Mijail Romn.
He vuelto a ver también, a ver un documental que se llama "El Grito" (1968 ) y “2 de Octubre de 1968. "
Que tratan sobre el tema de la represión en la Plaza de Tlatelolco,en Ciudad México.
Retrato de fascinerosos contra masas
La razón por la que invocó estos temas es porque el espectrum y pandemonium de lo acaecido en la "Convención", me hace pensar en esas turbas camufladas preparadas para disparar a masas no armadas, es decir a civiles.
Los fascinerosos operan en la calle con direcciones y órdenes previas y la orden de disparar, no se da en el mismo momento.
Ahora se dice que el gobierno tenía que proteger el orden público, claro, pero el orden público se protege con personas uniformadas que representen el orden establecido, es lo que se estila.
Lo que vimos el 20 de julio, fue a turberos, como en 1961, esos herederos de Balá, el matón antisocial predecesor de las bandas de Balaguer y sus generales asesinos.
Así las cosas, Miguel Vargas Maldonado se convierte en el heredero máximo de Balá en el siglo XXI de la política dominicana. Un Balá rico –porque el otro era un pobre diablo de la clase obrera– que en orgía de sangre y autoproclamación como presidente del PRD, está convencido de que hizo un "fiestón de la democracia”.
La cobardía también esta repleta de armas y discursos hueros, propia de los nuevos herederos de la represión en nombre del asalto a un partido.
Al final se descubre en este dantesco escenario algo positivo: El heredero de Balá en el siglo XXI, Miguel Vargas Maldonado, al menos ha mostrado las fauces y en su propio carnaval de fatalidad, su antifaz ha rodado en la propia sangre que otros vertieron por él. (CFE)
(*) Mi tía Niní, me llevaba a los mítines de todos los partidos, 1J4, Unión Cívica, hasta que se abonó con gran entusiasmo y pasión al PRD. Partió hacia New York con su hijo Tony, hacia 1962 ó 1964, allí falleció. En mis dos rodillas tengo su recuerdo aún: un camión de la Fuerza Aérea ametralló en el Parque Colón. Ella me arrastró desesperada hacia donde estaba la Cafetería Colón, hoy Palacio de la Esquizofrenia, a justo título y bautizo de Don Chito Henríquez. Allí nos protegimos hasta que amainó el ametrallamiento.