En sus estrategias en torno al cambio de visión que requiere el país para motorizar políticas y estructuras que le permitan mayores grados de desarrollo guiado por la solidez institucional, la paz y la justicia social, el Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD) contempla de alta prioridad, dar paso a cambios sustanciales que impulsen revolucionar el procedimiento y la metodología que actualmente se utilizan para la formulación y ejecución del Presupuesto Nacional.
En dicho propósito, visualiza de relevante importancia, tomar un nuevo rumbo utilizando de columnas a las entidades promotoras y planificadoras del progreso sustentable, para promover un proceso de concertación en la que incidan el campo y la ciudad, pobres y ricos, tras el correcto encauzamiento de nuestra nación hacia rutas seguras en sus metas pro alcanzar mayores grados de desarrollo y de bienestar social.
Lo enmarcado lo estima indispensable, para facilitar vencer sobre bases firmes los perjudiciales resultados que ha arrojado elaborar presupuestos orientados por directrices y criterios personales y/o producto de meros criterios de determinados núcleos de personas, además, para poner a disposición de los técnicos a quienes se les encarga elaborarlos, una correcta planificación y evaluación de las necesidades y prioridades de las diferentes comunidades y sectores que integran las regiones que conforman el territorio nacional.
Lineamientos generales sugeridos por el CRD:
El accionar que organismo de desarrollo sugiere, lo vez ciertamente trazable, haciendo posible la creación de un método regulatorio y efectivo que propulse iniciativas y estructuras que permitan un diseño e implementación eficaz del presupuesto, para que el Estado y los estamentos que lo componen, puedan asumir y cumplir cabalmente su rol político y social, para encausar a las dominicanas y dominicanos hacia rutas que hagan viable el progreso social sustentable.
Fórmula que concibe, para poder encarar las debilidades institucionales que padecemos, además, con el propósito de obtener la consolidación de los presupuestos participativos, insertando en los equipos de trabajo del gobierno central y de los gobiernos locales que formulan y ejecutan los presupuestos a las principales instituciones y agentes del desarrollo local, regional y nacional.
Acciones trazadas por el CRD sobre la problemática:
El CRD en sus diferentes estudios realizados por casi tres décadas en torno a la problemática y sus soluciones, recoge como tarea principalísima, incrustar en nuestra vida institucional una rotura absoluta con los presupuestos verticales, productos de deseos y voluntades personales y/o de enfoques de determinados grupos de personas, para guiarnos por un sendero que viabilice la formulación de presupuestos horizontales y equitativos, en donde el Poder el Ejecutivo, los demás poderes del Estado y los distintos promotores sociales y políticos, se aglutinen para aportar lo mejor de cada cual, para engendrar cada año, el surgimiento de un instrumento reivindicador y sustentador de la paz y el real desarrollo.
Objetivos que ve de inmediata ejecución, mediante la utilización en su mayor plenitud de las capacidades y dotes que detentan los excelentes recursos humanos que tiene el gobierno central y los gobiernos municipales, sin un correcto aprovechamiento, a los cuales estima indispensable, agregarles por soportes fundamentales, los que concentran la sociedad civil y nuestras entidades educativas, dotados de una alta vocación de servicio y calificación técnica para orientar el país hacia mejores horizontes.
Como columnas de estos objetivos y estrategias que estima el organismo urgente implementar, para el Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD) es de alta prioridad una nueva forma de pensar, que conduzca a nuestra nación por un rumbo que le permita motorizar los urgentes correctivos que requieren la formulación e implementación de su presupuesto nacional y los presupuestos municipales, para así cumplir exitosamente los retos resultantes de los requerimientos de las presentes y futuras generaciones, además, para acoplarse a las exigencias que le impone una eficiente sustentación del desarrollo sociopolítico y el socioeconómico.