En esta ocasión tengo la motivación de comentar un poco sobre la participación del Ministro de Turismo ante la Cámara Americana de Comercio del pasado miércoles 19 de los corrientes, en la que expresó su entusiasmo y satisfacción por el crecimiento que ha obtenido este importante renglón de nuestra economía.
Un dato importante que ofreció fue que el Gobierno y el Ministerio tienen la meta de que el número de habitaciones hoteleras sobrepasen la cantidad de 80,000 unidades para este año 2017, a fin de aumentar también la cantidad de visitantes y elevar la participación de este sector en la composición del PIB, el cual está en los actuales momentos en casi un 7% con unos $6,700.0 millones al año.
Me permito recordar que para alcanzar estas metas, y la meta propuesta por el Presidente de 10 millones de turistas al año, se hace imprescindible aumentar las áreas destinadas a esta actividad. Es decir, localizar, permitir y fomentar que otros polos se desarrollen, tal como expresó el Ing. Frank Rainieri hace varios meses.
En tal sentido, y con la intensión de fomentar el crecimiento turístico y económico del país, hemos propuesto que se permita el desarrollo eco-turístico en el Parque Nacional del Este ( Cotubanamá ). Un desarrollo de baja densidad, bajo ciertas condiciones que no produzca daños a los diversos eco-sistemas del Parque. Por el contrario, que se diseñe un reglamento para el co-manejo y el ordenamiento territorial que ayude al mejoramiento y sostenibilidad del mismo. Consideramos que es el momento de abrir estas áreas y aprovechar nuestros recursos naturales, históricos y culturales, de promover el desarrollo eco-turístico.
Con un plan bien estructurado, donde se formalice las interacciones existentes entre las zonas habitadas y las áreas protegidas terrestres y marinas y, por lo tanto, la necesidad de su manejo integrado, el parque sería un socio-ecosistema, en el que el ser humano, sin ser parte integrante del sistema natural, actúa como custodio del mismo y aprovecha su explotación, ya que de la conservación del capital natural depende su propio bienestar y el de las futuras generaciones.
Lo que proponemos es la creación de un Patronato donde estén incluidos el sector público ( Ministerios de Medio Ambiente y Turismo ), las municipalidades de Bayahibe y Boca de Yuma y el sector privado ( inversionistas y/o propietarios de terrenos ), que tenga el co-manejo del parque con poderes para diseñar este plan y la zonificación de las áreas de playa y de visitas a lugares históricos-culturales, que asegure la protección y conservación de la flora, fauna y costas marinas. Esta propuesta atraería un turismo diverso, no sólo el de sol y playa, sino también científico y cultural.
Entre las inversiones que haría el sector privado, para conveniencia de todos, está la formación de escuelas vocacionales y de idiomas en Bayahibe y Boca de Yuma, por lo que sus residentes podrían insertarse en estas nuevas fuentes de trabajo. Lo que a la vez proveería al Estado de nuevas fuentes de ingresos a través de los impuestos que pagaría esta nueva fuerza laboral, la cual, estamos seguros que pertenece en su mayoría al sector informal. Además, tenemos los impuestos que pagarían todos los nuevos negocios formales que se crearían, adicionales a los hoteles, como son los deportes acuáticos, tiendas, bares y restaurantes, etc.,
Como se observa, nuestra propuesta establece que el Estado no tendría que invertir un solo centavo en este desarrollo. Los propietarios cuyos terrenos serán excluidos de parque, que poseen costa, serían los responsables de realizar todas las inversiones en las infraestructuras que sean necesarias, tales como construir una carretera sencilla que bordee el parque y a la vez sirva de limítrofe, así como los senderos peatonales que lleven a los turistas a los lugares de interés, como las cuevas con pictografías indígenas, enterramientos, observadores de aves y reptiles, etc., las escuelas vocacionales y estancias infantiles para el cuidado de niños mientras las madres trabajan.
Por estas razones decimos que el permitir un desarrollo eco-turístico en el Parque Nacional Del Este, bajo estas condiciones, provee una excelente oportunidad para el Estado de obtener beneficios sin realizar inversiones,
Es importante mencionar que hemos escogido el Parque Nacional de Este para que pueda servir de modelo para el futuro desarrollo de Bahía de las Águilas, y otros parques, debido a que en el Parque del Este no existen problemas legales sobre la titulación, y la implementación de esta idea podría ser muy rápida.
La idea central es presentar al turista una opción diferente a las que tenemos en la actualidad, y a la vez aprovechar las ventajas comparativas que nos brinda la naturaleza en esta región insular, para aumentar la participación de este sector en el PIB.