¿Cuál es la lectura que hace Max Henríquez Ureña de Maquiavelo? Como estudioso de la lengua y la literatura italianas, el abordaje de Max se orienta hacia la relación vida, obra e historia de sujetos y mentalidades en la línea donde la lengua o la variedad lingüística se convierten en movimiento de habla, cultura y sociedad.
Una constante de las lecciones de MHU es el acercamiento al autor a través de su biografía que le sirve de marco para entrar en su obra y contexto temporal; estrategia que invita a penetrar por ejes de información el estudio de un autor y las líneas principales de conocimiento de su obra, vida, lengua e historia. Este hilo conductor que ha sido base para la divulgación literaria en los siglos XVIII, XIX y XX ha marcado rumbos, fortunas críticas, silencios y espaciamientos, ocultamientos, posicionamientos de obras, contextos y memorias textuales.
Así pues, la historia o las historias florentinas, florecieron como parte de la historia social, cultural, económica, diplomática y literaria. Niccoló di Bernardo Machiavelli (1469-1527) se dedicó desde joven a investigar la historia política de Florencia y por lo mismo de Italia.
MHU, quien ha buscado particularidades de la cultura y la literatura italiana, informa sobre la vida y obra de Maquiavelo bajo el marco biográfico:
“Niccoló di Bernardo Machiavelli (1469-1527), contemporáneo de Ariosto, es la segunda gran figura de esa época. Tuvo una larga actuación en la vida pública de su Florencia natal, y en determinados momentos su ascendiente fue poderoso. Desde muy joven comenzó a actuar, y antes de los treinta años era (1498) el jefe de la Cancillería de su República en lo que atañe a los asuntos militares y extranjeros”. (Ver, Lección Décima, op. cit. p. 46)
Según observa Max:
“Desempeñó (Maquiavelo) algunas misiones diplomáticas, y mientras duró la república (de 1494 a 1512) fue hombre de influencia y prestigio en las esferas oficiales. La república se había fundado en Florencia poco después de la muerte de Lorenzo el Magnífico: Lorenzo dejó tres hijos, y el mayor, Pietro, asumió el mando en Florencia, pero amenazado de una invasión francesa, se apresuró, bajo el imperio del miedo, a tratar con los franceses, enviados por Carlos VIII, y someterse a condiciones humillantes; pero resultó que al saberlo, los florentinos se insurreccionaron y lo depusieron, a la vez que crearon la República”. (Ibídem.)
En aquel momento Maquiavelo “…tenía veinticinco años, y a partir de ese momento empezó a actuar en la política, y fue el defensor de determinados propósitos que entendía habrían de ser beneficiosos para su país: el primero de ellos, que Italia debía unificarse y ser gobernada por un solo gobierno o por un solo príncipe”. (Ibídem. Loc. cit.)
¿A qué tipo de gobierno aspiraba Maquiavelo entonces? ¿Qué idea se tenía entonces del gobierno y los modos de gobernar?
“Aspiraba Maquiavelo –según Max- a un gobierno fuerte y enérgico, pues no entendía que de otro modo podría sostenerse la unidad que ambicionaba. Diversos trabajos suyos adelantaron estas ideas que más tarde presentó de modo sistemático. Al desvanecerse la república se restableció (1512) el poderío de los Médicis: el segundo de los hijos de Lorenzo el Magnífico fue electo Papa y adoptó el nombre de León X y en Florencia quedó su hermano Giuliano con un hijo del mayor, ya fallecido. Ese hijo de Pietro se llamaba también Lorenzo: a éste correspondía ejercer el mando en Florencia, por razón sucesoria, y se adoptó la fórmula de reconocerlo como baile o bailío.” (Ibídem. p. 47)
¿Cómo era visto Maquiavelo en aquel período de cambios y modalidades gubernamentales? Según señala Max:
“Maquiavelo, por largos años funcionario de la república, fue visto como un sospechoso por el nuevo orden gubernativo, y estuvo preso, aunque por breve tiempo. Se retiró a vivir cerca de Florencia, y escribió El príncipe, que pensó dedicar a Julián de Médicis y al fin dedicó a Lorenzo, que había asumido las funciones de regente”. (Ibídem. Loc. cit.)
¿Cómo pensaba o soñaba Maquiavelo la Italia de su tiempo?
“…Maquiavelo soñaba con una Italia unida bajo un gobierno fuerte, y el tipo de gobernante que él consideraba adecuado para esa empresa era César Borgia, a quien había conocido personalmente, y cuya decisión y audacia admiraba”. (Ibídem. loc. cit.)
¿Cuál era el valor de El príncipe para el modo de gobernar y para las nuevas formas políticas que deseaba entonces el mandatario para su pueblo?
“El Príncipe encierra consejos que se han considerado pérfidos o inicuos, pero que responden a las realidades de aquel momento histórico. Ya en 1519 los Médicis le dieron algunos empleos menores; y esta complacencia que con él tuvieron fue perjudicial para Maquiavelo, porque en 1527 volvió a establecerse la república y no se le repuso en su antiguo cargo, ya que había servido a los Médicis”. (Loc. cit.)
Según subraya Max, Maquiavelo murió meses más tarde en 1527:
“Quizás si hubiera vivido un tiempo más, habría vuelto a significar algo en la política florentina, porque la república, asediada por fuerzas del emperador, y del Papa que favorecían el restablecimiento de los Médicis, capituló condicionalmente, en el entendimiento de que respetarían las libertades republicanas. Muerto León X, y pasado el efímero pontificado de Adriano VI, otro Médici, Julio, primo de Lorenzo el Magnífico, había sido electo papa en 1523 y eligió el nombre de Clemente VII. Lorenzo, el nieto del magnífico, había muerto en 1519, a los 27 años, y su tío Julio, Cardenal entonces, lo reemplazó, pero al ser electo Papa en 1523, habría confiado el gobierno de Florencia al Cardenal Silvio Passerini, a quien debían acompañar en el gobierno, por ser muy jóvenes para actuar por sí solos, dos sobrinos naturales de los Médicis: Alejandro (1510- ) e Hipólito (1511-1535), que por ser todavía adolescentes no era posible designar para que gobernara uno de ellos por sí solo”. (Ibídem. pp. 47-48)
En efecto, la influencia de los Médici fue decisiva y dimensional para la gobernabilidad en la Italia moderna, pues la influencia política, literaria e institucional de Maquiavelo, tendría su marco de influencia y referencia en el contexto político del Estado moderno o Estado-Nación. Las lecturas políticas de Maquiavelo se concentraron más allá de las fronteras de Italia y lograron alcanzar niveles de significación que sirvieron de palanca para armar puestos institucionales y una burocracia interna y externa que hizo posible la modernidad de las funciones públicas nacionales e internacionales.
Sin embargo:
“Al reorganizarse la república bajo el mando de los Médicis, había que designar uno de ellos, y Clemente VII se inclinó a favor de Alejandro, hijo natural del segundo Lorenzo de Médici y de una esclava de origen etíope. Al lado de Alejandro, que resultó un tirano irresponsable y feroz, actuó el historiador Francesco Guicciardini, uno de los mejores amigos de Maquiavelo”. (Ibídem.)
En la vida y obra de Maquiavelo, Max advierte una producción variada y ligada a diversos escenarios de visión, creación y recepción. La lectura de nuestro crítico e historiador da cuenta del cultivo literario, allí donde Maquiavelo aparece como historiador, dramaturgo, poeta, aforista, pensador, biógrafo y gran prosista; sus vertientes literarias le permitieron escribir unos Diálogos sobre la lengua italiana que fueron publicados en otras lenguas europeas.