Es evidente, como se ha denunciado, que sistemáticamente cuando está a punto de vencerse la fecha “final” para el estado de emergencia, el ministro de salud (el mismo cuyo privilegiado hermano rompe el toque de queda y nada le pasa) anuncia un incremento de los infectados con la Covid-19. ¡Jum!
No creo que debamos ser un genio en Física Cuántica, experto en Cálculo Diferenciado y mucho menos en Uniones Covalentes para deducir que gente del gobierno tiene mucho interés en que persista el estado de emergencia. Tanto, que supuestamente comprarán ahora 10 diputados de la oposición para que le aprueben el nuevo pedido. ¡Otro jum!
Lo que no nos ha queda claro a los ciudadanos de EL Caimito de Moca, cuál es el real objetivo. ¡Qué brutos somos!
En una primera lectura pensaríamos que es para ver si logran que avance un chin su penco de castigo. Sabemos que, a pesar de dos o tres altoparlantes pagados, el errático jamelgo amoratado, con o sin bigote, no logra pegar en el gusto electoral de los dominicanos. ¡No hay manera!
Pero, un primo mío de El Caimito —¡qué idiota!— me dijo que el asunto no es electoral, sino de financiero.
Según mi idiota primo caimitero, hay gente del gobierno que hace ingentes esfuerzos para que creamos que buscan alargar este asunto para beneficiar la jaca morada; sin embargo, saben que eso no es posible y lo que buscan realmente es algo que llaman… cuartos, molongos, hojas de lechuga, llovinita, humo blanco, jáquima, yaya o como mil nombres más que le digamos al peso.
Pensándolo bien, ahora no estoy muy seguro… que mi primo sea tan idiota.