El Gobierno Central ha anunciado la aprobación por parte del Consejo de Ministros del Presupuesto Nacional para el próximo año ( 2019 ), el cual prevé un monto total de egresos ascendentes a RD$922,000 millones.
Este total de egresos está dividido en: Gastos Estimados por RD$765,000 millones, más Aplicaciones Financieras por RD$156,000 millones. Aquí es bueno detenerse un poco para explicar y estar más claros sobre el término de Aplicaciones, el cual se refiere a los movimientos que disminuyen el capital de trabajo. Es decir, son pagos que debemos hace. Y, Financieras se refiere a pagos por el Servicio de la Deuda, pagos a Bancos o inversores que incluyen capital e intereses. En otras palabras, el término Aplicaciones Financieras se define como transferencias de recursos de carácter temporal que se realizan para incrementar los activos financieros o para devolver los ahorros de otros agentes económicos previamente recibidos en forma de préstamos o colocación de títulos y valores de deuda pública (pasivo financiero). Es decir que este término se utiliza para denominar los pagos o abonos a préstamos.
Para el año 2019 estos pagos serán por el orden de los RD$156,000 millones, los cuales debemos sumar al déficit fiscal que se estima en unos RD$76,000 millones, por lo que en total tendremos una diferencia entre los ingresos y los egresos ascendentes a RD$232,000 millones. Es decir, que vamos a tomar prestados una suma mayor a la que vamos a pagar. Tendremos un aumento del endeudamiento. En términos generales, estimamos egresos o salida de recursos por la suma de RD$922,000 millones, mientras los ingresos fiscales estimados serán de unos RD$690,000 millones. Para completar la totalidad de los pagos tendremos que tomar prestados RD$232,000 millones, por lo que con muchas probabilidades el monto de nuestro endeudamiento pasará del 50% del PIB. Seguimos en esta carrera de endeudamiento.
Hemos insistido que este nivel de endeudamiento sin la contrapartida de crecimiento correspondiente es muy peligroso, porque nuestras importaciones son menores a las exportaciones, es decir, seguimos con un déficit comercial, lo que conlleva a un problema mayor, y es que para el pago de la deuda denominada en pesos dominicanos podríamos pagarla vía ingresos fiscales, pero para pagar la deuda en moneda extranjera debemos convertir a moneda extranjera los ingresos fiscales en el mercado de divisas, lo que pone presión hacia el alza del valor de dicha moneda. Así que todo el dinero utilizado para pagar la deuda en moneda extranjera debería venir de las transferencias de la balanza de pagos, y como nuestra balanza de pagos es negativa, el dinero no alcanza, lo que provoca mayor endeudamiento, y esto a su vez provocará una pérdida del valor del peso, es decir, una devaluación del peso dominicano.
El Presupuesto Nacional es un instrumento de desarrollo económico que nos guía al buen manejo de los recursos, a un manejo transparente y pulcro de los recursos recibidos y de los pagos que se hacen.
Por eso es que debe ser equilibrado, que los ingresos deben ser iguales a los egresos, donde debemos incluir la partida correspondiente al servicio de la deuda o aplicaciones financieras. Pero desde hace muchos años hemos estado incluyendo una partida extra para financiamiento, para pagar préstamos con otros préstamos. Estamos incluyendo el endeudamiento dentro del Presupuesto, lo estamos planificando.
En otras palabras, este procedimiento no es correcto, ya que no estamos siendo eficientes en los mecanismos de recaudación ni de aplicación de los recursos. Los financiamientos deben ser usados para el apalancamiento del crecimiento, para financiar proyectos de desarrollo que sean rentables, que se paguen por si solos, no para el financiamiento de las importaciones y mucho menos para pagar deudas.
Lo correcto sería que nuestro crecimiento sea financiado por inversiones privadas, que traigan proyectos que mejoren nuestro flujo de fondos y provean nuevos empleos.