En La biografía difusa de Sombra Castañeda, ganadora del Premio Nacional de Novela 1981, la historia dominicana se encuentra intercalada con mitos taínos y afro-dominicanos, así como también con fenómenos fantásticos, surrealistas y mágicos. Aunque fragmentada, hay una visión global de la historia dominicana que va desde el período precolombino de los taínos hasta la Era de Trujillo (1930-1961). Entre las referencias a la historia se encuentran el período de la colonia, la presencia haitiana en 1822 y la invasión norteamericana en 1916, la independencia del país en 1844, y las dictaduras de Pedro Santana, Ulises Heureaux (Lilís) y Rafael Leónidas Trujillo. En la novela, hay también referencias a sujetos históricos como el anti-imperialista Gregorio Luperón, el mesías Liborio Mateo, o alusiones a políticos más contemporáneos como el funesto Joaquín Balaguer, de quien se citan, intercalados, once fragmentos del panegírico que éste leyera ante el féretro de Trujillo. Además de estos fragmentos, hay secciones acerca de Esculapio Ramírez, un personaje que se desenvuelve en dos temporalidades: como Esculapio Ramírez durante la Era de Trujillo y como su alter ego Serapio Rendónç, durante el tiempo indefinido de Sombra Castañeda, dictador imaginario, protagonista de la novela. Estas secciones introducen una perspectiva realista e histórica y sirven como equilibrio entre la realidad histórica y el mito; también introducen dos tiempos: el Tiempo Profano de la historia, que sirve para contextualizar la novela, y el Tiempo Sagrado del Mito.
La biografía difusa de Sombra Castañeda se desarrolla en un pueblo llamado Barrero. Como Macondo, el pueblo es un espacio mítico cerrado, poblado por seres mágico-imaginarios de la mitología taína y afro-dominicana, tales como ciguapas, bacás, galipotes, lugarús, opias y biembienes; dioses taínos como Boinayel, y afrocaribeños como Ogún Balenyó: “Barrero era la típica tierra cerrada. Nada entraba. Nada salía. Prístina aún. Cercada de muros blancos levantados por la sal marina, y el talco de los caminos” (101). El cerco de muros blancos, que remiten al círculo como símbolo de la perfección, la repetición y circularidad del tiempo mítico, separan el pueblo, mundo mágico en el que todo es posible, del espacio profano. Dentro del círculo que es Barrero, no hay límites precisos ni fijos; los diferentes reinos de la naturaleza interactúan entre sí. El origen de sus habitantes es incestuoso: cuatro primos. Las consecuencias de ese incesto, en algunos miembros de la familia, como la cola de cerdo en Cien años de soledad, consiste en que “han degenerado en seres con pies torcidos, ojos bizcos, narices encorvadas, y manos dobles en muchos casos” (37).
La biografía difusa de Sombra Castañeda resume los postulados de la nueva novela histórica y de la novela etnológica, así como también del realismo mágico. Como novela histórica, se plantea reconstrucciones totalizadoras de la historia dominicana desde la conquista, pasando por la colonización, el período republicano hasta terminar con un dictador, que obviamente alude a Trujillo. Existe una marcada intertextualidad en esta novela, en tanto alude constantemente a otros textos de ficción, de historia, de crónicas y de política. Como en El reino de este mundo de Alejo Carpentier, los sujetos históricos son muchas veces nombrados, pero pasan a un segundo plano.
Ganadora de importantes premios, esta novela ha inaugurado y fijado en el canon novelístico dominicano una nueva forma de escribir novelas. Veloz Maggiolo ha llevado a cabo lo que según Clifford Geertz hacen los buenos etnógrafos: “[I]r a los sitios, volver con información sobre la gente que vive allí” (Elzbieta Sklodowska 83). Lo que lo distingue de otros escritores, con respecto a una visión etnológica europea asimilada del Otro-Dentro, es la heteroglosia de las diferentes voces con las que dialoga la cultura dominicana, como respuesta a la monoglosia de la cultura oficial. Aunque su posición de etnólogo blanco descendiente de europeos lo sitúe en una posición frágil, en el momento de textualizar sus experiencias, la actitud de Veloz Maggiolo es asumir como respuesta la heteroglosia a través del realismo mágico. El autor no es lo que Van Maanen llama un “antropólogo de salón” (Sklodowska 83). El etnógrafo dominicano estuvo en el “allí” para poder “textualizar” sus experiencias del el Otro-Dentro. Con La biografía difusa de Sombra Castañeda, Marcio Veloz Maggiolo inserta en el canon la novela histórico-mágico-etnológica en la República Dominicana y traduce, de alguna manera, la cultura del Otro-Dentro indígena y negro para unos lectores jóvenes, urbanos, globalizados y posmodernos, porque en la Ciudad Letrada, se supone, no viven negros; los negros viven en Los Mina, Villa Mella y Mandinga.