La dicotomía entre realidad y percepción vuelve a presentarse en el país ante el anuncio divulgado por el Banco Central, acerca del sostenido crecimiento de la macroeconomía dominicana y el comportamiento del Índice de Precios al Consumidor que alcanza tan solo el 0,19%, colocando la inflación acumulada de los primeros siete meses del año en apenas 0,36%.
Las consumidoras (amas de casa) que visitan frecuentemente al supermercado en procura de todo género de productos y bienes elaborados para la satisfacción de las necesidades de su hogar, se sienten estupefactas ante este anuncio, al comprobar el constante incremento en los precios de esos productos.
El escepticismo frente a la divulgación de estos datos del Banco Central surge a consecuencia de las permanentes quejas expresadas por los consumidores con respecto a los altos precios de los productos y sus limitados ingresos económicos.
Estos resultados sin embargo son reales y reflejan que la economía continua creciendo en niveles de un 7,4% en el primer semestre de este año por encima de su potencial y de lo contemplado en el Marco Macroeconómico para este año. Esto se debe a la expansión de actividades como la Construcción (17,7%); Minería (25,1%); Intermediación Financiera (11,0%); Salud (9,5%) y la Agropecuaria (8,0).
A esto han contribuido también sectores como el Comercio (6,2%), Manufactura local (6,0%); Transporte (5,1%); Hoteles, Bares y Restaurantes (4,9%). El crecimiento fue impulsado por una expansión interanual de 8,7% en el periodo Abril-Junio 2016.
Toca ahora a los expertos economistas y comunicadores del gobierno la tarea de conciliar la disparidad entre percepción y realidad ante este anuncio, a fin de modificar la percepción negativa de los consumidores frente a estas cifras difundidas por el Banco Central.