“Primero, debemos entender que no hemos creado las matemáticas, las descubrimos. Es el Lenguaje y la Ley Universal. No importa en qué parte del Universo estés, 1 + 2 siempre será igual a 3. ¡Todo en el universo obedece esta ley!”. Nicolas Tesla.

Muchos de nosotros por el condicionamiento social, familiar y religioso desconocemos la importancia de los símbolos, patrones y números en vida y del cómo estos desempeñan un papel importante en la construcción de quienes somos. Las civilizaciones antiguas les daban una connotación divina a las estructuras de cálculo que gobiernan y representan el universo.

Pero más allá, están los mensajes que estos esconden para el desarrollo de nuestro equilibrio y del cómo el universo responde a los mismos, por ejemplo, los 5 elementos de la naturaleza (tierra, agua, fuego, aire, éter), los 4 libros del Evangelio, los 5 continentes, los 118 elementos de la tabla periódica, los 9 planetas del Sistema solar.

Los 3 elementos físicos que forman la tierra, las 9 virtudes de Buda, los 9 frutos del espíritu, los 3 Reyes Magos, las 3 carabelas de Colón, etc. Cada símbolo, patrón y su valor numérico, han girado en torno a los humanos desde antes de la formación del planeta para recordarnos que su presencia corresponde a un principio de acción para los humanos.

Sin embargo, en la mayoría de las veces desconocemos que todo lo que nos rodea esconde un significado espiritual porque el universo actúa en consonancia a principios y leyes fundamentales que lo rigen y crean energía;  brindándonos las herramientas para que aprendamos a relacionemos con el entorno.

Esto se podrá en práctica cuando pensamos fuera de la caja, “Think outside the box”, olvidando todo lo que hemos aprendido hasta ahora y dejando que las respuestas fluyan, abriéndonos a otras posibilidades. Ya que cada elemento tienen un nivel de vibración determinado en sí mismo y, por lo tanto, un orden de importancia en el inicio o cierre de un ciclo de vida.

Es por ello, que todo lo que atraemos es el resultado de mensajes subliminares que el universo quiere darnos y que al dejar que los mismos cumplan su misión, encontramos respuestas a la acción que debemos tomar sobre un tema en particular.

Porque nada fue creado al azar, sino, la edificación de situaciones que deben suceder; hasta la obtención de un resultado. Muchos de los mensajes son tan obvios, que van desencadenando un sin fin de circunstancias a nivel laboral, relación de pareja, proyectos personales que van sucediendo; pero que solo los percibiremos si “abrimos” nuestra mente.

Por medio a la energía que estos emanan, convirtiéndose en portales de luz para la persona y su entorno. No obstante tenemos muchos factores en contra, al reconocer el significado de los símbolos y su valor número estaremos dando un gran paso hacia un nuevo comienzo al superar la fijación en las cosas materiales e iniciando el camino hacia la iluminación.

Desafortunadamente, el ritmo de vida de las actuales sociedades, impiden que se desarrolle la sensibilidad para aceptar, creer, aprender y dejar fluir eso que esta “diseñado” para ti y que tarde que temprano hasta que se complete el proceso; eso “perseguirán”.

La próxima vez que veas secuencias de números, patrones o símbolos, no cuestiones y aprende de su infinito poder de enseñanza sobre las posibilidades que ellos tienen.