Este recuerdo es imborrable. El tiempo podría desdibujar algunos detalles. Setenta años de la fundación de la revista Cuadernos Hispanoamericanos es la edad biológica promedio de los integrantes del grupo literario La Antorcha y la literaria será de cincuenta y un años, el 21 de mayo.

Jóvenes escritores se desplazaban desde la margen oriental del río Ozama, en algunas ocasiones en yola desde Villa Duarte, donde residía el poeta Enrique Eusebio, que de estar aquí con nosotros, habría tenido exactamente la edad de Cuadernos Hispanoamericanos.

Rafael Abreu y yo, un poco más; Alexis Gómez, Soledad Álvarez, Fernando Vargas, Amarilis Rodríguez, un poco menos.

Llegar a la librería Escofet Hermanos para adquirir esta importante revista junto a las novedades literarias de España y Latinoamérica era un rito semanal. Luego íbamos a la casa del gran poeta Franklin Mieses Burgos, que vivía en la calle Espaillat, muy cerca de dicho establecimiento cultural.

Cuadernos Hispanoamericanos, durante sus siete décadas, ha divulgado la mejor literatura de las dos orillas, y como dijera Carlos Fuentes del territorio de la mancha, donde han convergido Cervantes o Darío, dándole a la prosa y a la poesía en nuestra lengua categoría universal, junto a sus pares de todo el mundo.

Tres momentos relacionados con esta publicación asoman a mi espacio memorioso, la primera es cuando adquirimos un número dedicado al eminente filólogo español Ramón Menéndez Pidal, que arribaba a sus noventa y nueve años de vida, esperábamos sus cien abriles, pero falleció antes, dejando más claridad en la interpretación de la lengua que ocupa ahora un lugar prominente en el orbe.

La otra visión fue en el Congreso Mundial de Poesía, celebrado en Valencia, donde conocí al autor de Blanco espiritual, quién fue uno de los directores de esta publicación que ahora conmemoramos. Félix Grande hablaba de su experiencia editorial, lo acompañaba el gran poeta José Hierro y conocimos intimidades del proceso que ha permitido sobrevivir a una publicación emblemática en medio de las diversas etapas y transformaciones políticas que ha vivido España.

La publicación de textos de nuestra consagrada escritora Jeannette Miller y la carta de Fernando Vargas diciéndonos desde Madrid que lo invitaban a incorporarse a esta revista es nuestro tercer recuerdo de la primera etapa de Cuadernos Hispanoamericanos.

Ahora, la recibo religiosamente desde el despacho del Centro Cultural de España con una nota de su director, Juan Sánchez, cada una de las ediciones.