Los estudiosos de las ciencia policial han destacado como los principios fundamentales para toda policía moderna: los nueve principios de Robert Peel, quien es considerado el padre de las policías modernas y que hemos sido recurrentes en citar en artículos anteriores, los mismos se han convertido en los estandartes del policiamiento comunitario, por lo que se hace necesario traerlos nuevamente para dejar ver con claridad, a través de un análisis de los mismos, por qué no hemos avanzado en la modernización de nuestra policía.  Citamos:

1-“La misión básica para la cual existe la policía es prevenir la criminalidad y el desorden público”.
Hoy día la sociedad dominicana está demandando seguridad ciudadana. Tradicionalmente nuestra policía ha considerado como éxito de sus acciones el atrapar los criminales y esclarecer el crimen, dejando de lado la prevención de los mismos, que donde radica la eficiencia.

Y han mantenido latente el concepto de orden público, como secuela de la post Guerra Fría considerando como su misión esencial todo lo que afecta al Estado de manera independiente, lo que le interesa a los gobernantes de turno y a los grupos de poder, sin tomar en cuenta el sentir de la gente. En otras palabras nos hemos dejado utilizar en asuntos particulares o intereses de grupo alejados de las demandas ciudadanas.

Es decir, a pesar de los mandatos legales, de los principios internacionales y de las demandas ciudadanas, seguimos estancados en una posición de policía represiva que cree exitoso la detención y el descubrimiento de los delitos ya acaecidos, perdiendo de vista la realidad de nuestra esencia que es evitar que sucedan los crímenes y delitos, ser proactivos y preventivos como lo contempla toda policía moderna y es la naturaleza de la Policía Comunitaria.

2-“La capacidad de la policía de llevar a cabo su labor depende de la aprobación pública de sus acciones”.
En los últimos años de vida democrática, la sociedad dominicana ha demando a la policía revertir sus actuaciones represivas y de excesos, para convertirse real y efectivamente en una institución de servicio ciudadano, que no de la espalda a la ciudadanía, lo que ha fomentado la perdida de aceptación, confianza y respeto que mantiene el rechazo por parte de las comunidades.

3-“La policía debe asegurarse de la libre cooperación de la ciudadanía en el acatamiento voluntario de la ley, para asegurar y mantener el respeto de la población”.

La policía como funcionarios encargados de hacer cumplir la ley debemos ser garantes del cumplimiento de la misma y dar el ejemplo, porque mal garante de la ley sería aquel que encargado de hacer cumplir algo lo violara él mismo. Usualmente en nuestra sociedad las personas que estamos revestidas de autoridad, por lo general usamos esa investidura para violentar las normas establecidas y abusar de ese poder de autoridad, cuando debemos ser ejemplo de ello y a través de eso ganar respeto y confianza. Esta parte fortalece toda policía moderna.
Los Policías urgen crear un sindicato u organización que los represente y defienda sus
derechos.

4-“La policía busca y conserva el favor público no por la vía de complacer a la opinión pública, sino demostrando constantemente un absoluto e imparcial servicio a la ley”. Las acciones responsables y enmarcadas en los principios fundamentales de derecho o de estado de derecho, la transparencia, la ética y la moral, son la principal carta de presentación y de prestigio para una institución que constantemente debe resolver conflictos.

5-“La policía utiliza la fuerza física sólo en el grado necesario para asegurar el cumplimiento de la ley o para restablecer el orden cuando el ejercicio de la persuasión, exhortación y advertencias resulta ser insuficiente”. Pero también la Policía Nacional como institución involucrada en constante tensión y eventos conflictivos ha olvidado el tomar en cuenta esta área tan importante de la función policial, como lo es la resolución de conflictos y el manejo de desórdenes públicos. De esta manera podrá reducir al mínimo los hechos violentos y excesos cometidos por las fuerzas policiales. República Dominicana ha dejado de lado como país el crear, implementar y consolidar un centro de negociación y mediación de conflictos.

La seguridad, en todas sus concepciones, más que ser una garantía de paz, es un derecho de todo ser humano, el cual debe ser provisto por el Estado a los habitantes de una nación, para esto, se deben desarrollar un sinnúmero de políticas públicas estratégicas, las cuales colectivas o individuales, siempre tendrán un fin último: Cumplir y hacer cumplir la ley, garantizar la Paz y la armonia para todos, basado en en el artículo 7 de nuestra Constitución: “Estado Social y Democrático de Derecho. La República Dominicana es un Estado Social y Democrático de Derecho, organizado en forma de República unitaria, fundado en el respeto de la dignidad humana, los derechos fundamentales, el trabajo, la soberanía popular y la separación e independencia de los poderes públicos.”