La lucha en el plano político es fundamentalmente una lucha por el poder y eso todo el que es político entiende que si no tiene poder no es nadie, pero lo que garantiza terciar por el poder es tener seguidores con quienes puedan negociar, eso lo saben hasta los chinos de Bonao y ahí es donde reside la explicación de por qué en el PLD hay precandidatos que de entrada saben que no van pa ninguna parte.
Los mismos precandidatos han desvelado el plan: el presidente Danilo los reunió para que lanzaran sus precandidaturas lo que se entiende era una estrategia para ver si alguno podía medir fuerza con Leonel, pero lamentablemente no ha sido así y por eso es que pienso que la reelección va.
Los que hoy se han lanzado al ruedo saben que no tienen posibilidades ni ahora ni nunca, pero quieren tener su cuota de poder que es el sello de garantía para que se les pueda tomar en cuenta en las negociaciones que ya no deben durar mucha para que se realicen pues los plazos de la ley de partido y electoral se agotan y de mayo no pueden pasar con esta indecisión. En la semana pasada ya expuse los plazos.
La actual Vicepresidenta se mantiene lanzando cascaritas y en sus últimas declaraciones afirmó que ya ella quemó la etapa de primera dama y que si su esposo volviera a ser presidente se pondría el sombrero de Primera Dama, pero que sería un desperdicio que su liderazgo no sea aprovechado de otra manera. Lo que Margarita está observando es que, si en dado caso se acuerda que Leonel sea candidato ella no sería la Vicepresidenta y literalmente eso la reduce de rango y categoría por eso no quisiera volver atrás.
Así anda el panorama, mientras tanto los que no van pa ninguna parte continúan su agitada agenda movilizándose por todos lados aun sabiendo lo que va a suceder, su único interés es que no los dejen oliendo donde guisan y aprovechar los pocos o muchos seguidores que tengan para meter en la tómbola sus deseos de seguir en los cargos los cuales se reparten de acuerdo al aporte que hayan hecho a la candidatura ganadora. Mientras tanto Danilo cuenta con cinco precandidatos que a la hora de la verdad declinarán y endosarán su respaldo a la reelección mientras Leonel solo cuenta con las metáforas e indirectas de su esposa que, por demás no quiere volver a ser Primera Dama.
Vuelvo y termino con el mismo estribillo de la semana pasada: “en qué parará la cosa caballero, yo no sé, en qué parará, no señor”.
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