Un área donde Cuba y los EEUU pueden colaborar es en la lucha contra el Ebola.
Resulta y viene a ser que ambos países han desplegado contingentes clínicos en Guinea, Liberia y Sierra Leona (Cuba), donde se detectan más de 10,000 casos de contagio del Ebola por semana y el 70% de los afectados termina muriendo (OMS).
Barack Obama ha enviado una brigada de 4.000 soldados para combatir el virus del Ebola, tanto en la construcción de hospitales de campaña (12 hospitales de campaña con 100 camas cada uno) como en el entrenamiento del personal local.
Estos tres países (Liberia, Guinea y Sierra Leona), cuya población es una de las más desnutridas del planeta, carecen de defensas inmunológicas estructurales y en la región (Guinea) se ha estado experimentando con substancias bioquímicas y
biogenéticas por décadas. Además son países sin una atención médica preventiva competente. En Sierra Leona se cerró hace poco un laboratorio de armas biogenéticas estadounidense administrado por la Universidad de Tulane. (Impactnews.com-sept 9, 2014).
De acuerdo con las estadísticas sanitarias (Organización Mundial de la Salud), Guinea y Liberia tienen un médico para cada 100,000 habitantes; Sierra Leona tiene dos médicos para la misma cantidad de habitantes. Esto ha condenado a estos países a la muerte prematura de la mayoría de sus ciudadanos. La salubridad y la seguridad social en esos países no han existido nunca. Si no es el Ebola es el cólera o la malaria o el Sida, o el dengue clásico.
El ejemplo de una situación semejante lo tenemos en Haití (el África Occidental de América), donde algunas de estas epidemias han estado resurgiendo últimamente.
Por eso tenemos que poner nuestras barbas en remojo.
Cuba, haciendo un esfuerzo de solidaridad internacional, ha desplazado un contingente médico de 461 profesionales de la salud en Sierra Leona, superando, per cápita, a todas las demás naciones de Occidente (incluyendo a los EEUU).
Con un PIB (Producto Interno Bruto) de US $72.3 billones (billones ingleses) y una población de 11 millones de personas (comparado con el de los Estados Unidos, de $17.3 trillones y una población de 300+ millones), la presencia de Cuba en África es mucho más significativa. Abelardo Moreno, Vice-ministro de Relaciones Exteriores cubano declaró ante las Naciones Unidas: “Tenemos 4,048 profesionales de la salud sirviendo en 32 países africanos”.
No olvidemos que durante el terremoto del 2010 en Haití ya había allí 350 médicos cubanos y que se enviaron 1,000 médicos más a las regiones más afectadas. Además, entrenaron a más de 1,000 médicos haitianos.
La respuesta dominicana al terremoto de Haití, bajo el liderazgo del presidente Leonel Fernández Reyna, fue también extraordinaria. Inclusive, varios hospitales de la frontera dominicana abrieron sus puertas a miles de pacientes haitianos y se le donó al país una gran universidad con el nombre del profesor Juan Bosch.
En honor a la verdad, nuestro gobierno no pudo portarse mejor.
No hay dudas de que la solidaridad de Cuba y de República Dominicana hacia Haití fue extraordinaria.
Cuba y Estados Unidos podrían colaborar mutuamente combatiendo al Ebola de manera coordinada. Sobre todo en el tratamiento de aquellos profesionales de la salud que puedan quedar infectados del virus durante los tratamientos médicos. En lugar de volarlos a los EEUU o a Cuba, podrían ser tratados localmente en un centro destinado exclusivamente a esos menesteres especializados.
Esa sería una gran colaboración entre ambos países, mientras el hacha de las conversaciones bilaterales hacia el pleno restablecimiento de las relaciones, continúa yendo y viniendo.