Era decisión advertida, esperada, necesaria y ya impostergable la adoptada por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales de ordenar el cierre técnico del vertedero a cielo abierto de Duquesa.  La disposición arrastra también a otros seis botaderos que son como llagas purulentas que es preciso eliminar.  Son los de Moca, Tamboril, Puerto Plata, San Pedro de Macorís, Verón y Villa Altagracia.  Siete en total a los cuales les llegó la hora.   Para Puerto Plata y Verón, la sustitución tendrá un efecto muy positivo sobre la vital industria turística.

El llamado cierre técnico tendrá lugar en el mes de julio y será el primer paso en un laborioso proceso de búsqueda de alternativas para cada caso,  que en cuanto a Duquesa, obviamente el mas complejo,  podrá tomarse luego hasta cinco años de ejecución, que es el tiempo que se estima requerirá para ser sustituido por un moderno relleno sanitario.  Al presente, Duquesa figura clasificado entre los cincuenta peores botaderos de basura en el plano mundial.

Pero en la medida  en que avance el proceso cabe esperar se irán reduciendo los daños ambientales provocados por el obsoleto e ineficiente botadero a cielo abierto y las inconveniencias y efectos negativos sobre la salud de la población que ha originado en escalada creciente.

El plan de sustitución de estos vertederos conlleva garantizar una disposición final adecuada y segura de los residuos a largo plazo, así como contempla la protección de los recursos naturales y la calidad ambiental, al igual que el reciclaje de los desechos.   Es decir, todo lo contrario a lo que ha representa y ha ocurrido con Duquesa en todos estos años.

El cierre técnico de estos vertederos, altamente contaminantes y lesivos a la salud, quedará enmarcado dentro del ambicioso plan de “Dominicana Limpia”, a través del cual se buscará eliminar y sustituir por rellenos sanitarios, situados en sitios estratégicos, los casi cuatrocientos botaderos a cielo abierto que hay a nivel nacional.  La ejecución del mismo correrá a cargo de la Liga Municipal Dominicana trabajando en coordinación con los propios ayuntamientos.  De destacar el importante apoyo ofrecido por la Cervecería Nacional Dominicana, mediante un aporte de 4 millones de dólares.  Un gesto que es de esperar encuentre imitadores.

No es tarea fácil, de bajo costo,  ni de un día para otro.  Requerirá una firme y sostenida voluntad política para vencer todo tipo de obstáculos, incluyendo la resistencia de intereses creados que pudieran resultar afectados.  Pero exigirá además un amplio trabajo de concienciación y cooperación ciudadana para que cada quien entienda la importancia de mantener la limpieza en su cuadra, barrio, o municipio, no solo por razones de higiene y ornato, sino sobre todo por la importancia que reviste para contribuir a la preservación de la salud pública.  Una comunidad limpia es una comunidad sana.