Este tema ya lo habíamos tocado en días pasados y lo recobramos ahora a raíz de una conversación entre colegas ocurrida la semana pasada. Lo que surgió como una simple pregunta, de éstas que sirven para que su respuesta haga desaparecer el tedio del estío, devino en una conversación mucho más completa y entretenida. La pregunta era algo así: ¿cómo es posible que algunos de los más grandes arquitectos de todos los tiempos, ni siquiera fueran arquitectos graduados en escuelas de arquitectura?
Entre tanto que buscábamos la respuesta, nos llegaban a la mente varios nombres (de los que hemos mencionado por aquí dentro de la misma temática). Evidentemente nombres del siglo XX y otros contemporáneos, de los que tenemos fe documental más reciente.
Uno de estos nombres era el de Le Corbusier (Charles Edouard Jeanneret). Del que invitamos a ver un resumen, cronológicamente organizado, de su vida en la página de la fundación que lleva su nombre, en el siguiente enlace:http://www.fondationlecorbusier.fr/
Le Corbusier, suizo de nacimiento y de tradición familiar calvinista, fue un alumno más bien de artes y de decoración. Su “Maestro”, como él mismo le llamaba a Charles L’Eplattenier, le animó y ayudó a orientar su carrera profesional hacia la arquitectura, incluso sirviendo como canalizador de sus primeros encargos.
Hablar de arquitectura, de mucha de la que hoy pensamos como buena arquitectura, es hablar en gran medida de Le Corbusier. Algunos de sus ejemplos, nunca mejor dicho, los relacionamos a continuación. Invitamos al lector a que amplíe esta información para su deleite, nosotros por motivos de espacio, sólo citaremos una cantidad muy pequeña.
– Maison Guiette. Amberes, Bélgica (1926)
– Ville Savoye. París, Francia (1929)
– Museo Nacional de Arte Occidental.Tokio, Japón (1929)
– Unité d’habitation. Marsella, Francia (1946-1952)
– Iglesia Notre Dame du Haut. Ronchamp, Francia (1950)
Como si nuestra mente fuera en gran parte un océano de pensamiento inconsciente, que lo es, y siendo el caso de que este inconsciente fueracomo un lenguaje que enlaza significantes y significados, en forma de recuerdos, imágenes, etcétera, no podemos dejar de pensar en el otro gran “armador” de la arquitectura del siglo XX, es decir, Frank Lloyd Wright.
Wright, norteamericano, hijo de un predicador protestante y de una maestra, apenas alcanzó a completar uno o dos cursos de ingeniería en la universidad de Wisconsin, antes de partir a Chicago para trabajar, y aprender, con los arquitectos Joseph Lyman Silsbee, Dankmar Adler y Louis Henry Sullivan…esto fue el inició, el tránsito a la genialidad practicada. Ver: https://franklloydwright.org/
Un genio que practicaba y ejercía como tal, que nos dejó fuentes de inspiración tales como:
– Unity Temple.Illinois, EE.UU. (1905-1908)
– Johnson Wax Buildings. Wisconsin, EE.UU, (1936)
– Taliesin West. Arizona, EE.UU. (1937)
– The Fallingwater House. Pennsylvania, EE.UU. (1937)
– Museo Solomon R. Guggenheim. New York, EE.UU. ( 1943- 1959)
Seguiremos…