Fue periodista, poeta, maestro, abogado, académico, político y escritor.

Desde muy joven se interesó por la política, militando en el Partido horacista. Tuvo una participación muy activa en el derrocamiento del Gobierno de Juan Isidro Jimenes, en 1902 y así como también, en el golpe contra los Gobiernos de factos de Alejandro Woss y Gil y Carlos Felipe Morales Languasco.

Se inició en las letras, como colaborador de los periódicos y revistas: La Cuna de América, Blanco y Negro, La Revista Literaria, Mefistófeles, Listín Diario y La Opinión. En los primeros años de su juventud cultivó la poesía y la prosa. Publicó en 1910 un libro de poesías bajo el título: “Pro—Fide”. En sus escritos utilizó varios seudónimos para escribir, como fueron: Fray Terrible, Fray Avispa y Fray Severo. Fundó y dirigió el periódico El Tribuno, en 1913.

Vino al mundo el 11 de junio de 1883, en la ciudad de Santo Domingo. Hijo legítimo de los señores: Carlota Soliere De Windt y del licenciado Juan Tomás Mejía Cotes, quien fuera Presidente de la Suprema Corte de Justicia, en 1895 hasta el 1897. El matrimonio Morales—Solier procreo, además, los hijos: Carlos Rafael, Andrea Blanca Florida, Luis Francisco, Ana Emilia Abigail y Elena Lisa.

Desde niño dio demostración de inteligencia. Realizó sus estudios en la Escuela Normal, Colegio Central y en el Colegio Santo Tomás de Aquino, éste último se graduó de Maestro Normal. Ejerció por algún tiempo el magisterio. El 21 de junio de 1921 se graduó de Licenciado en Derecho.

Combatió la Primera Intervención Norteamericana de 1916, a través de su pluma.

Ocupó los cargos: Procurador Fiscal de San Pedro de Macorís, Superintendente General de Enseñanza, Secretario de la Escuela Normal de Santo Domingo.

Además, Diputado, Secretario de Estado de Justicia, Consultor Jurídico del Poder Ejecutivo, Rector de la Universidad de Santo Domingo, Procurador General de la República.

Fue designado Presidente de la Suprema Corte de Justicia, en 1938 y permaneció por ocho años en dichas funciones (1).

En la segunda etapa del Ateneo Dominicano, en 1931 fue el iniciador y Presidente de la misma. Ayudó a fundar el Ateneo de la Juventud.

Fue Miembro de Número (sillón L) y Presidente de la Academia Dominicana de la Lengua, desde el 1940 hasta el 1961 y Miembro Correspondiente de la Real Academia Española, en 1932.

El Lic. Juan Tomás Mejía Soliere falleció en su ciudad natal, el 24 de septiembre de 1961.

Cita:

  1. Néstor Contín Aybar. Historia de la literatura dominicana, tomo III. Santo Domingo, Editora Taller, C. por A. 1984, Págs. 44 y 45.