El rediseño del Sistema Interamericano en general, y el de protección de los Derechos Humanos de manera particular, no tiene nada de novedad, ni de originalidad, como no sea el tratamiento tardío del mismo, ya que al interior del Sistema se ha agotado un arduo y amplio proceso de discusión sobre la reforma del Sistema, cuestión que el disertante por su condición de ex mandatario y de estudioso de las relaciones internacionales debería conocer.

El 29 de junio de 2011, el Consejo Permanente de la OEA creó un Grupo de Trabajo Especial de Reflexión sobre el Funcionamiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para el Fortalecimiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos.  El 13 de diciembre de 2011 el Grupo de Trabajo adoptó su Informe y el 25 de enero de 2012 el Informe fue comentado por algunos Estados y aprobado por el Consejo Permanente. A partir del informe del Grupo de Trabajo, Estados, instituciones y personalidades del hemisferio se han pronunciado sobre la pretendida reforma, es así que, el 27 de enero de 2012, tras la aprobación de las recomendaciones del Grupo de Trabajo por parte del Consejo de Permanente, más de 90 organizaciones de derechos humanos suscribieron un comunicado expresando su opinión sobre las recomendaciones y la necesidad de abrir un espacio de diálogo para su discusión, y que el 28 de marzo del mismo año, la Coalición Internacional por los Derechos Humanos en las Américas expresara su opinión sobre el Informe. Así las cosas, la propia CIDH, en su 144 Periodo de Sesión, decide muto propio iniciar un proceso de consulta sobre sus procedimientos y mecanismos. En ese contexto la CIDH, el 30 de Mayo del 2012, celebro el primer seminario regional sobre las recomendaciones formuladas por los Estados en el Informe del Grupo de Trabajo Especial.

Ese proceso de reforma se suma a otros procesos realizados con anterioridad, pues desde la creación en 1959 de la CIDH, y la entrada en vigor en 1978 de la Convención Americana de Derechos Humanos o Pacto de San José se han suscitado varias reformas reglamentarias para  perfeccionar los procedimientos que rigen el curso de peticiones y casos, solicitudes de medidas cautelares, el monitoreo de la situación de los derechos humanos en los Estados Miembros y los enfoques temáticos de la Comisión, entre otros. Para el periodo 2011-2015, y en el marco de las reformas la CIDH, se ha fijado los siguientes objetivos: fomentar el pleno cumplimiento de sus pronunciamientos y recomendaciones: a) facilitar el acceso de las víctimas a la Comisión y conducir sus procesos y procedimientos del sistema de petición individual con eficiencia óptima; b) mantener conocimiento actualizado, exacto y objetivo sobre la situación de los derechos humanos en los Estados Miembros de la Organización y actuar en consecuencia; c) reconocer e incluir en todas sus actividades las necesidades específicas de los grupos históricamente sometidos a discriminación; d) promover la observancia de los derechos humanos, el conocimiento del sistema, y la universalización de los instrumentos regionales en la materia; e) difundir el trabajo de la Comisión y, a través de éste, el conocimiento adquirido en materia de derechos humanos; y f) procurar los recursos adecuados para el ejercicio de su mandato y el logro de los demás objetivos estratégicos.

Para la consecución de los objetivos anteriormente señalados, y en el contexto de las pretendidas reformas la CIDH elaboró una agenda de reformas que incluye los elementos siguientes:

1.- mediante las reformas consideradas, la Comisión busca responder a inquietudes expresadas por actores del Sistema respecto del Sistema de Petición Individual, por ejemplo, asuntos relacionados con los plazos que rigen algunas etapas procesales, y la publicidad de criterios y de los mecanismos de que dispone para hacer más eficientes y equitativos los procedimientos;

2.- en segundo lugar, la Comisión contempla reformas en el manejo de solicitudes de Medidas cautelares, con el objeto de dotar de mayor certeza a los actores y mayor transparencia a sus consideraciones.  Asimismo, la Comisión pretende considerar las mejores prácticas y lecciones aprendidas a través de décadas de implementación de procesos de protección, con el objeto de perfeccionar este mecanismo y continuará realizando revisiones periódicas de las medidas adoptadas;

3.-la Comisión lleva a cabo Monitoreo de la situaciónn de países  a través de Visitas in loco, visitas de trabajo, informes de país y el Capítulo IV de su Informe Anual.  La Comisión reflexiona actualmente sobre los principales elementos relacionados con dicho capítulo, como su alcance, sus parámetros y la metodología de su preparación, y considera la posibilidad de elevar algunos de ellos a rango reglamentario tras amplia consulta y ponderación; y

4.- en cuarto lugar, la Comisión busca recibir insumos que le permitan perfeccionar sus labores de Promoción.  Ha elaborado, con este propósito, un catálogo que comprende las actividades de promoción que desarrolla usualmente, con el objeto de que los actores del Sistema le proporcionen observaciones sobre los indicadores a tener en cuenta para medir su impacto, los criterios a examinar para considerar su eficacia, y las consideraciones que podrían maximizar su eficiencia;

5.- la Comisión también ha creado un módulo titulado “Otros aspectos relacionados con el Fortalecimiento”, que busca ser un espacio abierto y receptivo para que los actores del Sistema hagan conocer a la CIDH sus inquietudes sobre otros temas del funcionamiento del Sistema Interamericano de Protección de los Derechos Humanos.

Así no, Dr. Fernández, usted ha dicho que este pueblo no sabe conceptualizar, por ello sus corifeos y adulones destacan su genialidad propositiva, es mas, creen que usted acaba de inventar la rueda, mas ésta hace siglos que fue inventada.