Existen dos formas contrapuestas de leer: la lectura literal y la lectura razonada. Algunas personas generalmente abordan los textos literalmente; otros lectores se inclinan por la lectura razonada y contextualizada. En la lectura literal cuando el texto dice que llovió durante “cuarenta días y cuarenta noches” las palabras significan que la lluvia duró exactamente el intervalo de cuarenta rotaciones de nuestro planeta. En la lectura razonada de los mismos vocablos el contexto determina si es una medición exacta y por tanto una expresión literal, o si en cambio es figurativa. En el caso del libro de Génesis, la lectura razonada arroja que el mensaje es que llovió mucho y durante largo tiempo, suficiente como para causar estragos y expresar la extrema ira de Yahvé, y no necesariamente que lloviera durante cuarenta rotaciones del planeta según un parte meteorológico. Son dos formas antagónicas de abordar la vida, y el choque entre ellas puede incluso producir serios conflictos.

En este mes de Ramadán, como viene ocurriendo desde hace siglos, las dos lecturas coránicas divergentes hubiesen podido producir diferencias en la fecha de inicio del ayuno reglamentario (en 2017 coincidieron las dos lecturas en iniciar el sábado 27 de mayo). Los tradicionalistas insisten en que Ramadán empieza, según estableció textualmente el profeta Mahoma  en el Corán, al día siguiente de avistar la luna nueva por primera vez en el noveno mes de su calendario. Para el literalismo coránico es preciso constatar visualmente  la luna nueva para determinar la fecha de inicio del mes sagrado. Los fieles más liberales entienden que Mahoma escribió cuando aún no había conocimientos científicos suficientes para determinar las fases lunares basado en cálculos astronómicos, pero que como hombre inteligente el Profeta hubiese adaptado la regla al contexto actual.  Ellos no requieren avistar la luna nueva para establecer el inicio de Ramadán, pues tienen confianza en el método científico y para ellos lo esencial es iniciar con la luna nueva. En su lectura razonada no se permanece esclavo de la palabra del Profeta escrita en el contexto del siglo VII, y lo importante es celebrar el mes completo de Ramadán de cabo a rabo. En la actualidad el cálculo astronómico es la manera más precisa de determinar el inicio y el fin del mes, habiendo superado el avistamiento como método exacto.*

Por suerte parece que esta divergencia de criterios sobre el método para determinar el inicio de Ramadán no provoca graves conflictos entre las diferentes ramas de pensamiento que difieren en su lectura del texto sagrado. Cada quien inicia el ayuno en la fecha de su preferencia sin imponer su criterio sobre los demás (además usualmente coinciden los resultados de los dos métodos). Sin embargo, sabemos que desafortunadamente no siempre las diferencias de lectura se resuelven pacíficamente.

El Corán manda a guardar ayuna total (sin ingerir sólidos ni líquidos de ninguna clase) todos los días del mes de Ramadán desde el amanecer hasta el anochecer. En La Meca, por su cercanía a la línea ecuatorial, las horas de luz solar son relativamente uniformes en duración.  Aunque constituye un sacrificio considerable de parte del creyente, es factible y los fieles llevan siglos ayunando durante Ramadán. Pero en los países nórdicos del sol de medianoche es prácticamente imposible practicar al pie de la letra este importante deber coránico cuando Ramadán se celebra en pleno verano, y no conlleva ningún sacrificio en invierno cuando permanece oscuro casi las 24 horas. Leer literalmente el Corán en este contexto prácticamente prohíbe a los observantes permanecer en los países nórdicos durante Ramadán en verano. En cambio una lectura razonada en el siglo XXI permite observar el ayuno en el horario establecido por cálculo astronómico para La Meca tanto en verano como en invierno sin importar la ubicación geográfica, si no fuere factible el peregrinaje a esa ciudad sagrada durante Ramadán.

El lector literal lee textos complejos como si fuesen instrucciones de un fabricante para el uso y mantenimiento de un aparato cualquiera, sin apartarse ni una tilde del sentido ordinario de las  palabras (que muchas veces cargan más de un significado). Insistir en la lectura literal de escritos antiguos y complejos  puede ser muy peligroso (sobre todo en textos traducidos de idiomas exóticos, los sagrados y los legales), pues incluso el significado de las palabras cambia con el tiempo y pueden existir muchas versiones distintas de un mismo libro. El lector literal insiste en que su lectura es la ortodoxa y con frecuencia  proclama infieles a quienes no aceptan su método. Le es muy difícil entender y aceptar la ironía, el sarcasmo,  la sátira, la parodia y otros útiles recursos del lenguaje. De ahí a la intolerancia, la persecución, la excomunión e incluso el destierro de los liberales herejes, solo hay un paso.

Una de las más importantes tareas de la escuela es enseñar a leer comprensivamente. Esto significa primero capacitar a los jóvenes para determinar cuándo un texto debe ser leído literalmente y cuándo requiere de contexto para comprender su esencia. Algunos textos utilitarios requieren lectura literal y es raro que un lector se equivoque al abordarlos. Otros textos son mucho más exigentes, ascendiendo en complejidad hasta llegar a la sublime poesía, que raras veces tiene una lectura única. Cada texto debe ser abordado por el lector de acuerdo a su naturaleza y en su contexto. En todo el mundo muchas escuelas siguen fallando en lograr el alto nivel de comprensión lectora que se requiere en la sociedad compleja y globalizada del conocimiento, provocando con ello una verdadera crisis en la capacidad de pensamiento crítico en gran parte de la población escolarizada. Los dominicanos debemos analizar las debilidades de nuestros planes de estudios básicos y la capacidad de nuestros maestros para tomar medidas que literalmente transformen la educación de cara al futuro, privilegiando la lectura comprensiva como uno de los recursos más útiles para desarrollar el pensamiento crítico.

*Es interesante notar que algunos estudiosos atribuyen al afán de determinar con exactitud las fases lunares para poder cumplir fielmente con el mandato de Mahoma los grandes aportes del mundo islámico a la astronomía y a las matemáticas.

Lecturas:

http://spectrummagazine.org/article/caf%C3%A9-hispano/2012/07/09/el-literalismo-y-el-relato-b%C3%ADblico-del-diluvio

http://www.elconfidencial.com/mundo/2017-05-26/fecha-ramadan-cuando-empieza-sabado-domingo-luna_1389225/ 

http://www.hispantv.com/noticias/fotos/342644/iran-avistamiento-luna-mes-ramadan-ayuno   

http://www.aljazeera.com/news/2017/04/ramadan-fasting-start-date-170427062743037.html