Haré un breve recorrido para que ustedes entiendan cómo se maneja la política. Una cosa es la política como ciencia y otra como práctica, eso que llaman real politiké. El diputado Pedro Botello había escenificado algunas protestas en su provincia exigiendo la aprobación de su proyecto de ley que procura sean entregados el 30% de los fondos de la AFP a los trabajadores.
En una de esas protestas Botello, supuestamente, fue agredido por la policía, le lanzaron bombas lacrimógenas y fue llevado en una ambulancia a un hospital con un supuesto desmayo. El diputado responsabilizó al gobierno de esos ataques y catalogó como abuso lo que le hicieron.
El PLD respondió sacando a la luz pública un video en donde el diputado pedía que le hicieran una foto que quedara bien con una bomba lacrimógena en las manos para decir que lo del diputado fue inventado.
El diputado respondió a esa acusación haciendo una denuncia de que el gobierno tenía disponibles cien millones de pesos para comprar voluntades que le permitiera aprobar la prórroga del estado de emergencia. Sin embargo, ya ustedes conocen lo que sucedió el viernes pasado. Los dos que habían estado en una confrontación terminaron aliándose.
La política se nutre de realidades y los políticos responden a la conveniencia del momento, a lo que a ellos les convenga para sus fines y eso lo hacen todos los políticos. En varias ocasiones el PRM acusó al PLD de oponerse a que se otorgara ese dinero a los trabajadores porque era un tema sensible que estaba encontrando cierta simpatía en amplios sectores de la sociedad, ahora el tema lo toma el PLD como arma política y no se extrañen si también bajan una línea de que el Senado lo apruebe si ven que le puede generar simpatías.
Se ha dicho que las elecciones son una guerra donde la principal víctima es la verdad. En una campaña ningún partido político responde a los intereses del pueblo, sino a lo que convenga a sus candidaturas, por eso ni Gonzalo Castillo ni Faride Raful asistieron a un debate. Esa es la política amigos y amigas.
El interés por el pueblo es la excusa, el señuelo que colocan para generar adeptos. ¡Despierten! La campaña es una guerra por el poder unos porque quieren llegar y otros porque se quieren quedar. Lamentablemente hay un refrán que dice que en la guerra y el amor todo se vale. No estoy de acuerdo con el refrán, pero en este caso aplica muy bien.
Con este paso el PLD se anota cuatro puntos al mismo tiempo: 1) consiguió la extensión del estado de emergencia. 2) le quitó a la oposición un tema fuerte y sensible porque eso de la propuesta del 30% de las AFP ha ganado cierta simpatía en un amplio sector de la sociedad y hasta el momento toda la oposición estaba de acuerdo, excepto el oficialismo por lo que usaban este tema como señuelo alegando que el PLD no quería que se entregaran esos fondos, 3) somete a la oposición a una camisa de fuerza con lo del toque de queda y el estado de emergencia porque termina el día 27 de este mes, apenas ocho días antes de las elecciones y 4) ahora el problema lo tiene el Partido Reformista, y en especial el diputado Botello quien cometió el error de denunciar la supuesta inversión de cien millones en compra de diputados y ahora no sabe cómo justificar ante la sociedad su decisión.
Es importante aclarar que lo realizado entre el PLD y el Reformista el viernes es muy común en el Congreso cuando hay temas que son de difícil manejo y necesitan apoyo, simplemente intercambian apoyo por apoyo, tú apoyas mi propuesta y yo apoyo la tuya. El problema aquí es que, ante la denuncia que Botello había formulado días antes, ahora resulta difícil creer que se trató de un simple intercambio de apoyo. Por último, con esa jugada, el PLD también se quitó la espinita en el zapato que representaba este diputado.
Veremos cómo responde la oposición porque, a partir de hoy, entramos en una etapa crucial de la campaña con apenas 21 días de diferencia, pero de esto último hablaremos en nuestra próxima entrega.