El Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD), en sus diversos estudios en torno a la realidad social dominicana, ha observado que los procesos electorales de los últimos treinta años, se han convertido en una gran escuela, para la formación democrática y el desarrollo sociopolítico de nuestra nación.
Respecto a lo cual visualiza, que lo señalado, ha facilitando al pueblo aprender y educarse más, desarrollando un poder por medio del voto, que conduce a nuestra clase política, hacia horizontes que les exigen ajustar su conducta pública y privada, a través de una escala de valores guiada por un mayor grado de integridad y humildad.
Accionar que pondera su relevancia, por requerir de los actores políticos, hacer de las elecciones la principal escuela de enseñanza del país, por los requerimientos que exige la sociedad actual, que hace una prioridad a cargo de ellos, pasar el examen de las urnas, con las mejores de la calificaciones y evaluaciones que expresen los ciudadanos a su favor, en sus opiniones y al momento de usar su facultad de elegir.
Factor que contempla un mayor enraizamiento, por la incidencia impactante que ha venido teniendo en las ultimas décadas, el aumento de los niveles educativos y conciencia social en la población nacional, generando que la conquista del aprecio del elector, se debe ganar día tras día mediante un mejor proceder, para su debida valoración cada cuatro años, por un jurado con que con el tiempo, alcanza mayores niveles de sabiduría, que lo es: El pueblo dominicano.
Lineamientos trazados por el CRD:
Conforme a la visión del CRD, el referido modo de proceder, traza una escala de valores y forma de pensar, no centrada en la vanidad y el egoísmo, sino en una vida política sana y diáfana, en procura del establecimiento de un Estado y sociedad, que cumplan sus esenciales roles, en las metas de desarrollo que debemos lograr, para mejorar los entornos sociales en que convivimos y nos desarrollamos.
A cuyos criterios, sus estudios agregan, que con los citados lineamientos, ha nacido una bien consolidada escuela electoral, que obliga a los partidos a proveerse de líderes, con la suficiente capacidad de pasar los exámenes de ésta, dotándose de los dones y virtudes que se requieren para transformar la prepotencia en humildad, el egoísmo en desprendimiento, el odio en amor, además, de cambiar la pobreza y el atraso por la riqueza.
Dentro los cometidos propuestos, el Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD), es de la convicción¸ que atravesamos por una etapa de nuestra historia política, que enmarca mayores esfuerzos a cargo de los dominicanos y dominicanas, para seguir haciendo de nuestros procesos electorales, primordiales centros de enseñanza, aprendizaje y evaluación de la dirigencia y demás integrantes de nuestras entidades políticas, dado sus fecundos frutos a favor del desarrollo sustentable de República Dominicana.