El periodista Rafael Núñez, vocero de Leonel Fernández, antes y después del holocausto, en su artículo RECOGER EL LEGADO DE BOSCH, publicado en el prestigioso Diario Libre, del lunes 1 de abril del presente año, comete una sarta de errores conscientes, intentando deformar la historia en provecho de su jefe político, sin ocultar que tiene su mirada puesta en el Octavo Congreso Norge Botello, donde el PLD se propone configurar su nueva estrategia de engaños, a fin de prolongar su control del Estado, a pesar de los tantos actos de abusos de poder, solo comparables a los de Santana, Báez y Lilís.
Las ideas centrales, de la prestidigitación intelectual de Núñez, son las siguientes:
1) “Cuando Juan Bosch concibió la creación de un partido político nuevo, diferente, que se convirtiera en la negación de todo lo que terminó siendo la primera organización fundada por él, el PRD, lo hizo sobre la base de dar al pueblo dominicano un instrumento capaz de realizar las transformaciones económicas, sociales, culturales y políticas que son banderas del ex presidente de la República”.
Al escribir, Núñez silencia, que Bosch había dejado de creer en la democracia, según consta en su tesis de la Dictadura con Respaldo Popular, afortunadamente rechazada por la mayoría liberal del PRD. En múltiples ocasiones, el profesor Juan Bosch denunciaba que era perseguido por el imperialismo y la derecha dominicana, lo que le indujo a montar una campaña de descrédito contra la democracia, llamándole “matadero electoral”, “la representativa” y muchos otros epítetos.
Otra prueba, fue la actitud asumida por el líder del PLD, ante las impugnaciones de Balaguer al triunfo abrumador del PRD en 1978, cuando propuso -en rueda de prensa nacional que llenó de estupor a la sociedad dominicana y la comunidad internacional- la creación de una Junta Cívico Militar para evitar el ascenso al poder de Don Antonio Guzmán Fernández, en un velado golpe de estado al que felizmente nadie hizo caso.
Como se ve, el licenciado Núñez, tiene razón al decir que Bosch se propuso crear un partido nuevo, diferente al PRD, porque en su larga trayectoria de lucha heroica nunca se vinculó a golpes de estado alguno, en cambio, el PLD con apenas cinco años de creación, andaba proponiendo asonadas militares contra la incipiente democracia nacional.
2) El licenciado Núñez, expresa en su artículo que: “Ese partido no solo fue incapaz de introducir cambios institucionales en los períodos 1978-1986, sino que con la desaparición física de su líder, doctor José Francisco Peña Gómez, el proceso de descomposición y degradación se aceleró, al extremo de que, de no surgir un liderazgo de nuevas ideas, el PRD parecería transitar hacia un desmembramiento”.
El licenciado Núñez, volvió a volar tan alto que perdió de vista la realidad del país, al ignorar la Ley de Amnistía del 1978, que dio plena vigencia a las libertades públicas, facilitando el retorno de los exiliados, liberando los presos políticos, eliminando de cuajo la persecución de la juventud y de las ideologías, y reunificando las familias del país.
El veterano comunicador, probablemente adrede, omitió la despolitización de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional, la derogación de la Ley que mantuvo estáticos los salarios por 12 años y el incremento al presupuesto de la UASD. En forma notable gloriosa, el PRD aplicó su clara visión en defensa de los recursos naturales nacionalizando el Oro de la Rosario Dominicana.
El amigo periodista, desde luego ocultó, la inmensa demostración de tolerancia política del gobierno del PRD, cuando nunca permitió que se enjuiciara la dirección del PLD por alimentar un golde de estado con su propuesta de “salida a la grave crisis política electoral del 1978”.
Hay que destacar que como por arte de magia, el pueblo dominicano pasó de la gran represión y semidictadura de los doce años, a un régimen de plenas libertades políticas, económicas y sociales garantizadas por la mano firme de Antonio Guzmán Fernández y su gobierno de profundas convicciones democráticas.
Si estos no son cambios institucionales positivos, entonces que explique a qué se refiere el dilecto amigo periodista.
Lo más importante es que los “cambios institucionales” no quedaron en lo dicho hasta ahora, sino que debemos continuar detallando lo siguiente:
a) En 1963 el PRD puso en práctica un extraordinario plan de reformas educativas, consistentes en la creación de las Escuelas de Formación Laboral Acelerada y en el envió de decenas de jóvenes a estudiar en el exterior carreras claves al desarrollo nacional.
En los años 1970, estimuló la creación de la ADP, y más tarde, a su regreso al poder creó el INFOTEP, el seguro de maestros, el escalafón magisterial, las modernas escuelas e institutos superiores de formación docente, y ejecutó el más amplio programa de construcción de escuelas a nivel nacional.
Asimismo, en 1983 creó el Consejo Nacional de Educación Superior (CONES), anticipándose a su magistral establecimiento en el 2000, de la Secretaria de Estado de Educación Superior Ciencia y Tecnología.
Habría que preguntarse, ¿qué otra cosa hizo Leonel Fernández que no fuera negar el 4% del PIB como presupuesto anual, argumentando que el sistema educativo no tiene la capacidad para mejorar la calidad de la enseñanza?
b) Sería imperdonable ignorar el empoderamiento y reconocimiento del PRD en 1983 a la mujer dominicana, ocurrido por primera vez en la historia, mediante la creación de la Dirección General de Promoción de la Mujer, elevada luego a Secretaria de Estado de Asuntos de la Mujer.
Es el PRD que, con la licenciada Ivelisse Prats Ramírez de Pérez pasa a ser el primer partido mayoritario presidido por una dama.
Del mismo modo, gracias al PRD, se aprueba la Ley del 33% de los cargos electivos para la mujer.
Asimismo fundó a FEDOMUSDE primera organización poderosa de mujeres del país.
Y es el PRD que lleva al Palacio Nacional la primera mujer vicepresidenta.
¿Habrá que preguntar que ha hecho el PLD por la mujer Dominicana?
c) Los mismos méritos tiene el PRD con la juventud del país, al fundar el mismo año, la Dirección General de Promoción de la Juventud, para servir al divino tesoro de los pueblos. Esta entidad se elevó en el 2000 a Secretaría de Estado de la Juventud, acompañada de una Ley General de Juventudes.
Habría que preguntarse ¿qué ha hecho el PLD por la juventud dominicana?
Puede asegurarse sin posibilidad de exageración, que la mujer y la juventud, han recibido todo el tiempo un trato preferencial y exquisito del PRD.
d) Ojala que no olvide, que el PRD introdujo la preocupación y acciones positivas eficaces, para la defensa, protección y regulación del medio ambiente y los recursos naturales, temas que nunca antes fueron preocupación del Estado nacional, hasta la creación en 1983 de la Comisión Nacional Técnica Forestal(CONATEF), cuando al mismo tiempo, se establecieron las principales áreas protegidas del país, a saber, los parques nacionales Jaragua, Sierra de Bahoruco y Monte Cristi, y, las reservas científicas de Manglares de Manzanillo, el Morro de Monte Cristi, Loma Quita Espuelas, Valle Nuevo, Laguna de Oviedo, Laguna Rincón, El Limón y Pelempito, entre otras.
Mejor aún, en el 2000, el PRD creó la Secretaría de Estado de Medio Ambiente y Recursos Naturales, y en 1984 la Ley sobre Áreas Protegidas.
Habría que preguntarse, ¿qué cosa ha hecho el PLD por los recursos naturales?
e) Algo que no debe obviarse, es el impulso del PRD en el período 1982-86, a profundas y audaces reformas ECONOMICAS Y MONETARIAS, propulsando el crecimiento de las zonas francas, del turismo y las exportaciones no tradicionales, a parte de que, desmontó los impresionantes privilegios acumulados a la sombra del modelo de sustitución de importaciones.
Es oportuno añadir, que el sistema bancario nacional agradece actualmente su fuerte crecimiento y solidez, al marco legal aprobado por el PRD en 2004, tras la primera quiebra bancaria condenada judicialmente en América, gracias a la firme voluntad política del gobierno del PRD.
f) Si alguien quisiera resaltar un cambio institucional de justicia democrática, lo tednria en la creación del sistema nacional de seguridad social, porque ningún otro acto se compara con éste, en sus efectos positivos al desarrollo de la sociedad dominicana. Como recordación a su lucha por un mejor país, en mayo del, 2001 se promulgó la Ley 87-01 creando dicho sistema en honor a José Francisco Peña Gómez.
g) Las leyes de incentivos al sector agropecuario y agroindustrial son hijas legítimas del PRD, entre las que pueden citarse Conaleche, Instituto de la Uva, Ley de protección a la producción nacional, Codocafé, programas de invernaderos, las presas como López Angostura, contra embalse de Bao para fortalecer la Presa de Taveras, Hatillo, Sabaneta, Sabana Yegua, Monción, los proyectos Aglipo, cambios de cultivo e innovaciones tecnológicas, programas de pignoración de arroz, entre otros.
h) Nadie podría negar que el PRD es padre del sector salud en vista de que la OMS y la OPS tomaron sus programas de medicina preventiva y de vacunación, como modelos para toda la región de América Latina. Es innegable, el éxito de la construcción de clínicas rurales y hospitales, la creación de residencias médicas, y sobre todo, la obra maestra, el mencionado sistema nacional de seguridad social.
i) El desarrollo municipal, es otro hijo legítimo del PRD, desde la aprobación de la primera Ley No.140 del 1983, sobre transferencia de recursos del gobierno central a los municipios, hasta el establecimiento de la ley que les otorgó el 10% de los recursos internos del presupuesto en 2002.
En adición, debe mencionarse, el formidable programa de equipos pesados iniciado por José Francisco Peña Gómez en 1982, hasta la numerosas maquinarias pesadas de alta calidad asignadas en el período 2000-2004.
La zona metropolitana de Santo Domingo debe agradecer el gran acierto que constituye su reordenamiento territorial, mediante la creación de Santo Domingo Este, Norte, Oeste, Los Alcarrizos, Boca Chica, Guerra, San Luís, La Victoria, Pantoja, la Guáyiga y Palmarejo.
Si existe un sector que expresa fielmente la visión de futuro del PRD, es el de las municipalidades, donde sus efectos se sienten no solo en Santo Domingo, si no en toda la geografía nacional.
j) Sin ánimos de mezquindad hay aceptar que el PLD fue el principal propulsor de la Constitución vigente, aunque obviamente no le hubiese sido posible, sin el Pacto de las Corbatas Azules, que hizo posible la traicionera participación de legisladores del PRD.
Hubiera sido interesante incluir las altas cortes, sin embargo, es lamentable que las mismas estén siendo manipuladas para blindar la impunidad impuesta por Leonel Fernández considerando nacional e internacionalmente altamente corrupto.
Es chocante, pero la casi totalidad de los intelectuales del PLD, presentan los logros y avances del gobierno de Juan Bosch como modélicos, sin advertir, que dicha administración correspondió al PRD. Solo el PRD llevó a don Juan al Poder.
La honradez, la eficiencia y el heroísmo de esa administración, corresponden también a los ministros, funcionarios y empleados, todos dirigentes del partido blanco, y obviamente, aunque don Juan fuera genial , necesitaba el concurso de los demás.
Pero como tarde o temprano la historia lo revela todo, múltiples encuestas consideran que el gobierno boschista de 1963 es el mas honesto de la historia. Asimismo, reputadas encuestas recientes señalan que el 75% de la sociedad considera los últimos gobiernos del PLD como los más corruptos de la historia. Lógicamente, la diferencia es el partido.
Por otra parte, es contradictorio que superando el PRD en 200 mil votos en las pasadas elecciones presidenciales, al partido morado, sea éste que gobierne en virtud de prácticas antidemocráticas como el manejo abusivo de los recursos del poder, el turbio empleo del défict fiscal, y , a la compra de conciencia mediante el mas descarado clientelismo político.
A este respecto, importante es notar, que investigaciones de reputadas firmas de inteligencia económica, dan cuenta que el clientelismo oficial cuesta al país, sobre 20 mil millones de pesos anuales ilegalmente transferido por el Gobierno a militantes peledeístas, mediante botellas, nóminas, nominillas, compras amañadas, y personal supernumerario de cuellos blancos y alta jerarquía política. Sin mencionar, los salarios astronómicos que rompen el alma al mas indolente.
Este es un dato horripilante, porque supera las partidas presupuestarias asignadas anualmente a todos los municipios de la nación.
En adición, a Loenel Fernandez se le tiene como el presidente mas nefasto contra el patrimonio público, ya que tan pronto asumió el poder en 1996, llevó personalmente al Congreso Nacional la nefasta Ley de Capitalización, aprobada en el Senado reformista presidido por Amable Aristy Castro, en abril del 1997, naturalmente con los votos peledeístas y reformistas, ya que el bloque del PRD votó en contra, procediendo de inmediato a desmantelar el inmenso patrimonio público dominicano.
Las riquezas dilapidadas y malversadas fueron las siguientes: uno de los mayores emporios azucareros del mundo, integrado por diez ingenios productores de azúcares, el Consejo Estatal del Azúcar (CEA); un consorcio de 34 industrias y empresas de las mas diversas ramas, controladas por la Corporación Dominicana de Empresas Estatales (CORDE); y, el monopolio nacional de energía, la Corporación Dominicana de Electricidad (CDE), valorado en miles de millones de dólares americanos.
Estas empresas estratégicas al desarrollo nacional, fueron prácticamente regaladas o descuartizadas, como se dice popularmente, usándolas para el pago de favores políticos, como en otras obscuras operaciones financieras, jamás aclaradas ante su legítimo dueño, el pueblo dominicano.
No obstante, la gravedad de lo anterior, la obra maestra y macabra, de supremo entreguismo, robo y perversidad de Leonel Fernández, es la firma del contrato Leonel-Barrick Gold, donde regaló el mayor patrimonio de la nación en toda su historia.
El tesoro contenido en las minas de oro, plata, plomo, cobre y cinc de Pueblo Viejo, sobrepasa los 250 mil millones de dólares, actualmente exhibido y explotado por Barrick Gold en claro escarnio al país, como si fuera de su exclusiva propiedad donde el Estado no tiene pena ni gloria, dándose el lujo de exportar los lingotes directamente sin las declaraciones aduanales establecidas en las leyes.
No cabe dudas, que en algún momento, el pueblo dominicano habrá de cobrarle a Leonel Fernández, el “capo di tutti i capi” todos los daños y maldades cometidos contra los pobres de Quisqueya.
Estimado licenciado Núñez, usted ni nadie podrá evitar jamás que Leonel Fernández sea visto por las presentes y futuras generaciones, como la persona mas desalmada, autora de los peores actos antipatrióticos hiriendo el corazón mismo de la nación.
Los voceros oficialistas deben entrar en razón, porque constituye una verdadera osadía valerse de sus propias villanías para presentarse como héroe impoluto como si la nación padeciera de amnesia colectiva. FIN.