El sistema de partidospoliticos de la Republica Dominicanaesta diseñado para que las mafias gobiernen. Esa estructura mafiosa esta detrás de todos los aspirantespresidenciales. Desde que alguien tiene posibilidades de poder, y a veces muchoantes, esas mafias se apoderan del lider-candidato, lo secuestran.

Muy especialmente enlos partidos con mayor experiencia deEstado. Los tres partidos mayoritariosson en realdad uno solo. En materia de estructura interna, políticas públicas ycaudillismo. Son tres maquinarias del poder al servicio del atraso, el desfalcoy la corrupción, ahora bajo control de las mafias.

Son grupos que asaltanlos partidos y sus candidatos para terminar con el santo y la limosna. Huelendonde hay posibilidades de poder y actúan como pulpos para agarrar sus presas: lasposiciones que mueven más recursos del Estado.

Lo grave es que estacultura del atraco de los poderes públicos no comenzo ayer. Viene de lejos,desde que Crstobal Colón pisó tierra en Santo Domingo y le quitó sus mujeres,sus joyas de oro y plata a los indios tainos. Solo dejaron vivo nuestro famosocomplejo de Guacanagarix. Y la predilección por lo extranjero en perjucio de lonacional.

Después que loshaitianos intentaron hacernos franceses en el 1822 vinieron los fundadores, conJuan Pablo Duarte a la cabeza, y crearon la primera república. Pero al primeroque traicionaron fue al padre-fundador con el primer presidente-caudillo, PedroSantana, el anexionista pro-español. No permtieron que Duarte gobernara como Presidente,lo desterraron y 64 años después murió pobre, humillado, vejado y olvidado enVenezuela. Así le pagamos a nuestropadre de la Patria.

Después vinieron losrojos y los azules, en la segunda y la tercera repúblicas, los dictadores y susdictaduras, sumados como eslabón a la cadena de opresión que llevamos comogrilletes quinientos años después del Descubrimiento y la brutal conquista delos europeos. Que exterminaron nuestra original raza taina y juntaron todos losladrones y delincuentes esclavos europeos para fundar nuestra nueva génesisracial. Ahora son otros los colores y los rostros, pero las mafias son lasmismas: morados, blancos, rojos. Tres maquinarias del desastre nacional.Siempre con la falsa promesa de los quevienen nuevos al poder de que acabarán con la corrupción de la administrcionanterior.

Una democracia que cadacuatro años pone a la población como estúpidos en filas camino a las urnas "a votar por elmejor", sin garantías de limpieza y transparencia, en la conducción políticadel Estado. Las maquinarias que siempre secuestran al candidato elegido ydeciden por nosotros. Ahora esas maquinarias están más "renovadas" que nunca, con mayor poder, al legitimar fuerzas delnarcotráfico, la delincuencia y el sicariato, como expresiones nuevas del SigloXXI.

Es por eso que ampliossectores nacionales, ciudadanos comunes pensantes, han preferido extraer suvoto de las urnas. Guardarlo como un valioso recuerdo del Museo del HombreDominicano. Y son cada vez más los que ingresan las filas del abstencionismo, masdel 60% de la población, la verdadera mayoría, decepcionados, frustrados con elfracaso estrepitoso de nuestra democracia chatarra de pandilleros y alacranes, quehan hundido la esperanza de prosperidad en todas las lineas maestras de la Nación y sus ciudadanos en educación,salud, vivienda, trabajo y alimenación.

Los discursos decampaña ofertan siempre lo mismo: el paraiso terrenal en cada elección presidencial. Pero nunca los apagones desaparecen ni lacorrupción de Estado. Las villas y castillos, las mansiones de pelafustanesenganchados a la vida de las monarquíascomo el Senador de San Juan Felix Bautista y sus reinados en Panama y Haiti, más las millonarias cuentas en dólares de los nuevos ricos del Estado pobre, son siempreel balance final más contundente despuesde cada administración. Gobiernos van y gobiernos vienen, gobiernos suben ygobiernos bajan con la misma historia.

Hay que pregunar enconsecuencias, a propósito de las candidaturas y precandidaturaspresidenciales, si ya salimos de las mafias que han gobernado con el Partido de la Liberación Domnicana (PLD) en los últimos tresgobiernos. Las mismas lacras que sobravalúan las obras contratadas de grado agrado, los mismos que manejan las grandes compras en las Fuerzas Armadas y enla Policia Nacional, dejando sumas millonarias en bolsillos de los depredadoresde la Nación que segun dijo el presidente Leonel Fernandez en 1996 robaban cadaaño 30 mil millones de pesos. Ahora, segun Hotoniel Bonilla, Jefe delDepartamento Anti-corrupción, se hanllevado más de RD$100 mil millones de pesos en sus gobiernos en los ñltimosdiez años. Pero el PRD estima que la suma de la corrupción en la administracionpeledeista llega a RD$ 400 mil pesos dominicanos.

Son los mismos que asaltaron el seguro médico de miles de maestros y dejaron sin medicina ni atención desalud al magisterio nacional, especialmente nuestros maestros enfermos,jubilados. Con el silencio cómplice del ex-ministro de Educación, MelanioParedes y los nuevos "líderes" de laAsociación Dominicana de Profesores (ADP).

Son los mismos que asaltaron la Liga MunicipalDominicana (LMD) y robaron US$116 milloncitos "ridículos", según el expediente presentadocontra el Senador de Higuey Amable Aristy Castro, el Emperador Rey Midas de laprovincia Altagracia, en la Cámara deCuentas. Un expediente ahora dormido enuna "comisión investigadora" del Senado.

?Por cual gobierno nicual justicia encarcela políticos con licencia para robar en la RepúblicaDominicana?

?Que harían DaniloMedina o José Tomas Perez o cualquierade los otros precandidatos del PLD, con las mafias detrás del poder, en caso deganar la convención interna fijada para el 24 de junio, si alcanzara la Presidencia en el 2012? Danilo ha dicho: "no voy al Estado a robar".Bien. Y José Tomás afirma que expresa elpensamiento ortodoxo de honestidad y transparencia de Juan Bosch. Bien. Pero esasmafias que han tomado el control de los poderes públicos, la justicia,el Congreso y el PoderEjecutivo, como la van a combatir? Pormás buena que sea su plataforma política, por mejor intencionado que puedanestar cualquier lider politico, por diáfano que parezca su discurso, como lostienen Danilo Medina o José Tomas, larealidad está ahí, dentro de su propio partido, con individuos mafiosos, queson el verdadero poder detrás delpoder.

Lo mismo sucede conHipólito Mejia, quien ya gobernó y no sacó esas mafias del poder y fue permitiórodearse de mafiosos que como, el ex-coronel José Ernesto Quirino, llevaron elnarcotráfico a su máxima expresión más alta en el 2000-2004 dentro de lasFuerzas Armadas. Hoy con los casos delmeganarcotraficante José Figueroa Agostoy compartes aquello es juego deniños.

Los actos de corrupción en todos los gobiernosanteriores del PRD hablan claro de su pasado, presente y futuro para laRepública Dominicana, una nación hastiada de pobreza indigna patrocinada por gobiernosindecentes y cuya gobernabilidad ha caído en manos del latrocinio y ladelincuencia, muchas veces en alianza con empresas del sector privado, como hadicho la Iglesia Católica en su mas reciente Carta Pastoral.

Y las perspectivashacia el futuro no parecen mostrar ningún cambio en esa dirección, a menos quesuceda lo de Venezuela que los socialdemocratas y socialcristianos sedesplomaron como castillos de arena y dieron paso a una nueva era politica conel ex-coronel Hugo Chavez. Eso está lejos de verse en Santo Domingo, aunque unade las tres maquinarias del desastre ya está sepultada, aunque muchos de susmiopes dirigentes no lo crean. Hundieron al Partido Reformista las fuerzas delbalaguerismo cruel y sanguinario más gastado modelo de injusticia social.

Mientras los partidosno pongan en claro políticas de justicia firme en sus plataformaspresidenciales escritas como promesa de campaña, y que prediquen practicandodesde arriba, desde el poder, con el ejemplo que ponga a raya las mafias,castigando los depredadores de la riqueza y los bienes públicos, no hay ninguna esperanza ni mucho menoscredibilidad ni fe en el bipartidismo partidismo nacional. Cada vez massumergido en el descrédito público, lo que se expresa en la cada vez mas altaabstención electoral. En ese marco, ?quéimporta quien gane las elecciones….si todo sera mucho más de lo mismo? ?Cual será el cambio? .