Siempre he sido partidaria de los que tienen menos posibilidades de ganar. Gozo más aún cuando el probable perdedor se convierte en héroe.

Hace tres mil años en un campo de batalla palestino, un chico pastor mató a un imponente guerrero, nada más que con una piedra de su honda. Desde ese momento los nombres de David y Goliat han permanecido como ejemplo de peleas entre probables perdedores y gigantes. La victoria de David fue improbable y milagrosa.

Venir de raíces humildes como David no siempre significa que se esté predestinado al fracaso. En realidad, este puede ser el obstáculo que impulsa a algunas personas al éxito. En los Estados Unidos muchas personas a menudo alardean acerca de cómo ellos provienen de raíces humildes, de lugares de pobreza y de como ellos salieron adelante por sí mismos. Superarse en los negocios significa comenzar un negocio sin ayuda externa o capital.

Es altamente nutritiva y sirve de base a muchas recetas por todo el mundo. Esto me recuerda el dicho, “la basura de unos es el tesoro de otros”.

Las dos familias de mis padres vienen de extracción humilde y alcanzaron el éxito por sí mismas. Mi padre dejó la escuela a la edad de 14 años para sostener a su madre viuda y con el tiempo desarrolló un próspero negocio en aditamentos para mejorar la audición. Por lo tanto, durante años he tenido mi corazón inclinado por los probables perdedores que terminan como héroes en la sombra.

De varias maneras, las humildes y comunes malas hierbas pueden ser como David y mi padre; las hierbas de todos los días que sirven importantes funciones en nuestros hogares, en las comunidades, o en el ambiente. La industria farmacéutica en la actualidad gasta mucho dinero investigando las denominadas hierbas malas, con la esperanza de descubrir nuevos productos medicinales. Esas investigaciones con frecuencia comienzan con las plantas comunes que aparentan inútiles, pero que eran o son usadas por los campesinos y los pueblos indígenas como alimentos, para dolores de barriga, problemas de la piel, heridas y, hasta para curar el cáncer.

sopa de beldroegasAlgunas de las hierbas que las personas arrancan de sus jardines y campos o que bombardean con herbicidas merecen una segunda oportunidad. Por ejemplo, considere la verdolaga (Portulaca oleracea). La mayoría de las personas en los Estados Unidos y en el Caribe probablemente han visto esta plantita, que crece fácilmente en los campos y los canteros, en los lados de las carreteras y, en los bordes de las aceras. Esta planta contiene mucho omega-3 ácido graso y antioxidantes, así como una serie de vitaminas y minerales. De acuerdo con los expertos de la Universidad de Texas, la verdolaga contiene de 10 a 20 veces más melatonina, que es un antioxidante, que cualquier otra fruta o vegetal que ellos hayan examinado.

La verdolaga es una planta baja, rastrera, con hojas pequeñas suculentas y pequeñas flores amarillas con cinco pétalos (hay más o menos 40 variedades, cada una de ellas con ligeras diferencias en las hojas y flores). La verdolaga tiene el pedúnculo liso, rojizo con hojas alternadas. Dependiendo de las lluvias las flores pueden aparecer en cualquier época del año. La planta tiene una raíz pivotante con pequeñas raíces secundarias fibrosas y es capaz de sobrevivir en suelos pobres o compactados, tales como las grietas en las aceras. La planta es muy persistente y puede crecer rápidamente para cubrir grandes áreas. De allí deriva el dicho, “crece como la verdolaga”. Este dicho puede aplicarse a muchas cosas o situaciones, incluidas las sociales. Por ejemplo, un rumor puede difundirse como la verdolaga.

Los botánicos afirman que la verdolaga es nativa del Oriente Medio, África y Asia, pero no de América. Sin embargo, hay algunas pruebas que muestran lo contrario. Las especies fueron detectadas en una excavación arqueológica canadiense cuya fecha remonta a 1430 AD, lo que sugiere que la verdolaga llegó a América antes de la llegada de los europeos. También se especula que en el sudoeste de los Estados Unidos y en el norte de México, las tribus precolombinas de indígenas ya recogían y comían verdolaga. Durante largo tiempo esta planta ha sido un alimento de subsistencia en los momentos en que las cosechas de otras plantas han fallado.

La verdolaga se come en la mayor parte del Viejo y el Nuevo Mundo. Los pedúnculos, las hojas, y los brotes de las flores son comestibles, y estos tienen un ligero sabor agrio y salado. La verdolaga puede usarse fresca en ensalada, fritas al estilo chino, o cocidas como se hace con las espinacas. La verdolaga es buena también en sopas y guisos. Los griegos usan las hojas y los tallos con queso feta, tomate, cebolla, ajo, orégano y aceite de oliva como aderezo para añadírselo a las ensaladas; esto una vez hervido pude añadirse al estofado de pollo. En Albania la verdolaga se cuece a fuego lento y se sirve con aceite de oliva como aderezo o, se mezcla con otros ingredientes y se usa como relleno en pastelería entre finas capas que se desmoronan.

purslaneLos hispanos en América conocen la planta con el nombre verdolaga. En el sudoeste de los Estados Unidos los mexicano-americanos fríen la verdolaga con ají verde y frijoles pintos. La verdolaga es muy importante en la cocina de la región central de México, donde se le añade al cerdo para cocinar el “puerco con verdolaga”. De acuerdo con esta receta, se cuece a la brasa el lomo de cerdo y cuando está casi listo, una salsa verde de tomatillos, ajíes verdes, cebolla y cilantro junto con verdolaga se unta encima de la carne. En el sur de Portugal la verdolaga o beldroega, como se la llama en portugués, se usa como el mayor ingrediente en una sopa. Véase la receta más abajo.

En el primer párrafo señalé que me gustan los probables perdedores. La verdolaga es sin duda una perdedora en el reino de las plantas, menospreciada y minusvalorada por muchos, pero también preferida y apreciada por otros. Es altamente nutritiva y sirve de base a muchas recetas por todo el mundo. Esto me recuerda el dicho, “la basura de unos es el tesoro de otros”.

Puede parecer extraño, pero cuando pensaba acerca de la verdolaga, recordaba la bachata. La bachata es una música que tiene orígenes modestos, viene de la clase marginada. Muchos dominicanos, especialmente los que se encuentran en las clases altas, la desprecian y afirman que solo disfrutan del merengue. No obstante, en otras partes del mundo como en Europa y la costa este de los Estados Unidos la bachata es muy apreciada.

Cuando visité la República Dominicana por primera vez no tenía conciencia social sobre la bachata. En pocas palabras, recuerdo que estaba en una casa campestre en La Cotorra y escuchaba música de bachata que subía desde el bar de la aldea colándose a través de la ventana. Fue una experiencia romántica y melancólica. En ese momento si alguien me hubiese cocinado un plato de guandules con verdolaga, lo habría comido con gran placer.

La sopa portuguesa de verdolaga o sopa Beldroegas

Ingredientes

  • 1 puñado de verdolaga
  • 1 Cebolla cortada
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cucharadita de paprika dulce
  • Sal y pimienta fresca recién molida
  • 1 hoja de laurel
  • Aceite de oliva
  • Huevos (1 por cada persona a quien se sirve sopa)
  • De 2 a 2 litros y medio de agua caliente
  • 4 papas, peladas y cortadas en tajadas
  • 1 taza de queso tipo parmesano, cortado en cubitos

Instrucciones

  • Retire las hojas de la verdolaga y lave bien con agua fría antes de usarlas.
  • Añada un buen chorro de aceite de oliva a la olla junto con la cebolla picada, los dientes de ajo, la hoja de laurel, la paprika y parte de la pimienta recién molida. Permita que cueza todo junto más o menos 5 minutos, removiéndolo ocasionalmente, hasta que la cebolla tome color y se ablande.
  • Añada la verdolaga y permita que se marchite durante 2 minutos, removiendo ocasionalmente
  • Añada el agua caliente, una pizca de sal y las rodajas de papas
  • Coloque la tapa sobre la olla y permita que hierva a fuego lento hasta que las papas estén casi completamente cocidas.
  • En este momento añada los huevos y el queso. Casque los huevos cuidadosamente y póngalos en la sopa; permita que escalfen durante 2 minutos.
  • Sirva con pan o panecillo; asegúrese de que sirve un huevo escalfado en cada porción de sopa.