Se acerca el fin de año y nuevamente nos toca hacer el inventario macabro de los feminicidios y otras formas de violencia contra las mujeres. A propósito del 25 de Noviembre, el tema estará en los medios por unos cuantos días y se reiterarán las mismas denuncias y las mismas propuestas que las feministas venimos haciendo desde hace décadas.

Y como cada año, no pasará absolutamente NADA: no se asignarán presupuestos adecuados para hacer frente al problema; no se mejorarán los procedimientos policiales, judiciales, médicos o psicológicos para asistir a las denunciantes; no se establecerán nuevas Unidades de Atención a Víctimas de Violencia, a pesar de que ni siquiera las hay en la mitad de las provincias y las que hay no dan abasto; no se establecerán nuevos refugios para mujeres maltratadas y sus hijos, a pesar de que sólo existen 3 a nivel nacional; no se harán campañas educativas para la prevención de la violencia machista; no se abordará esta violencia, ni se trabajará el machismo, en los planes de estudio del sistema educativo; no se mencionará el tema en los discursos presidenciales; no se aprobará la Ley Orgánica Integral para Prevención, Atención y Sanción de la Violencia Contra las Mujeres, que tiene años engavetada en el Congreso. Por el contrario, tan pronto pase el 25 de Noviembre volveremos a la cotidianidad dantesca de los feminicidios, las violaciones a menores y los incestos que constituyen el grueso de la crónica policial dominicana.

Las autoridades, claro está, se lamentarán muchísimo y escarbarán en sus estadísticas a ver si pueden agarrarse de alguna que muestre aunque sea una mínima reducción con relación a años anteriores. Las cifras que, por el contrario, muestren incrementos –como el número de denuncias de violencia interpuestas en las fiscalías o de llamadas al 911- se mencionarán lo menos posible. Vistos los magros presupuestos con que cuentan, poco pueden hacer las funcionarias encargadas más que rasgarse las vestiduras y tratar de disimular un poco la grosera indiferencia de sus jefes políticos frente al problema.

O quizás a alguno de estos jefes se le ocurra alguna idea genial, como la que tuvo hace un par de años el Procurador General de la República, de usar a las candidatas al concurso Miss República Dominicana Universo para difundir el mensaje de la prevención (1). ¿Qué se puede esperar cuando la máxima autoridad del Ministerio Público ni siquiera se percata del ridículo que hace al establecer una alianza estratégica con un concurso de belleza para combatir la violencia contra la mujer?

Lo cierto es que, concursos de belleza y rasgamiento de vestiduras aparte, las cifras de la Procuraduría General de la República (PGR) muestran que se mantiene la tendencia ascendente (2): en el primer semestre de este año hubo 54 feminicidios íntimos, poco menos que los 77 registrados durante el año pasado completo; en el 2015 hubo 74,000 denuncias de violencia de género a nivel nacional, sin contar los más de 20,000 casos atendidos por el servicio 911. El último año para el cual las cifras de la PGR ofrecen información sobre el curso judicial de las denuncias es el 2012, cuando se denunciaron 69,197 agresiones, de las que sólo se judicializaron 1,469 (es decir, el 2.1%), con apenas 355 fallos.

Las cifras anteriores se refieren abrumadoramente a la violencia de pareja, que no por coincidencia es la única forma de violencia de género para la cual se ha diseñado una política pública de atención y se han hecho esfuerzos de concientización a través de los medios –y aún así las expertas entienden que los casos denunciados solo representan una fracción de las ocurrencias reales. Considérese, por otro lado, que las denuncias de delitos sexuales registrados por la PGR para el primer semestre del 2015 apenas ascienden a 3,312 –cifra que incluye agresiones sexuales, violaciones sexuales, acoso, seducción de menores e incesto. En la gran mayoría de estos casos la víctima es una menor de edad, siendo muy escasas las denuncias de violación sexual a mujeres adultas, particularmente cuando el agresor es conocido por ellas.

Esto indica que las cifras correspondientes al delito más denunciado en el país, el de la violencia de pareja, es sólo la punta del iceberg de la verdadera magnitud de la violencia que sufren las mujeres y las niñas dominicanas. Primero, porque la mayoría de mujeres agredidas por sus parejas no denuncia el hecho; segundo, porque hay un gran subregistro de los casos de abuso sexual de menores, una categoría que, por ejemplo, ni siquiera incluye a las decenas de miles de niñas que conviven en relación marital con hombres adultos; tercero, porque las violaciones sexuales de mujeres adultas están tan normalizadas que apenas se denuncian, particularmente cuando el agresor es conocido, novio o marido de la víctima; y cuarto, porque hay categorías enteras de violencia que siguen estando mayormente invisibilizadas, como son el acoso callejero, el acoso cibernético, el acoso laboral (o en la escuela, la universidad, la parroquia o templo, el partido, etc.).

Y luego están las situaciones cotidianas que ni siquiera califican técnicamente como violencia pero que constituyen una forma de terrorismo psicológico que afecta profundamente la autoestima y la seguridad emocional de las mujeres, como por ejemplo cuando te montas en un ascensor con un hombre que se pasa el trayecto entero mirándote de arriba a abajo en forma lasciva, como si fueras un pedazo de carne. Reducirla a la condición de objeto sexual con la mirada es una de las tantas maneras en que los hombres afirman su dominio, su sentido de propiedad, sobre las mujeres, pero no es la única.

En el próximo artículo consideraremos algunos de los factores ideológicos, sociales y políticos que subyacen tanto la violencia de género como la indiferencia con que buena parte de la sociedad dominicana –y particularmente las autoridades encargadas de combatirla- asumen este fenómeno.

NOTAS

(1) “Procuraduría y MRDU realizarán campaña contra violencia de género”, El Nuevo Diario, 2 de abril 2014.  http://www.elnuevodiario.com.do/app/article.aspx?id=369483

(2) Las cifras que se presentan a continuación provienen de las siguientes fuentes: Página de estadísticas de violencia de género de la PGR http://estadisticas.pgr.gob.do/documentos/feminicidios/20160208-homicidios-mujeres-feminicidios-ocurridos-annos-2005-2015-ene-dic-2015.ashx; “República Dominicana registra 65 feminicidios en primer semestre”. Hoy, 21 de octubre 2016. http://hoy.com.do/republica-dominicana-registra-65-feminicidios-en-primer-semestre/; Wanda Méndez, “Víctimas elevan 500,000 denuncias por violencia”. Listín Diario, 24 de junio 2016, http://www.listindiario.com/la-republica/2016/06/24/424366/victimas-elevan-500000-denuncias-por-violencia