La voluntad se impone ante las limitaciones y los obstáculos, cuando se trata de servir y trabajar por la cultura. La gestión cultural conlleva entrega y sentimiento, lo que se convierte en patriotismo, cuando tú no tienes detrás varios empresarios o mecenas que estén dispuestos a financiar un evento motivados por amor al país desde el exterior, en este caso, desde la ciudad de  Orlando, Florida. Esta es una feria del libro hecha con sacrificios personales, por dominicanos y dominicanas que se han propuesto aportar a su nación, a nuestra nación, sin tener en cuenta las falencias o las precariedades materiales o financieras.

Es así es como esta vez aparece la VII Feria Internacional del Libro Dominico-Hispano, a celebrarse del 26 al 27 de julio del 2019, en el   Rosen Plaza Hotel, 9700 International Drive, Orlando, Florida 32819. Esta edición está dedicada a nuestro universal, lingüista, filósofo y trotamundos… don Pedro Henríquez Ureña y tiene como país invitado a Argentina, el corazón de las pampas…

A parte de su encuadre familiar e intimista, esta feria del libro, es un grato espacio cultural, donde tenemos la oportunidad de darnos un cálido abrazo latinoamericano y caribeño, mientras intercambiamos experiencias, metas y/o propuestas sobre la realidad cultural-literaria de nuestros pueblos. Aquí, hombres y mujeres se empoderan de una realidad tangible y sentible, donde el libro dominico-hispano es el protagonista en cada escena.

Allí tendremos la oportunidad de participar de esa experiencia, entre conferencias; coloquios; recitales poéticos; pintura; bailes; teatro; cine; danza y ritmos folclóricos, entre otras manifestaciones artísticas, donde fluye la dominicanidad y el fervor patriótico de quienes se han dispuesto a aportar al desarrollo de su país, a partir de acciones culturales.

Esa feria internacional del libro, se realiza cada año, y, con el esfuerzo de un equipo de dominicanos, coordinados por el Dr. HOMERO LUCIANO, se ha constituido en el evento cultural más importante que involucra a la comunidad dominicana residente en el estado sureño de la Florida. Esa feria del libro dominico-hispano es ya una huella imborrable en el panorama internacional, y, desde ella se procura promover no sólo la industria cultural dominicana, sino también el turismo en todas sus vertientes.

La Organización Latino Americana de Asistencia Social (OLAS),  entidad  que organiza esa feria del libro,  invita a poetas, narradores, pintores y cuenta-cuentos, tanto de la República Dominicana, como de toda América Latina. Entre al amigo poeta, Mateo Morrison. En esta ocasión, también estará como invitado de honor  el Dr. Cristian Gómez, presidente del Museo Internacional de la Biblia de México, entidad con la que los organizadores de la feria suscribieron un acuerdo para conmemorar los 450 años de la traducción al Castellano de la Biblia, realizada por Casiodoro de Reyna.

El gestor cultural dominicano, Homero Luciano, ha asumido esta feria, como la imagen más importante de la comunidad dominicana en Orlando. Esta Séptima Feria, en esta edición,  cuenta con el respaldo de la Fraternidad de Concilios y Entidades Evangélicas de la Florida (FRACEEV), dirigida por el obispo Luis Rincón.

El centro de acción de esa Feria Internacional del Libro Dominico-Hispano, está en el trabajo y las ideas del Dr. Homero Luciano, quien cuenta con el necesario soporte organizativo y operativo del ingeniero Pablo Colón y del Lic. Wagner Méndez, entre otros soportes de imprescindible valor, dentro del engranaje administrativo de ese evento cultural.

Entiendo que el Ministerio de Cultura, el Ministerio de Turismo y el Ministerio de Relaciones Exteriores, deben dejar sentir su  "mano amiga", en apoyo de uno de los eventos culturales que se hacen en el exterior, a fuerzas de tener ganas de aportar al desarrollo de nuestro pais. Es el momento preciso de decir presente en beneficio de nuestro país, sin politiquerías.

Con el apoyo de quienes creemos en la cultura, como soporte y empuje para el desarrollo de los pueblos, esta Séptima Feria Internacional del Libro Dominico-Hispano, en Orlando, Florida, será un éxito, para bien de nuestra nación, aunque hayan ojos que aún siguen siendo ciegos y oídos que aún están sordos. Adelante!!! Sigamos haciendo camino al andar…El presente cultural es luminosos…aunque en medio de estas tinieblas…y por ventura y amor, nos pertenece. Sigamos avanzando hacia donde florecen las nuevas primaveras.