Las cosas son como son, más de 30 años de continuismo político, donde la corrupción es la materia diaria de quien nos gobierna, que han hecho del dinero de todos los dominicanos sus propias alcancías, el autoritarismo del PLD se refleja en la impunidad, donde los organismos encargados de impartir justicia son cómplices de quien gobierna, protegen a delincuentes y malhechores, que de manera grosera gozan del dinero que nos roban a todos los dominicanos, ¡y a quién denuncia!, se le persigue y hasta se le mata ¡Si se les Mata! Como han sido ya numerosos casos de periodistas y el sonado homicidio del abogado Yuniol Martínez, que de manera casi mágica se han convertido en casos sin respuestas, solo por nombrar algunos.
La crisis político social que hoy envuelve a la Republica Dominicana nos lleva a hacer una reflexión real de qué estamos peleando y qué realmente podemos perder. Sé que muchos critican porque hablar de crisis les puede sonar exagerado o hasta increíble, pero nuestra historia contemporánea nos demuestra lo contrario, hay una batalla constante contra los autoritarismos democráticos y eso lo podemos ver en el mundo, siempre hay quienes defienden una parte u otra, pero lo cierto es que nuestro sistema está siendo cada vez más vulnerado por quienes se creen los dueños de todo.