Celebrando mis ochenticinco años (el miércoles próximo) y dedicado especialmente a doña Lucero Arboleda, la dinámica bibliotecaria de Intec, asombrado, en este tercer miércoles, no nos volvemos al pasado-presente, el 3 de este mes, el importante periódico español El País publicó un documental que no resistimos copiar a nuestros lectores, que pueden verlo directamente en (https://elviajero.elpais.com/elviajero/2018/07/31/album/1533036263_013678.html?por=mosaico#foto_gal_1) y respetando, naturalmente el derecho de la autora Ariadni Fotini Stellou, reproducimos como una forma de manifestar a nuestros lectores la forma cómo en algunos países civilizados del planeta se reverencia la cultura, representada principalmente en el libro o en la colección de textos, donde los manuscritos incunables tienen más valor que los editados. Aquí, que yo sepa no guardamos en nuestras bibliotecas principales textos manuscritos de nuestros autores. Esos viejos cuadernos y amarillentos folios no se consideraron nunca tan valiosos como para conservarlos. Hay por ahí, muestras dispersas, pero no hay entre nosotros el culto al libro. De modo que lo haremos en tres entregas, ya que tantas páginas abrumarían al lector promedio, que es al cual nos dirigimos principalmente.

Iniciamos con las primeras siete, luego seguiremos con otras siete y concluiremos con las seis finales en miércoles sucesivos.

20 bibliotecas ás impresionantes del mundo

  • 1Biblioteca George Peabody (Baltimore, Estados Unidos) “Catedral de libros”. Así describió el primer rector del Instituto Peabody, Nathaniel H. Morison, esta biblioteca construida en el siglo XIX en la ciudad de Baltimore (Maryland) por iniciativa del banquero, empresario, escritor y filántropo George Peabody, y que actualmente forma parte de la Universidad Johns Hopkins. Esta asidua a las listas de bibliotecas más bellas del mundo, con sus seis amplios pisos acabados en mármol blanco y su inmenso atrio de entrada, atrae no solo a estudiosos (sus 300.000 volúmenes forman un tesoro de libros antiguos) y amantes del estilo arquitectónico neo-griego, también a parejas de novios que la utilizan como salón de bodas.ALAMY
  • 2Biblioteca Central de Seattle (Washington, Estados Unidos) El proyecto del arquitecto holandés Rem Koolhaas (estudio OMA) había despertado tal expectación que, al año de su inauguración en 2004, la Biblioteca Central de Seattle (Washington) había recibido unos dos millones de visitas. A partir de 2005 comenzó a organizar visitas guiadas por sus cinco plataformas superpuestas y desplazadas, y su fachada de vidrio y acero (en la foto) cerrando un conjunto que redefine la biblioteca como un espacio que guarda, ordena y hace accesible al público no solo libros, sino cualquier tipo de información, da igual el medio en el que ésta venga encapsulada. spl.orgGETTY IMAGES
  • 3. Biblioteca Pública de Stuttgart (Alemania) Turistas y fotógrafos de todo el mundo se quedan maravillados por el continente, un impresionante edificio diseñado por el arquitecto coreano Eun Young Yi, con 11 plantas (dos de ellas subterráneas), fachada de hormigón, paneles que por la noche se iluminan de diferentes colores y lo asemejan a un enorme cubo de Rubik, e interiores de blanco riguroso. Otros suben a la terraza de la azotea a disfrutar de las vistas. Y otros más exploran el contenido, se meten en el estudio de sonido o se apuntan a la oferta de talleres y actividades que han convertido a la Biblioteca Pública de Sttutgart en epicentro cultural de la ciudad alemana. stuttgart.deGETTY IMAGES
  • 4. Biblioteca del Trinity College (Dublín, Irlanda) The Old Library, la vieja biblioteca del Trinity College, y su famoso libro de Kells (un manuscrito del siglo IX que recoge los cuatro evangelios con ornamentada caligrafía, y en latín) son parada obligada para quien visite Dublín. El edificio, construido en el siglo XVIII, tiene una sala principal, Long Room (Habitación Larga, en la imagen), donde reposan las obras más antiguas en recias estanterías que forran las paredes. En una vitrina se expone el arpa más antigua que se conserva en Irlanda, realizada en roble y sauce, con cuerdas de bronce. La biblioteca posee la mayor colección de manuscritos y libros impresos del país. tcd.ie/libraryGETTY IMAGES
  • 5. Biblioteca Nacional Marciana (Venecia, Italia) La práctica totalidad de los 40.000 visitantes que Venecia recibe cada día llegan a la plaza de San Marcos, pero, una vez allí, pocos se aventuran a entrar a la Biblioteca Nacional Marciana, una de las más antiguas de Italia, llamada también Sansoviana en honor a Jacopo Sansovino, arquitecto autor de su diseño. Globos terráqueos antiguos, manuscritos del siglo XV, 'tintorettos' y 'veroneses' en las paredes de un palacio renacentista que cumple el sueño del poeta Petrarca, que en 1362 donó sus libros a la República para engrosar una futura biblioteca pública abierta a estudiosos, eruditos y amantes de la literatura. marciana.venezia.sbn.itALAMY
  • 6.Biblioteca Pública de Nueva York (Estados Unidos) Dos leones de mármol, Paciencia y Fortaleza, bautizados así por Fiorello La Guardia, alcalde de Nueva York durante la Gran Depresión, dan la bienvenida al magnífico edificio neoclásico que alberga la Biblioteca Pública de la ciudad neoyorquina, inaugurada a comienzos del siglo XX en Manhattan, en la Quinta Avenida con la calle 42. Desde el impresionante Astor Hall, de mármol blanco, el visitante puede dirigirse a la Rose Main Reading Room (en la imagen), la sala de lectura principal, que ha aparecido mucho en el cine. Toda la biblioteca, en realidad, ha sido escenario de películas como 'Desayuno con diamantes', 'Cazafantasmas', 'El Día de Mañana', y series como 'Sexo en Nueva York'. Su catálogo incluye varios manuscritos de Shakespeare y una carta de Cristóbal Colón. nypl.orgGETTY IMAGES'
  • 7. Real Gabinete Portugués de Lectura, (Rio de Janeiro, Brasil) Quienes visitaron Río de Janeiro en 2016 con motivo de la celebración de los Juegos Olímpicos, no pudieron entrar en el Real Gabinete Portugués de Lectura, en pleno centro de la ciudad brasileña, porque estaba siendo restaurado. Abierto de nuevo, luce en todo el esplendor de su arquitectura neo-manuelina y sus interiores de madera profusamente tallada. Nació como biblioteca privada, de la mano de inmigrantes portugueses, en un edificio que concluyó en 1887 y se inspiró en el Monasterio de los Jerónimos de Lisboa. Su fastuoso Salón de Lectura (en la foto) recibe la luz natural a través de una enorme claraboya trabajada en hierro y vidrio pintado. realgabinete.com.br ALAMY