Desde el año 2008 vengo observando cómo una gran parte de los políticos y economistas de diferentes partes del mundo señalan y acusan a los llamados "especuladores" como los verdaderos culpables de los altos precios en los mercados internacionales sobre todo en lo referente al petróleo y más aún de las materias primas y los alimentos; sin embargo, entiendo que esas apreciaciones son incorrectas.
Qué es un especulador?
El especulador no es más que la persona que se dedica a invertir su capital asumiendo un grandes riesgos con el propósito de lograr beneficios en las fluctuaciones de precios que puedan surgir de acciones, materias primas, productos alimenticios, deudas y otros instrumentos comerciales y/o financieros. El mismo puede beneficiarse tanto de la compra cuando se registra alza como de la venta cuando lo que acontece es la baja en algunos de ellos. Es bueno señalar que toda forma de inversión es especulativa y que todos los seres humanos en el diario vivir tomamos decisiones que en ocasiones apuntan hacia un futuro eventualmente desconocido, evidenciando que en general todos actuamos de manera especulativa.
En pisos como el NYMEX (New York Mercantil Exchange), que es donde se negocian energía y metales en la ciudad de New York, o el CBOT (Chicago Board of Trade ), que es el espacio para comercializar granos y demás rubros agrícolas en la ciudad de Chicago, el papel del especulador se circunscribe exclusivamente a intentar predecir con algún acierto el precio real de un rubro agrícola, transacción comercial o financiera, a través de la anticipación de la tendencia de demanda y contribuyendo a los productores sobre las necesidades futuras de producción, lo que pone de manifiesto que sin la participación del especulador existirían mayores desajustes entre la oferta y demanda creando escasez y aumentos de precios, como se ha visto a través de la historia.
Décadas atrás un agricultor en los Estados Unidos cultivaba maíz, asumiendo el peligro de que a la hora de vender ese grano los precios cambiaran adversamente y en otros casos su cultivo era a veces mayor que la demanda que existía en el mercado, adquiriendo el productor agrícola en ambos casos cuantiosas pérdidas económicas. Es precisamente aquí donde entra el especulador en juego. Ël crea un contrato con el productor comprometiéndose a pagar por una cantidad determinada de maíz, entrega esta que se realizaría en una fecha específica que va desde meses hasta años por adelantado, que es lo se conoce como futuro, lo cual implica una especie de aventura por parte del especulador, lo que jamás sucedería con el productor. De esa manera este último conoce perfectamente cuáles serán sus ganancias con mucha antelación a cambio de lo que debe producir. El especulador por otro lado coloca ese contrato en el mercado con la esperanza de obtener beneficios, creando liquidez al mercado. Es por esto que cuando se dice que los especuladores llevaron el "oro negro" a $100 dólares, no es del todo cierto. En cualquier transacción en el mercado se requiere de una persona dispuesta a pagar un precio y otra dispuesta a vender a ese precio.
La gran mayoría de los economistas piensa que ninguna "mano" puede mover el mercado de manera considerable, sino que este debe moverse en base a una serie de leyes del mercado o de de la naturaleza misma. Sin embargo, lo cierto es que los llamados especuladores actúan como aceleradores de procesos, contribuyendo significativamente a ajustar los mercados de manera más rápida y eficiente. Un ejemplo sobre la función del especulador aconteció recientemente y fue el de la línea aérea South West, con la crisis de petróleo en el mercado en el 2008. Esa empresa fue la única aerolínea que pudo mantener los precios de los boletos aéreos de manera estable y ello no fue más que el resultado de la visión y habilidad que tuvieron de comprar contratos de petróleo en el 2004 a $51 dólares el barril hasta finales del 2009. Recordamos que el petróleo llegó a alcanzar niveles de cotización de $147 dólares el barril en el año 2008.
Ahora bien, lo que en realidad quiero decir es que no ha sido el especulador, como muchos creen, que ha llevado a encaramar el petróleo por encima de los $100 o a los artículos alimenticios a niveles tan altos como se encuentran en estos momentos. Me explico, todos los contratos, o la gran mayoría de los contratos en el mundo, se cotizan en dólares americanos; esta moneda ha sido devaluada, yo diría que adrede por el Banco Central Norteamericano (FED), con la reducción de la tasa de préstamos entre bancos a 0.25%, e inyectando más dinero a la economía, que más que falta de liquidez, lo que existe es clara ausencia de confianza de los diferentes sectores financieros y productivos a nivel global. Sucede que al valer menos la moneda norteamericana, esto se transfiere al precio de los diferentes productos. Si observamos la relación dólar- petróleo, o dólar- oro, es fácil entender que en los últimos 4 años han estado directamente relacionados.
Otro factor que a nivel mundial ha intervenido en el incremento de los precios han sido los subsidios, especialmente en países como China, que aplica políticas muy centralizadas. Recuerdo que el año pasado inmediatamente ese país asiático anunció la disminución del subsidio a la gasolina, el petróleo disminuyó en $4 dólares su precio. Creo que en vez de apuntar a los especuladores, detractándolos como si fueran demonios, se debe por el contrario reclamar que todos los países del mundo pongan fin a los famosos subsidios , en razón a que estos lo único que crean es una demanda artificial en el mercado mundial y tenemos que entender que no podemos hablar de globalización y apertura de mercados si se continúa con esa gran escalada de su subsidios.
Para concluir pondré el ejemplo de la cebolla. La cebolla en los Estados Unidos fue sacada de los pisos bursátiles a principios de los 60, y desde entonces ya no se puede "negociar". Esta medida se tomó en razón a que se argumentaba que los especuladores habían despreciado la cebolla a niveles inconcebibles. De manera irónica sucedió que desde octubre del 2006 a Abril del 2007 el petróleo aumentó en un 100%, y el maíz en un 300%, pero la cebolla sin la intervención del especulador aumentó en un 400%, de lo que se infiere que no es el especulador la oveja negra de ninguno de los precio que se registran y mucho menos de los alimentos como se ha pretendido injustamente establecer. Ojalá y eso se entienda.