La actual era postmoderna surgió de la quiebra de la modernidad y el lenguaje excluyente del pensamiento ilustrado.

Entre las características prevalentes de la postmodernidad se incluyen el individualismo, un alto nivel de consumo, la popularización del arte y la estética urbana, la inclusión del otro y de la otra, la solidaridad horizontal y el uso del lenguaje como catalizador de la historia.

La producción teatral y performativa de Josefina Báez y Ay Ombe International Theatre dan cuenta de los rasgos esenciales de la postmodernidad en Dominicanish, Comrade: Bliss Ain’t Playing, Levente No.

El lenguaje no lineal es la clave de la comunicación en el espacio migratorio y local de la era digital postmoderna.

La interpretación performativa resulta útil para mostrar las experiencias fácticas. El performance explica en un lenguaje asequible el desastre de un hospital público dirigido por una compañerita del partido que no tiene titulación médica ni es especialista en administración de la salud. De igual forma, el imaginario teatral puede explicar el grado oprobioso de ilegalidad con que el síndico desprovee de identificaciones a inmigrantes y vendedores ambulantes en los mercados públicos de la ciudad. La lectura performativa puede también reflejar el engatusamiento de los oradores evangelistas a una multitud ávida de aliento en una era en la que mucha gente no cree en los líderes mesiánicos ni en la cartelización de los partidos.

En su crítica a la era actual, algunos autores invocan elementos del pensamiento humanista, reclamando una sociedad más justa e igualitaria.

Así lo expresa la intérprete de Rap Deyanira García (Sargenta G) en sus Prosas del Ropero "Am a lesbiana dominicana, don’t understand porqué te asombras tanto mi pana, don’t be surprised la verdad eso es nada, is society that makes you think this is cosa rara, pero déjame que te cuente cause soy lesbiana desde my mother’s vientre…" (Divagaciones bajo la luna:  Voces e imágenes de lesbianas dominicanas).

El Robalagallina, la trans vestida de miss y la minina minusválida del carnaval constituyen un claro retrato de ese otro y esa otra que incluye y refleja la postmodernidad.