En este momento tenemos los números de tres encuestas serias que indican que Guillermo Moreno es una realidad y que su posición no se trata de algún error en la forma en que se hicieron las preguntas a los encuestados o a cualquier otro error técnico en las encuestas, por lo que la ciudadanía, y estoy seguro que todos los demás partidos, prestarán ahora mucho más atención al fenómeno en que se ha convertido este seguro candidato por Alianza País.

Primero fue la Gallup-Hoy, que midió en 23.8% la preferencia electoral de Guillermo Moreno en caso de que Danilo Medina no figure como candidato, que cae a un importante 10.5% cuando Danilo figura en la boleta. Fueron muchos los comentaristas y analistas que se rieron de estos resultados, señalando que era imposible que Guillermo alcanzara cifras dobles en las encuestas, pero entonces se publicaron los resultados de Penn Shoen and Berland para el Grupo SIN, que en ausencia de candidato reeleccionista le otorgaba a Guillermo un nada despreciable 11%, sin importar quién fuera el candidato del PRM.

Guillermo ha demostrado que es un trabajador incansable, que entiende que la política debe trabajarse en las bases, donde están cuantitativamente los votos que eligen presidentes

Finalmente, en esta semana se ha dado a conocer los resultados de la encuesta Greenberg Quinlan Rosner para Diario Libre, que coloca a Guillermo con un 15% sin Danilo, y con un 9% con Danilo.

Con los resultados de tres encuestas de esta categoría resulta claro para aquel que quiera ver que Guillermo Moreno está siendo tomado en cuenta por electorado, y que si se revisan las encuestas anteriores de estas mismas firmas, se trata de un fenómeno en ascenso, sin que en este momento esté claro cuál sería su techo.

¿Cuáles han sido los factores que han impulsado esta notable mejoría en las preferencias electorales de Guillermo Moreno?

Guillermo ha demostrado que es un trabajador incansable, que entiende que la política debe trabajarse en las bases, donde están cuantitativamente los votos que eligen presidentes, y por eso, según ha informado, tiene un largo tiempo trabajando sin mucho ruido en el terreno, en contactos personales, a través de una campaña que ha titulado “Un millón de amigos”. Pero este trabajo político no es suficiente para explicar el repunte que ha logrado en las encuestas.

En un artículo anterior señalaba que los dos grandes temas en esta campaña electoral que comenzó, como siempre, a destiempo, son el “peligro haitiano” y la “corrupción”. Leonel Fernández decidió abanderarse con el primer tema e ignorar el segundo, pero ocurre que la corrupción es un tema que ha venido captando la atención pública como nunca antes y así lo han medido las encuestas. Hace diez años la corrupción administrativa ni siquiera se mencionaba entre los temas que generaban preocupación de la ciudadanía, pero en estos momentos, ya está entre los seis primeros temas.

Por ejemplo, Gallup-Hoy de febrero de 2014 colocaba como los primeros temas de preocupación ciudadana la delincuencia, la inflación y el alto costo de la vida, el desempleo, y luego le siguen los apagones, la educación y la corrupción administrativa. En un tercer grupo se colocaba el problema de los haitianos ilegales.

La relevancia que ha tomado el tema de la corrupción administrativa puede ser una de las principales razones que haya impulsado el crecimiento electoral de Guillermo Moreno por cuanto se le conoce por su trayectoria como ex fiscal del Distrito Nacional, y su intento de investigar a Joaquin Balaguer por el caso Orlando Martínez más allá de las conveniencias políticas del entonces presidente Leonel Fernández, quien lo destituyó por esta razón.

Hace algo más de dos años Guillermo Moreno se concentró en el sometimiento a la justicia de Leonel Fernández y de su Fundación Global a través de un expediente que contenía prueba documental de temas que nunca fueron aclarados y que seguramente serán objeto de atención esta campaña electoral. Este expediente no generó consecuencias judiciales, pero sí políticas, pues desde entonces el tema de la corrupción persigue a Leonel Fernández, y favorece el posicionamiento electoral de Guillermo Moreno. En esa época algunos analistas criticaban a Guillermo Moreno indicando que así no crecería electoralmente.

Con Leonel Fernández como candidato no cabe duda de que el tema de la corrupción ocupará mucho espacio, con las denuncias de Quirino, el caso de Víctor Díaz Rúa, el caso de Félix Bautista (sin importar la decisión que adopte esta semana el magistrado Moscoso Segarra), con Funglode, el déficit fiscal del 2012, los Tucanos, y otros casos que hasta del propio litoral de Leonel alega que saldrán a la opinión pública en forma de rayo con fines políticos electorales. Ese es el escenario ideal para Guillermo Moreno.

Un tercer factor que ha favorecido a Guillermo Moreno ha sido la división del PRD y el panorama aún incierto de lo que sucederá entre Hipólito Mejía y Luis Abinader en el PRM. Greenberg identifica claramente cómo Guillermo capta votos de ese litoral de la oposición.

Tomando en cuenta la personalidad de Guillermo Moreno es muy difícil que la oposición pueda unificarse en la primera vuelta, y menos ahora luego del resultado de las encuestas, pero esa unificación podría lograrse para una segunda vuelta, sobre todo si es contra Leonel Fernández.

El fortalecimiento electoral de Guillermo Moreno es una buena noticia para el país, pues constituye una esperanza de alcanzar una oposición que juegue efectivamente su papel de contrapeso de aquellos que están en el poder (lo que no tenemos en este momento) y que amenace con desplazar a aquellos que no garanticen un mejor gobierno.

Sin embargo, Guillermo deberá trabajar todavía mucho más, esforzándose en que lo que se percibe como un proyecto político basado exclusivamente en su persona, sea transformado en un proyecto basado en planes concretos de gobierno apoyado por un conjunto de personas.

De todas formas sus números están ahí, en doble dígito, convirtiéndolo en la tercera fuerza política del país, por encima de los añejos PRSC y PRD, y solo superado por el momento por el PLD y el PRM.