La vida tiene dos caras, en todo. Usted piensa de una manera, y yo de otra. Vivo en un sitio, usted en otro. El término Individuo viene del latín indiviso, que no se puede dividir supuestamente uno en otro, porque el ser es inconfundible con su propia identidad; cada cual tiene una identidad que lo hace único, pero existe en el otro, su identidad. Aprendamos entonces a respetar,en tanto a reconocer, los valores del otro; muchas veces la mayoría se desdobla en sorda y raya en la estupidez, creyéndos que basta con ser mayoría y en esa virtud aplastar a los otros. Pero resulta que los otros pueden ser ustedes en el tiempo, no desprecie sus ideas, sus proyectos y sugerencias; compartamos las decisiones que pueden ser interesantes. Querer aplastar por causa de voluntad mayoritaria, suele encontrarse con la dictadura.
De alguna forma uno es una identidad cerrada, no desea jamás desintegrarse, y eso hace al humano egoísta, busca permanentemente afirmarse en su yo. No se, como el tema fue abordado por el padre del psicoanálisis, Sigmund Freud porque carezco de sus enseñanzas. Obviamente no soy psicólogo, sino filósofo y académico; pero reconozco la vitalidad y utilidad de todo conocimiento, no lo estoy descubriendo desde luego, dado a que por alguna razón poderosa la gente aprende diferentes oficios y profesiones: la sociedad lo necesita para su progreso, si es que hay progreso para todos, lo dudo.
A este propósito Edgar Morin construyo la tesis de la transdisciplinaridad o interdependencia de las ciencias, bajo el criterio de cada ciencia por sí misma, resuelve problemas particulares o focales, cayendo en un virtual reduccionismo que rechaza Morin; es un nuevo enfoque epistemologíco y de estrategia metodologíca que enfrenta la naturaleza de reducción en que se asientan las ciencias contemporáneas con sus tendencias a especialidades. Lo cierto es que debemos integrar lo global con lo local, lo específico con lo integral. Lo uno, con lo otro, de aquí lo individual, y su comprensión con lo social. Resultado de ese epistemologico problema que tienen las ciencias que afrontar, los pacientes en materia de salud, gastan un dineral en médicos y el que no puede sufre la nefasta consecuencia de empeorar su salud o en el peor de los casos, morir, pasando de consultorio a consultorio remitido de especialistas a sub-especialistas.
En nuestro Mundo la geografía se reparte en el mapa entre Este y Oeste; hubo un Occidente capitalista y un Este socialista que terminó desintegrándose y hoy los líderes se preocupan por sustituir el vacío social y político que dejó ese espacio geoestratégico. Existe además un Mundo dividido en Norte ( desarrollado) y un Sur ( subdesarrollado); una geografía cuenta con mucha pobreza económica y la otra con potente riqueza, lo cual es un misterio que no han podido explicar los economistas y expertos sociales desde los estudios del brasileiro Josué de Castro en años 70s, tiempo en que se puso de moda abordar el problema del hambre y sus consecuencias nefastas para las sociedades. Las fronteras son divisiones políticas, culturales y geográficas que se tornan muy complejas; el Mundo más que nunca con tecnología de punta y construcción de un ciberespacio, urge de la cooperación y del apoyo recíproco entre las Naciones. Somos dos caras de un mismo mundo, como el día y la noche se suceden.
Un pensador se le ocurrió afirmar: todo es según el cristal con que mire. Y en verdad que las cosas y lo fenómenos tienen múltiples facetas, dependiendo su descripción y descubrimiento en la explanación que un observador pueda hacer de lo observado; pues ello sugiere que todas las cosas presentan ángulos diversos, que han de captar los sujetos conscientes y actuantes en su interacción con los mismos. De suerte, que todo es según el cristal con que se mire, porque los sujetos asumen en su estado psíquico apreciaciones, intuiciones y descripciones de conformidad con su cultura, su contexto social, estudios y la propia naturaleza psíquica de su personalidad; formándose una imagen del mundo y su entorno única, discreta y diferenciada de otros sujetos. Cada cual interpreta al mismo objeto y sus manifestaciones de forma distinta, pero cada cual se alza supuestamente con la certeza del conocimiento de la cosa; al parecer nadie se esta engañando, está en lo cierto.