La juventud toma la palabra en la Cumbre del SICA

Los países del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) han decidido en el marco de la XXXIX Cumbre de Jefes de Estados con el tema “Seguridad y Desarrollo. (El potencial de una Cuenca)” escuchar las preocupaciones y propuestas de la juventud en materia de seguridad ciudadana y derechos humanos.

El escenario para  debatir y construir una perspectiva regional con los presidentes de: Honduras, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Nicaragua, Panamá, República Dominicana y El Primer ministro de Belice, será  también un espacio donde estarán presente los/as líderes comunitarios, la comunidad indígena y expertos que trabajan el tema de  seguridad ciudadana  los días 27 al 29 de junio de 2012 en Tegucigalpa, Honduras.

El Gobierno de la República de Honduras y Espacio de Vinculación A.C con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), La Organización de los Estados Americanos (OEA) y otras instituciones dieron apertura para que los/as jóvenes se postularan y a través de una exhaustiva evaluación de propuestas, perfil académico y proyectos seleccionaron a 150 jóvenes  para participar en la cumbre y representar a los países del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA).

Los/as jóvenes de la delegación dominicana tendremos la oportunidad de presentar las preocupaciones de nuestro país y las propuestas para contrarrestar los desafíos de la seguridad ciudadana y la pobreza, además de comprometernos para que durante 18 meses esas iniciativas puedan materializarse.

Las estadísticas y sobre todo la realidad social de nuestra región nos demuestran que el tema de seguridad ciudadana debe ser una prioridad para tener calidad de vida, fortalecer nuestra institucionalidad y garantizar nuestra estabilidad democrática.

El Programa de Las Naciones Unidas Para el Desarrollo (PNUD) establece que Latinoamérica es una de las regiones con la tasa de homicidio más alta entre jóvenes de 16 a 25 años de edad con un total de 36,4 homicidios por cada 100.00 mil habitantes.

Si nos desplazamos a Centroamérica de acuerdo al informe de Desarrollo Humano América Central 2009-2010  la tasa de homicidio es de 33 por cada 100.000 habitantes (4 veces más grande que el promedio mundial). Es decir, que en América Latina y el Caribe se produce el 31% del total de los homicidios a nivel mundial[1]

La República Dominicana no es la excepción, el informe anual de Amnistía Internacional fue contundente, destacando la vulneración de los derechos humanos y la arbitrariedad en la actuación de  la Policía Nacional durante el año 2011. Las muertes y la represión en Salcedo, y la “respuesta”  de las autoridades dominicanas evidencian la falta de voluntad para crear  políticas de seguridad exitosas y reformas integrales que lleguen a la población más pobre de nuestro país.

Ante ese escenario ¿Es posible qué nuestro país pueda disminuir la criminalidad y tener instituciones especializadas desde la perspectiva de los derechos humanos? Afortunadamente las buenas prácticas en otros países son una realidad.

Por ejemplo, tenemos a Medellín una ciudad que para el año 1991 era la capital mundial del homicidio, con una tasa de 381 asesinatos por 1000.00 mil habitantes, sin embargo, en la actualidad ha disminuido la tasa de homicidio a 80. Otro ejemplo, es Diadema, en Brasil,  que hace 10 años registraba 102 homicidios por 100.000 mil habitantes y en la actualidad ha disminuido con 8 homicidios por cada 100.000 mil personas.

Si queremos un ejemplo de instituciones policiales miremos a la Policía de Nicaragua que según diversos estudios con un modelo preventivo, proactivo y comunitario lograron implementar una  estrategia  de seguridad ciudadana  que ha sido elogiada por la comunidad internacional y validada en las comunidades Nicaragüenses.[2]

La clave para tener resultados cuantitativos-cualitativos exitosos, disminuir los feminicidios[3] y la violencia en sus distintas manifestaciones está en implementar una política de seguridad ciudadana enlazada  a  la educación,  prevención y a la realidad social de nuestros países, pero también  a  los tres elementos que de manera acertada destaca el Presidente del BID Luis Alberto Moreno: “La información, gestión integral y cooperación para el conocimiento.”

Otro aspecto esencial y una asignatura pendiente para contrarrestar la inseguridad ciudadana  es el factor corrupción y delincuencia organizada, así lo destaca  el Dr. Mauricio García Mejía, investigador del BID: “La inseguridad ciudadana está altamente vinculada con la corrupción, se retroalimentan. La corrupción es necesaria para que la delincuencia organizada pueda funcionar. La mayoría de los grupos delictivos  organizados deben el enorme éxito de sus empresas ilícitas a su capacidad para corromper a funcionarios públicos.”

Hay grandes expectativas con la participación de la juventud Centroamericana[4] y del Caribe, los/as líderes comunitarios, expertos en seguridad ciudadana y la disposición de los presidentes del SICA para escuchar  y comprometerse con las transformaciones que necesitamos.

La creatividad, iniciativas y la responsabilidad serán ingredientes indispensables para que las propuestas lleguen a las poblaciones más vulnerables y no se queden en discursos retóricos. La delegación dominicana[5] tiene el compromiso de representar a los dominicanos/as que desean de manera inminente un cambio en su política de seguridad ciudadana y en la lucha contra la pobreza, vamos con la convicción de escuchar, compartir experiencias y participar de manera proactiva, sin olvidar  las palabras del   Dr. Nicolás Espejo: “Para problemas complejos no existen respuestas rápidas, ni recetas mágicas y quienes dan recetas mágicas es porque no tienen la respuesta técnica”

[1] Indicadores proporcionados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)  y el Global Study On Homicide (Trends/ Contexts/Data) 2011. United Nations Office On Drugs and Crime http://bit.ly/pjeWvQ