Amables personas que me leen, me estoy recuperando de una cirugía, estas dos semanas mi hijo Dorian asume la columna. Que orgullosa me siento.

Por Dorian C. Tatem

En el ecosistema mediático dominicano desde siempre ha habido temas de los que su carácter controvertido es axiomático. El tema de la representación de Haití y lo haitiano en los medios de comunicación dominicanos es algo que desde mis estudios de Comunicación Social en la PUCMM me ha causado inquietud y curiosidad. Siempre he querido descubrir si mi intuición, de la que ya hablaré más adelante, tiene base empírica o si simplemente es fruto de mis abstracciones y pareceres ideológicos acerca de cómo funcionan los medios en general, y de cómo funcionan los medios en la República Dominicana en específico. Es decir, en palabras llanas, quería saber si mi creencia de que en el país incurrimos como sociedad en un culturismo dañino hacia lo haitiano se traduce a su representación en los medios.

Para descubrirlo me di la tarea de explorar el tema desde una perspectiva metodológica que me otorgara suficiente base científica para poder aseverar cualquier conclusión a la que llegase, de un lado u otro. Aquí me detengo, entonces, para aclarar que como producto de un acercamiento científico (o, al menos, lo más científico posible dentro del campo del análisis discursivo y de la sociología, que se presta a interpretación siempre, pero ese ya es otro tema…) tenía que estar dispuesto a aceptar cualquier resultado que se me presentara. Es decir, si los resultados que encontrase llegaran a ser distintos a los que esperaba encontrar, dígase, que no hay una representación negativa de lo haitiano en los periódicos dominicanos, también me tocaba asumirlo y, por qué no, hacer lo posible por publicarlo. Digo todo esto porque quiero que quede claro que las motivaciones de este análisis, que ya detallaré y anotaré que es un trabajo previo a un trabajo más exhaustivo y cuantitativo, no eran afectar el nombre de ningún medio o publicación en específico, sino saciar mi curiosidad científica y descubrir si existe, de hecho, alguna tendencia ideológica en las publicaciones.

Es por eso que decido empezar explicando la hipótesis desde la que partí, luego hago un breve repaso de las limitaciones del estudio inicial y expongo algunos de los resultados y conclusiones. El análisis completo se encuentra disponible para cualquiera que quisiese leer y revisarlo e incluso comentarlo, pues de eso se trata el proceso científico.

El análisis, como ya dije, parte de mi hipótesis inicial que plantea que en los periódicos de principal difusión de la República Dominicana se presenta una imagen negativa de Haití y lo haitiano, a través de elecciones lexicales que tienen una carga semántica negativa según sus definiciones contenidas en el diccionario de la RAE. De ahí partí para construir mi pregunta de investigación principal: ¿Hacen uso los periódicos dominicanos de principal difusión de elecciones lexicales de carga semántica negativa para crear una imagen negativa de Haití?

Veamos, por un momento, las limitaciones que afectaron directamente a la realización. Primero, por cuestiones de tiempo y distancia (al momento de elaboración el autor se encuentra fuera del país) el análisis se limitó a ver las versiones digitales de periódicos impresos en la República Dominicana. La siguiente limitación tiene que ver directamente con el trabajo metodológico, pues al ser un análisis previo a un trabajo mas exhaustivo, es decir, una “prueba ensayo” para determinar la viabilidad de la metodología de análisis creada por el autor, se eligieron tres periódicos impresos de gran circulación en el país (Diario Libre, Listín Diario y El Caribe) y se analizó un hecho noticioso reportado en los tres medios. Es decir, es un trabajo, hasta el momento, puramente cualitativo y que impide al autor a generalizar las conclusiones a las que se llegó a todo el ecosistema mediático, eso se espera lograr en futuros estudios que incluyan aspectos cuantitativos de investigación.

Dicho todo esto, veamos de qué consistió el análisis:

Partiendo de un modelo de análisis híbrido de las características de los análisis descriptivos y los verificativos adaptado por el autor a partir de las aportaciones presentes en el campo del análisis crítico del discurso, se observaron las unidades lingüístico-proposicionales y las unidades formales del análisis semiológico. Traducido al español, se vieron las estructuras presentes en las noticias, como la construcción de las oraciones y proposiciones, así como los titulares y decisiones léxicas y sintácticas.

La noticia analizada trataba sobre un patanista que había sido herido en territorio haitiano durante una protesta y que había sido tratado en un hospital en ese país y se encontraba ya estable. Lo primero observado y desglosado a detalle fueron los titulares, donde de inmediato resaltaba una elección lexical curiosa: la utilización de la palabra turba para referirse al grupo de protestantes haitianos.

Digo elección curiosa porque, como ya explico en el trabajo, si nos fijamos en la definición del término turba contenida en el diccionario de la RAE nos damos cuenta de su significación negativa porque habla de una “muchedumbre de gente confusa y desordenada.” Es desde entonces que podría caerse en la trampa de asumir que, de hecho, existe una tendencia a representar lo haitiano como negativo, pero recordamos en este punto que no estamos listos aún para hacer aseveraciones generalizadas por las limitaciones ya mencionadas.

Observamos, también, en la construcción de los titulares a quién se le daba protagonismo y cómo se referenciaba a ambos países (RD y Haití) de manera distinta. Por ejemplo, se habla del “país” cuando se habla de República Dominicana, pero cuando se trata de Haití se le referencia por nombre. Esto, a primera vista, podría no suponer nada en especial, pero visto en contexto y desde esta perspectiva analítica, se presta a la interpretación de que, en los periódicos analizados, se ve a República Dominicana como un país legítimo y a Haití no. Son cuestiones que, sin duda, vale la pena traer a la luz y discutir.

Luego de observar, desglosar y analizar el cuerpo de las noticias, llego a las conclusiones del análisis hasta el momento. Lo primero es que, cuando se hace este desglose de los titulares y contenidos, se evidencia un patrón presente en varios grados de incidencia. Se podría, entonces, asociar ese patrón a la idea de la “circulación circular de la información”, donde las imágenes que se transmiten sobre un grupo o comunidad determinada se perpetúan a través de la validación que crea esa misma transmisión. Vale la pena repetir, sin embargo, que estos resultados aún no les podemos otorgar el carácter universal que sospechamos que poseen porque, desde el punto de vista estadístico, no hay resultados robustos. Ese es el próximo paso.

Todo esto lo explico con mas detalle en la propia investigación que, de nuevo, les invito a leer y comentar y discutir. Pueden encontrar la publicación en el siguiente enlace: https://www.researchgate.net/publication/330452405_La_imagen_haitiana_en_la_prensa_dominicana