A partir de las primeras tesis sobre la semiótica de la cultura adelantadas por I. M. Lotman en la década de los 60, empezó a tomar cuerpo una nueva investigación semiótica de los sistemas de signos verbales integrados, pero además, de los sistemas artísticos, textuales y comunicativos pertenecientes a culturas poco conocidas en el occidente moderno.

El estudio de los textos culturales, de los espacios de civilización y de los textos artísticos, supuso para Lotman y sus seguidores un trabajo teórico y metodológico situado en el contexto de la producción de sentido y de nuevas actitudes interdisciplinarias, metadisciplinarias, críticas y comparativas. Esto quiere decir que a partir de la determinación y lectura semiótica de la cultura se investigaron los espacios imaginarios y sensibles de la creación. Analizar sentidos artísticos y culturales en base a modelos de interacción textual, implicó también una visión integradora, siendo así que los llamados ejes de conformación del arte y la cultura se han convertido en puntos de partida para las acciones de significación artística y  cultural.

Los valores que adquieren los signos y los textos artísticos especiales, tienen su fuerza social y significante en el contexto del desarrollo cultural, de tal manera que el estudioso del arte y la cultura entiende las semiosferas como conjuntos cualitativos de comunicación, significación y producción. Todo lo cual indica un desarrollo de esferas particulares y una inversión o investición de sentido justificada en paradigmas de apoyo interdisciplinarios y transdisciplinarios (véase, Iuri M. Lotman: Semiosferas 1, 2 y 3; 1996, 1998 y 2000).

La interacción de textos artísticos y culturales se funda en el conocimiento de mecanismos sensibles, perceptivos, comunicativos, significantes y productivos, habida cuenta del conocimiento y la formación de discursos y lenguajes que pertenecen a cada semiosfera en particular. A partir de semiosferas como la arquitectura, la pintura, la iconicidad, el espacio, el teatro, el cine, la ópera, la escultura y otras, se van creando posibilidades, mecanismos y fórmulas de interpretación, comprensión y justificación del sentido artístico y cultural.

Todo lo que se ha entendido como práctica significante, posibilita los niveles de instrucción, posición, transformación y cualificación de las junturas significativas. ¿De qué manera la semiótica de la cultura y la semiótica del arte se particulariza en aprestos especiales de significación?

Las investigaciones que en el plano de la teoría del arte, la teoría de oralidad, la teoría del relato mítico, la teoría del ritual y la teoría del lenguaje, conforman niveles de reconocimiento, formas sistemáticas y críticas específicas entendidas como espacios de trabajo, espacios de intercomunicación, intersignificación e interproducción. Estas esferas que podríamos llamar también junturas especiales de conocimiento y transformación, extienden su dominio y conocimiento al cuerpo de las sociedades históricas y transhistóricas.

En este sentido, la semiótica fundamentada y practicada por Iuri M. Lotman, hace posible en su desarrollo, un marco de trabajo motivado por acciones intraculturales y metaculturales construidas además por explicaciones particularizadas y por esferas semioculturales.

Así las cosas, el estudio de las culturas y de las estructuras de los textos artísticos y culturales ha sido objeto de una lectura y un marco interdisciplinario y transdisciplinario. Desde que la famosa Escuela de Tartu (Estonia) y su animador, el semiotista y filólogo Iuri M. Lotman asumieron el estudio de los sistemas significantes, se inició una investigación cultural, científica y artística basada en áreas especiales de trabajo, la visión del análisis  logró hacer comprender y orientar,  mediante el conocimiento sectorial, las regiones de significación cultural y artística que nos han mostrado las imágenes y las palabras hasta el presente.

Si la cultura se ha constituido por formas, niveles, estratos, acciones  comunicadoras, acciones de significación y acciones de producción, cabe entender entonces que la misma se convierte en objeto de estudio e investigación. En su obra La estructura del texto artístico (1980), el semiotista ruso explica dos tipos de transcodificación. La primera es la transcodificación interna del texto y la segunda la transcodificación externa del texto. Ambas instituyen el sistema de organización formal de las obras de arte y las creaciones culturales.

Desde esa perspectiva la semiótica del arte y la cultura reasume lo que la Antropología Cultural, la Mitología de los pueblos primitivos y los sistemas de simbolización artística han logrado imponer como meta de estudio en la tradición y la traducción cultural y artística.

Se hace necesario destacar que el conjunto de producciones y productividades artísticas conduce, en el caso de la investigación semiótica, al entendimiento y trabajo en torno a las tipologías culturales y artísticas. El apoyo que desde los procesos de significación logra instruir el sujeto dentro de los diversos marcos de producción artístico-cultural, remite a una visión procesualista y abierta del producto y la productividad estética.

Es por eso que, a partir de la investigación planteada por Lotman, los diversos sistemas significantes llamados “secundarios” se justifican a partir de metalenguajes especiales y formas explicativas que conducen a consolidar y generalizar experiencias de trabajo artístico-cultural. El aporte de Lotman se puede percibir mediante el estudio de los siguientes aspectos del desarrollo artístico y cultural:

  • Mediación material
  • Mediación formal
  • Estructuración de códigos
  • Metacodificaciones artísticas
  • Metacodificaciones culturales
  • Lenguajes simbólicos
  • Modelos internos de significación
  • Modelos externos de significación
  • Tipología general de la cultura
  • Tipología general del arte
  • Reconocimiento y estudio de sistemas artísticos
  • Reconocimiento y estudio de sistemas culturales
  • Fiestas culturales
  • Estilización de  signos y textos expresivos
  • Análisis y formas de hacer el arte
  • Formas de hacer la cultura
  • Sujetos artísticos de la producción
  • Sujetos culturales de la producción
  • Mundo cultural abierto
  • Mundo cultural cerrado

Estos aspectos y puntos de apoyo de una Semiótica de la cultura y del arte, favorecen no solamente una investigación tipológica de los signos, textos e imágenes, sino, además, un estudio crítico de la significación artística de los procesos de creación y orientación en contextos de productividad.