Los resultados expuestos por la encuesta de esta semana de Gallup-HOY sobre la discriminación nos muestran como el gran porcentaje de la población dominicana es mas cerrada, con menos capacidad de tolerar a las personas que no caben dentro del margen concebido y estereotipos aceptados por la sociedad.
Según la Declaración de los Derechos Humanos, en la comunidad internacional “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos”, sin importar sexo, raza, color, ideología, etc. Esto es justo lo que nosotros, los dominicanos, no estamos aceptando.
A través de esta encuesta, se ha demostrado como los civiles del país giran mas hacia un entorno conservador en cuanto a sus maneras de pensar. Pero por mas conservadores que sean, NO se puede tratar inferiormente a los demás. Todos somos IGUALES, y no es justo que por ser “diferentes” la tolerancia hacia ellos sea afectada como tal.
Con una posición radical, es increíble como la mayoría de los dominicanos rechazan a cualquier persona con preferencias sexuales diferentes (73.4%), los haitianos (66.0%), los mendigos (45.7%) y a las mujeres (42.05).
En un país donde el índice de pobreza sobrepasa el 35% (Informe Objetivo del Milenio 2009), rechazar o perjuiciar a otro por su condición económica es un absurdo. Que culpa tiene un niño de nacer en condiciones vulnerables? La pobreza en la mayoría es adquirida o heredada, y en sistemas socio-económicos como el nuestro salir de la pobreza es casi un milagro.
Nuestro país, con una economía altamente dependiente de la mano de obra haitiana, debe de desarrollar una capacidad de tolerancia para este grupo étnico. Los haitianos conviven con nosotros libremente desde hace años y la mayoría se ven en la necesidad por hambre para migrar a nuestro país. Es como los dominicanos que migramos a los Estados Unidos en busca del “Sueño Americano”.
En el largometraje “Un día sin Mexicanos” de Sergio Arau presenta la misteriosa desaparición de los latinos del estado de California, mostrando de una manera jocosa pero llamando la reflexión de que pasaría con la economía de dicho estado si no se contase con la mano de obra de ese grupo étnico. Seria interesante que algún productor local hiciera un análisis profundo de nuestra dependencia a los haitianos.
El prejuicio tiene que ver con actitudes y creencias preconcebidas sobre un grupo social en particular. La discriminación es un acto que pone a desventaja a miembros de ese grupo. Esta encuesta refleja discriminación, prejuicio o ambos?
No importa cual sea la respuesta, hay que empezar a trabajar con las nuevas generaciones sobre los defectos dañinos de la discriminación y el perjuicio en la sociedad. Enseñarles sobre la solución de problemas que permitan erradicar y reducir las percepciones negativas existentes, pues en la diversidad es que esta la verdadera riqueza cultural de un país. Mientras tengamos pobreza, discriminación y exclusión social, no podremos avanzar hacia un desarrollo como nación.
“Nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel, o su origen, o su religión. La gente tiene que aprender a odiar, y si ellos pueden aprender a odiar, también se les puede ensenar a amar, el amor llega mas naturalmente al corazón humano que su contrario.” –Nelson Mandela.