El 25 de mayo del 2015 el expresidente Leonel Fernández pronunció un discurso refiriéndose a la Reforma Constitucional y la Reelección Presidencial y, advirtió de los riesgos señalando que eso sería sumamente peligroso, nefasto, catastrófico y dejaría abierta la posibilidad para que en la posteridad un aventurero pueda modificar la Constitución, pero esta vez, para permitir la reelección de forma indefinida y así postergarse en el poder.
A pesar de las advertencias del expresidente Leonel Fernández, sus propios compañeros de partido lograron imponer un cambio constitucional del 2015 y con este, Danilo Medina consiguió la reelección presidencial; sin embargo, el pueblo dominicano escuchó y meditó sobre estas advertencias.
Llegado el año 2019, las advertencias del expresidente Fernández se hicieron más evidentes y el danilismo comienza a organizar la Subasta Legislativa que acostumbran y que les permitió hacer la Reforma Constitucional del 2015, pero esta vez el principal líder de los dominicanos, gústele a quien le guste y duélale a quien le duela, el expresidente Leonel Fernández, que tiene un claro sentido histórico, ante la inacción de todos los candidatos de oposición y de las evidentes intenciones de Danilo Medina perpetuase en el poder, advertidas por su hermana, Leonel Fernández decide hacerle saber a los dominicanos que aun tenían la oportunidad de impedirlo.
El Dr. Fernández se dispuso a accionar en contra de la ceguera de la oposición, de los medios de comunicación, de los legisladores, de los viejos, los adultos y la de los jóvenes; promovió una alianza entre los legisladores del PLD que habían entendido sus advertencias y los de la oposición, que también él había logrado que entendieran, para con todos ellos impedir la mayoría absoluta necesaria para aprobar la Reforma. Así las cosas y no obstante las escaramuzas del gobierno y de algunos legisladores por comprar la conciencia de los llamados Legisladores de la Patria, que, con un sentido histórico despertado por Fernández resistieron todas las tentaciones.
Sin embargo, esta no fue la única acción que tuvo que promover y ejecutar, pues gracias a su accionar, sus discursos, sus entrevistas y sus señalamientos, se comenzó a despertar la población, haciendo marchas y manifestaciones frente al Congreso en repudio a la Reforma Constitucional. Además, comenzaron a hacer encendidos de velas en todo el territorio nacional, hasta que fue indispensable la participación del propio Leonel Fernández en una multitudinaria manifestación frente al Congreso de la República, que luego fue refrendada por el principal candidato de oposición.
Con esto se logró impedir la reforma, pero no el intento de Danilo Medina de perpetuase en el poder, pues de inmediato se puso en marcha el plan B, de unas preprimarias en las que se escogió al más servil del danilismo, imponiéndolo con el uso y abuso de los recursos del Estado, denunciados por una de las bocinas del danilismo y posteriormente evidenciado y sustentado con pruebas, por un programa de investigación y por un video donde el candidato lo reconoce; dejando sin oportunidades, a los demás aspirantes.
Llegadas las primarias todos sabemos lo acontecido, pero las denuncias de fraude, los señalamientos, reclamos, etc., etc., etc., de Fernández, que continuaron evidenciando el riesgo que corría la patria, provocaron que cada vez más a sectores de la sociedad, se les despejara la ceguera, el rezago y comenzaran a despertar.
Pero no fue hasta el fallido fraude electoral y la suspensión de las Elecciones Municipales, del pasado 16 de febrero, cuando el país comprendió que todo lo que el Dr. Leonel Fernández Reyna había estado señalando, prediciendo y tratando de evitar, era absolutamente correcto y que se hacía indispensable manifestarse exigiendo el respeto y la preservación de la Democracia.
La lucha titánica que ha venido sosteniendo el Expresidente Leonel Fernández, ha sido decisiva para impedir a tiempo que se vulnere el orden democrático y haber logrado despertar a todas las fuerzas vivas de la Nación, pues “La peor forma de perder una oportunidad es no saber que la teníamos” y mas temprano que tarde los Jóvenes Vestidos de Negro y la población en general que se manifiestan en la Plaza de la Bandera, con los cacerolazos y de otras tantas formas, tendrán que reconocérselo.