Hace menos de un año, quedó establecido formalmente un nuevo bloque de integración en América Latina, que por sus características y tendencias ideológicas parece una alternativa a la “Alianza Bolivariana para América (ALBA)”, me refiero a la “Alianza del Pacífico”.
Fundado el 6 de junio de 2012, como bloque comercial, se propone enfocarse en exportaciones y comercio exterior. Sus miembros son: Chile, Colombia, Perú y México. Estos cuatro países, además de ser latinoamericanos, tienen en común, el contacto con el Océano Pacífico, lo que los hace parte de la región del planeta de mayor crecimiento y de mayores perspectivas presentes y futuras: Asia-Pacífico. Pero además y es quizás lo más importante, la razón por la cual Alan García, en su momento como Presidente de Perú, sugiere su creación, es que los une a China.
Desde el 28 de abril del 2011 cuando se produjo la “Declaración de Lima”, con la que se propone formalmente la Alianza Pacífico, hasta la reunión el pasado año 2012 en Santiago de Chile, en torno a la Cumbre CELAC-Unión Europea, se habían llevado a cabo VI Cumbres presidenciales.
Hace unos días, el pasado jueves 23 de este mes, concluyó la VII Cumbre en Cali, Colombia. Dentro de las conclusiones, además de que Colombia asume la presidencia del organismo y que Costa Rica se integra como un miembro de pleno derecho, para sumar 5, quedó claramente reiterado en interés de fortalecer los lazos con Asia-Pacífico y agrego yo, que por lo que significa en la economía mundial, de manera especial, con China.
Aunque, el objetivo de la Alianza del Pacífico, en principio, es integración y desregulación entre ellos, estoy seguro que llegará el momento que como bloque puedan negociar con China en mayor igualdad de condiciones. Además cuando se integren, Panamá, otros países de Centroamérica y quizás Ecuador, (lo que por el momento dudo, aunque apruebo y promuevo), lo que sería toda la franja “Pacífico” de Latinoamérica, la relación será más equitativa y beneficiosa para todos.
El comercio Sur-Sur aumentó de 6% en 1985 al 24% en 2010, en este 2013 ronda el 30%, la tendencia es que supere el comercio Norte-Norte en 2017. La mayor responsabilidad de ello es de China.
Ahora que China se ha planteado reorientar su modelo económico del ahorro al consumo, porque tiene el menor consumo privado con respecto a su PIB del mundo, por lo que está compelido a estimular la demanda interna, lo que ha sido formalizado en su “XII Plan Quinquenal de Desarrollo 2011-16”, existe una gran oportunidad para que aumente el porcentaje del comercio Sur-Sur con los países de América Latina ofertando lo que el mercado chino, está demandando y seguirá demandando con creces.
La Alianza del Pacífico tiene aquí una gran oportunidad de suplir esa demanda, no sólo con materias primas, sino también con productos terminados, procesados en la región.
China tiene las mayores reservas en dólares del mundo y está buscando donde invertir y colocar ese ahorro, esta es también una oportunidad para los países de la Alianza del Pacífico.