La agroindustria y el acaparamiento de los recursos genéticos, una amenaza para la soberanía alimentaria

El mundo campesino se deshace por las fuertes presiones de las multinacionales de la agroindustria, en especial aquellas que colonizan los mercados de los alimentos para acaparar las semillas, los genes de plantas y animales que presuntamente permitirán crear especies mejoradas, aumentarán la productividad, renovarán los suelos y protegerán el medio ambiente. Todo esto para poder controlar la Soberanía Alimentaria  e impulsar los organismos genéticamente modificados.

El Estado Dominicano con sus organismos especializados en el manejo de los recursos naturales (Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales) y de los alimentos (Ministerio de Agricultura) favorece políticas públicas que han impactado muy fuerte y de manera negativa a los campesinos y campesinas dominicana.

El despojó ha sido histórico, y parte de un continuo. En la actualidad son acaparadas las tierras de Bahía de Las Águilas y las del Consejo Estatal del Azúcar y ayer fueron las comuneras

Se crearon herramientas jurídicas, concertados acuerdos, emitidos decretos y leyes para despojar a los pequeños y medianos campesinos de la producción de alimento y de la tierra. El despojó ha sido histórico, y parte de un continuo. En la actualidad son acaparadas las tierras de Bahía de Las Águilas y las del Consejo Estatal del Azúcar y ayer fueron las comuneras.

El campo es un espacio de fuerte tensiones y empobrecimiento desmedido. Esto creó severos desequilibrios en la forma de vida campesina, despojándoles de sus capacidades para darle continuidad a su cultura. Históricamente se han especializado en manejar la diversidad genética de especies locales. Pero también se les ha relevado, ya que los instrumentos de la colonialidad neoliberal privatizan, roban y los excluyen. Todo esto se ha producido en el marco de estrategias  modernizantes de la economía campesina.

Los productores y productoras del campo no tienen garantía para la producción de alimentos. El gobierno de Danilo Medina, no puede pretender que unas cuantas corporaciones e industrias agroalimentarias monopolicen la producción de alimentos y controlen las semillas y los recursos genéticos del país. Los campesinos y campesinas exigen participación activa en las decisiones que tienen que ver con la producción de alimentos.

Hace aproximadamente cincuenta años que los agricultores y agricultoras fueron engañados haciéndoles creer que sus semillas y estilos de cultivos eran pocos productivos y que el avance vendría con asumir variedades de alto rendimiento, asumir tecnologías importadas, las cuales estaban comprometida con el gran capital y los monopolios de la industria alimentaria. La historia demuestra que fueron arrojados del campo, se erosionaron más los suelos con el monocultivo, se envenenaron los ríos y se perdió la seguridad y Soberanía Alimentaria. El medio ambiente se afecto y se comprometió nuestra biodiversidad genética.

Las comunidades rurales y con ellos los productores y productoras de alimentos con sus sistemas agroecológicos, siempre han podido manejar la biodiversidad y producir alimentos seguros y de calidad. A pesar que el neoliberalismo aseguró a los gobiernos que la agroindustria resolvería el problema alimentario y con ello la seguridad alimentaria.

El engaño continua, mientras los recursos genéticos y la biodiversidad desaparecen. No obstante, el hambre, el deterioro ambiental se acrecientan. Hoy la FAO dice que se amenaza el patrimonio genético mundial y que preservarlo es crucial para la supervivencia de la humanidad. Los graves problemas del campo, pobreza, hambre y crisis climática no serán resueltos por las grandes corporaciones de la alimentación. En las manos de los campesinos y campesinas dominicanas está dicha preservación.

En República Dominicana los productores y productoras de alimentos están en capacidad de conservar y aprovechar el patrimonio genético y garantizar la Soberanía Alimentaria. Hoy se comprometen en una apuesta por la biodiversidad y en implementar sistemas alternativos basados en la recuperación de los suelos, las sostenibilidad ambiental y la Soberanía Alimentaria.

La apuesta de La Articulación Nacional Campesina expresa en el Día Internacional de lucha Campesina es actuar para frenar la crisis climática, el control monopolista de las corporaciones de la alimentación y apostar por estrategias de mitigación, conservación y gestión de los recursos y bienes colectivos que permitan asegurar la alimentación de los dominicanos.