A julio del 2019, los Fondos de Pensiones tenían RD$596.7 mil millones invertidos en valores emitidos por el gobierno, entidades públicas, intermediarios financieros, empresas privadas, fondos de inversión, fideicomisos y organismos multilaterales.
A las Administradoras de Fondos de Pensiones corresponde el 82% de ese monto. AFP Popular es la que tiene el mayor porcentaje de estas inversiones con 35%. Crecer y Siembre tienen participaciones similares (23 % y 22%), seguidas por Reservas con 18%. Estos cuatro participantes tienen casi la totalidad de las inversiones que tienen la responsabilidad de invertir los fondos de las cuentas de capitalización individual para el retiro.
En los inicios del nuevo sistema previsional no se contemplaba una participación tan grande de los emisores ligados al sector público. Los títulos de la autoridad monetaria se pensaban serían aves de paso, presencia de coyuntura para resolver tema puntual con la tasa de cambio o un disturbio pasajero inflacionario. Con los del gobierno lo consuetudinario era pagar con bonos los atrasos a proveedores con expedientes que se quedaron en trámite de pago o engavetados, como los caballos que en carrera no salen de la gatera.
La perspectiva era de un trabajo arduo buscando rentabilidad en proyectos privados que exigirían debidas diligencias agotadoras, a diferencia de pares en otras latitudes de emisores públicos con alta seguridad de retorno. Es por eso que la comisión complementaria sobre la rentabilidad marginal sobre la tasa de referencia debió bautizarse como “Retorno del Almirante”, por ser consistente con los premios por travesía cruzando océanos de incertidumbres.
La coyuntura, sin embargo, se hizo costumbre en el emisor estrella con monopolio de la impresión de papel moneda y comenzaron a mejorar índices, calificaciones y experiencia de pagos puntuales que volvieron a poner Hacienda en el radar de bancos de inversión. Navegar a tierras desconocidas se convirtió en viaje en Catamarán a la Saona, pero la recompensa por mejorar retornos se quedó igual. Las quejas para acomodarla a la nueva realidad, donde en emisores públicos tienen colocado el 80% de los fondos de los cotizantes, finalmente han provocado una iniciativa legislativa que busca hacer cambios. Esa propuesta la analizaremos en otro comentario.