El Maestro Eugenio María de Hostos, es bueno saberlo, fue el reformador de la educación en Santo Domingo, Chile y Puerto Rico, que hubo de impactar al resto de Naciones de América Latina con la formación de las primeras maestras y maestros normalistas en 1884, entre los cuales se cuentan la poetisa Salomé Henríquez Ureña, Luisa Ozema Pellerano y Félix Evaristo Mejía.
El Maestro Hostos implantó la educación científica y laica en el país, lo que le valió la acusación infundada de ateo. Era un hombre espiritualizado y de bien, que a los pies de Enmanuel Kant construye una Moral Social, bajo los principios del deber, el derecho la justicia y la ciencia, conceptos que supedita a lo Moral, porque todo conocimiento ha de servir invariablemente al comportamiento ético de los hombres. Por lo que sus biógrafos califican al antillano de representar una "unidad entre pensamiento y vida".
En la obra de Camila Henríquez Ureña se lee que viendo Hostos su Puerto Rico esclavo y el dilema
de amor que sentía por la "Madre Patria", que la colonizaba, pero inspirado por la Federación Norteamérica; puesto que estuvo en Nueva York; esos proyectos políticos, sumados al de la Gran Colombia de Bolívar, tuvieron una indudable influencia en su filosofía política y educativa, en su mundo de ideas, y encontraron ecos políticos en Ramón Emeterio Betances, en Gregorio Luperón, en Martí, Albizu Campos, José de Diego y una pléyade de prohombres.
Benito Pérez Galdós, en su conocido Episodios Nacionales, se refiere a su presencia en el Ateneo de Madrid en 1868 acerca de su valiente disertación, frente a algunos amigos intelectuales españoles, arengándoles sobre la necesidad impostergable de un Puerto Rico libre. Pérez Galdós retrata al Maestro como " un antillano llamado Hostos, talentoso y brioso, de ideas muy radicales". En esa disertación se produce la ruptura inminente con España y proclama decepcionado su sueño de la Confederación.
Hostos cavila entre el hijo afectuoso de España ,como todos los criollos, y su fervoroso compromiso sagrado de combatir por la emancipación de su amada Borinquen, que yace esclava. En ese año el grupo de amigos intelectuales españoles en Ateneo le niegan su petición de colaborar con hacer libre su Patria y sale decepcionado, abandonando a España.
Camila nos extrae un trozo de ese discurso vital :
" Señores, yo no necesito decirnos quien soy, yo soy americano: yo tengo la honra de ser puertorriqueño y tengo que ser federalista ….Desde mi Isla veo a Santo Domingo, veo a Cuba…y pienso en la confederación ; miro hacia, miro hacia el norte y palpó la confederación …".( en Las Ideas Pedagógicas de Hostos, p. 4). Ante el intento crucial que se avizora de destrozar su sueño al pasar los años y levantarse las maniobras de España entregar a Estados Unidos a Puerto Rico, hace designar una Comisión que encabeza y solicita una audiencia al Presidente Mackinley, a la sazón de los Estados Unidos, donde sugiere una serie de medidas y el histórico Plebiscito. El emergente Imperio no le acepta su propuesta y Puerto Rico queda relegado a una tutoría temporal, que termina en Estado Libre Asociado.
Estos comentarios surgen a propósito de la conmemoración de los 113 años del fallecimiento del insigne Maestro puertorriqueño y por "adopción dominicano"', Eugenio Ma. de Hostos, quie en su estadía en Bani, donde residió su hijo Bayoan Lautaro, exclamo: Ah, si el País fuera como Baní! Admirado de lo laborioso de esa comunidad, su sentido comunitario, su don de gente, su pujante artesanía y agricultura.
Cuestiones abordadas por sus hijos agradecidos Ángel Moreta, José Guerrero y Luis Scheker Ortiz en sendas disertaciones en el Centro Perelló este viernes 12 de agosto juntamente con la Liga Hostosiana, la Universidad Autónoma, con su Escuela de Filosofía, en panel final del Congreso Hostosiano programado del 9 al 12 de agosto recién, teniendo la participación de una nutrida delegación borinqueña con la grata presencia del Alcalde de Mayagüez, José Guillermo Rodríguez, un personaje que aplica los ideales hostosianos en su Ciudad, con fervor inusitado.
Pudimos concluir luego de todas las conferencias en diversos temas sobre Hostos que sus ideales se convirtieron en un eje transversal en estas sociedades urgidas de recomponer la vida, reformar la educación de hoy con una nueva y reconfortante filosofía que sirva a los ideales y programas del Maestro federalista antillano; pero sobre todo que implante su Moral Social, la unidad del pensamiento con el comportamiento ético, que no se separe de la enseñanza el buen ejemplo: decía, "mal vive, quien mal , predica".
Sentencia que viene muy atinada donde hoy mi sociedad dominicana, bajo el imperio del mal ejemplo, usa sofismas y retruécanos engañosos que expresan un virtual divorcio entre lo que se dice y lo que se hace, en labios de los detentores del poder político. Más que nunca en estas turbulencias sociales, necesitamos resucitar el pensamiento crítico y racional de Hostos. ¡ Rescatemos el ideal Hostosiano!. No son muros que hay que construir, son ideales que hay que nutrir, Bosch tildo su obra: Hostos El Sembrador. ¡ Me oyen, infieles discípulos, de su gran discípulo!.