El país tiene un sistema de Seguridad Social y Salud Pública que ha fracasado para las grandes mayorías en   más de 16 años de haber sido puesto en práctica.

Los diferentes gobiernos de todos los partidos le han entregado la salud y la seguridad social al sector financiero y comercial en detrimento de la prevención y buena salud de los trabajadores, campesinos y demás sectores económicos y sociales que integran este país.

De ahí que, el gobierno y el Estado no puedan satisfacer la cobertura sanitaria universal, de calidad, oportuna y a precios razonables como parte de los principios que define las leyes que regulan esta área del que hacer nacional.

Esto se evidencia cuando, al redefinir la nueva lógica de funcionamiento del nuevo modelo, los distintos gobiernos se han dedicado a darle cuerpo y organicidad para cumplir con los postulados de la política neoliberal en el área de la salud, creando en ese interregno todas las condiciones para que opere la nueva realidad sanitaria.

Esto se traduce en que, los gobiernos, (PLD, PRSC, PRD y los que hoy son parte de las cúpulas y dirección media del PRM) fueran construyendo hospitales, laboratorios de alta demanda, complejidad y cobertura y se le fuera entregado a los sectores privados, Iglesia Católica, patronatos y complementando esa privatización con la readecuación en los antiguos hospitales públicos para que, gran parte de su presupuesto y funcionamiento dependiera del pago de las distintas ARSs, más el dinero entregado por el gobierno cada año.

Por eso, hoy podemos decir que, el país ha sido convertido en una gran confederación de negociantes de la medicina y la salud, donde los grandes beneficiados han sido Las siete más grandes mal llamadas Administradores de Riesgos de Salud-ARS- y el sector bancario-financiero con el control multimillonario del manejo de los fondos de pensiones a través de las AFP.

Y los más perjudicados han sido, en primer lugar, los trabajadores, campesinos, sector informar, junto a su familia y en peor medida, los desdichados de las gracias de Dios y  sus familiares, los cuales tienen que recurrir a todo tipo de degradación humana por diferentes medios de comunicación del país, para poder ser beneficiados y tratar de prolongar un poco su deteriorada vida.

Eso explica, por qué, los distintos gobiernos, y el del PLD en particular, religiosamente, sin mancar, cada mes, le entregan a nueve centros privatizados, con patronatos y los que dirige la Iglesia Católica, más de dos mil millones de pesos al año, mientras que, a los más de cientos sesenta centro públicos-privatizados, solo le entregan algo más de 300 millones al año y le deben, en ocasiones, hasta cuatro meses de las mensualidades.

REALIDAD DEL SECTOR SALUD.

El gobierno sabe que, la salud está privatizada y bajo la estructuración de un modelo de medicina de mercado, Neoliberal, donde ha creado dos formas de administrar y vender servicios de salud.

Por un lado, los hospitales construidos y cofinanciados por el gobierno, como son CECANOT, Complejo Hospitalario Ney Arias, CEDIMAT, Hospital General Plaza de la Salud, Hospital general Dr. Marcelino Vélez Santana, Hospital Vinicio Calventi, Hospital Traumatológico de la Vega Profesor Juan Bosch, Instituto Nacional del Cáncer  Rosa Emilia Tavares y la participación del gobierno en la construcción del Homs, en Santiago.

Todos estos centros de salud, con la particularidad del HOMS, tienen las características compartida de  que, se estructuraron y manejan como empresas económicas con rentabilidad financiera, no para beneficiar más al cliente que recibe determinado servicio, en cuanto a costo y cobertura, ni mucho menos al personal que permite, cuyas funciones y metas   sean cumplidas, sino, para continuar presentándose como los ejemplos en hotelería, tecnologías y servicios prestados, a costa de la sobreexplotación a que son sometidos, desde el conserje, hasta llegar al médico o jefe de determinado servicio.

El gobierno de Medina sabe que, el salario que devenga,  en promedio,  el médico de dichos centros  oscila entre 42 y 53 mil pesos al mes, incluyendo el “incentivo” por productividad de SenaSa y las demás ARSs con una jornada de trabajo diario de 7 ½  a  8 horas, sin contar, las horas de guardias que,  oscilan entre 12 y 24 horas.

Pongamos un ejemplo de uno de estos hospitales privatizados, entregados a patronato y donde el gobierno le entrega millonaria suma de dinero al mes y un pobre no puede acudir al mismo.

Si calculamos el último salario e incentivo entregado, tenemos que, un médico general gana RD$39,400 pesos al mes, más el último incentivo que fue de RD$10,400.00   pesos; partiendo del hecho que el anterior incentivo fuese igual,  eso llega a RD$20,800,00,  significando un incremento de salario de RD$1,733 pesos al mes, lo que sumado a los RD$39,400,00,  el salario bruto llegaría  RD$41,133.00.

En el caso de un especialista clínico y quirúrgico, el primero tiene un salario de RD$50,000,00 pesos al mes, más el ultimo incentivo que fue de RD$14,000 mil pesos y partiendo del hecho que, el primer incentivo fuera igual, eso llega a RD$28,000.00 mil pesos, conllevando un incremento de salario de RD$2,333.00 al mes, para un sueldo bruto de RD$52,333.00.

En el caso del especialista quirúrgico, la diferencia relacionada al mismo ejemplo es de un salario bruto de RD$53,333.00 pesos al mes, toda vez que, el incentivo fue de RD$20,000.00 pesos, lo que significa que el incremento de salario al mes fue de RD$3,333.00.

Esto significa en este ejemplo que, el salario del personal médico está entre 41 y 53 mil pesos al mes, con todo y la parafernalia que difunden las autoridades del buen salario que devengan. ¿A donde llegará un medico con este salario al mes?.

El gobierno y las autoridades de Salud Pública conocen muy bien esa realidad y saben también que, dichos centros son maquinarias de sobreexplotación laboral. Por eso, no les interesa abordar la naturaleza del modelo neoliberal que se ha impuesto en dichos hospitales, al igual que en los públicos privatizados, donde la realidad del salario no es muy diferente.

Conscientes de ello, este gobierno, igual que los otros, recurren de tiempo en tiempo a señalar el supuesto poco horario que cumplen los médicos, manipulando la situación y violando la ley de contratación del servidor público, en particular, del sector salud y en especial, los médicos, para no cumplir con la responsabilidad que tienen de brindar un servicio de salud de calidad y a todos los integrantes de la sociedad.

Todos los gobiernos y sus autoridades saben que, en el sector salud, como en otros sectores, siempre hay un reducido grupo que no cumplen horario, como debe ser. Pero en el caso de la salud, eso suena a manipulación, distorsión, desnaturalización y oportunismo para tratar de tapar el desprecio que han tenido todos los gobiernos por la salud del pueblo.

Pero además, ellos saben que, ningún médico nombra médico o personal de salud, ni los vigila, sino que, son las mismas autoridades que deberían asumir su responsabilidad.

  • ¿Por qué no invertir el escenario y hacer que el presidente Medina, la Ministra y demás funcionarios de primer nivel tenga un salario así, sin que se le permita los privilegios que tienen, para ver si sobreviven?

El colapso del sistema neoliberal de la salud es muy evidente y está generando una situación que no le favorece al presidente Medina, mucho menos a las autoridades sanitarias que llegaron ahí, producto de una crisis en el mismo. Al gobierno no le interesa que se discuta el colapso del modelo y la  necesidad de implementar uno contra neoliberal, sino, abordar otros aspectos que, con viejas demandas insatisfechas, pueda resolver algunas y así, queda ante una buena parte de la sociedad como el presidente que ha hecho lo que nunca se hizo, pero sin tocar la esencia de la crisis.

Por eso, los temas lastimeros como las pensiones y jubilaciones, los incentivos, los nombramientos provisionales, y el completivo de algunas plazas, son demandas que, son posibles asumirlas, debido a que, eso es un lastre que no aguanta más y el gobierno está en la obligación, esta vez, de cumplir varias.

¿Cómo acepta y aguanta un país el salario de miseria que devenga un medico en sentido general?, cuando ve a un Regidor, Diputado, Senador, funcionarios del Banco Central, del Banco de Reservas, Direcciones generales, director de Indotel, administradores de instituciones del gobierno, Jefes de seguridad de clubs de instituciones del gobierno, para mencionar algunos, con salarios de lujos sin que tengan mayor importancia para el desarrolla y avance de la sociedad que el médico.

Trampa del Colegio Médico.

Ante esa realidad y dada la experiencia de lucha que ha llevado el Colegio a través de su historia, ha venido cometiendo el error en reiteradas oportunidades  de exigir las justas demandas basadas en proporción, cuando a salarios se refiere. Y ese ha sido una práctica incorrecta y mal conducida que debe descontinuar para que no caiga de tiempo en tiempo, en la trampa de solicitar un por ciento y defraudado.

Si usted dirige una lucha planteando aumento de salario en base a un 60 por ciento, terminará consiguiendo, en el mejor de los casos,  un 30 o 25 por ciento, y  probablemente en más de un año. Creando en el imaginario público que, usted ha conseguido una buena porción, no sabiendo que su lucha ha significado entre nueve mil y quince mil pesos más para llevar el salario actual a 46 y 65 mil pesos al mes,  sin los incentivos que, normalmente, nunca se cumplen a cabalidad.

El Colegio Médico debe exigir la formulación de propuesta salaria y condición de trabajo estratégica, no coyuntural,  que incluya un Sistema de Salud contra neoliberal. Su lucha salarial debe estar orientada a convencer a la mayoría de la población de merecer un salario base no mínimo a RD$125,000.00 pesos al mes, más los incentivos que implican la certificación, recertificación, distancias, aportes al avance de la medicina, edad en el servicio, cargos asignados, cumplimientos de objetivos y metas, desarrollo de programas, pensión y jubilación cien por ciento, más 25 salarios del último sueldo; pensionados con su seguro de salud, aplicación de una Estrategia de Atención Primaria en salud, respeto al ejercicio legal de la medicina, nombramiento de todos los médicos vacantes, tres a cuatro tandas de trabajo, formación de 60 mil médicos, dentro de los cuales debe haber 30 mil médicos de familia, eliminación de las ARS.

Por último, el Colegio Médico debe cuidarse de los famosos asesores o mediadores  que designe para ayudarle a canalizar su proceso de lucha, para que no ponga la Iglesia en manos de Lutero y al final, lo que tenga son médicos busca puestos que son capaces de vender su alma al diablo, conseguir un puesto en el gobierno, abandonar su sector y luego decir públicamente, “ahora yo represento al gobierno, no soy mediador, y el gobierno de Danilo Medina ha hecho una propuesta global por primera vez, para resolver no solo lo del salario, sino todo el problema de salud, incluyendo el cumplimiento del horario,  no se puede ser extremista”.

30/07/2016