Es domingo en la mañana y en la congregación las sillas se van llenando.  Llegan diversas clases de personas, presentes por también diversos motivos.  Por ejemplo Andrea, la mujer  divorciada, con tres niños, uno de ellos discapacitado, que vive un situación económica tan estrecha que tiene que racionar hasta el aire que respira.  Caso 2, Julio; 37 años, mecánico llega arrastrado por la mujer, pues él se resiste a pensar que el tema de las cervezas y los amigos con que las bebe tiene que dejarlos para volverse un santo.  Caso 3, Susana.  A sus 14 años tiene los ojos puestos en un chico de la escuela que nada tiene que ver con “llevar una vida cristiana” como le dicen sus padres.  Y así, en una población de más de 500 personas reunidas, son iguales los números de mentes y vidas con expectativas y actitudes.

Andrea siente que no puede más con la carga que lleva en su vida.   Julio asume una postura tranquila, pero es un volcán por dentro, entendiendo que le esperan unas dos horas de tortura hasta que el servicio se acabe.  Susana está presente en cuerpo, pero su mente está viajando por los pasillos de la escuela, donde suspira cuando el chico malo le dedica una mirada, acompañada de una torcida sonrisa.

El servicio empieza con canciones y anuncios, pasando por el esperado momento de entregar las ofrendas.  A punto de salir al pódium, el pastor lleva consigo una serie de notas, las cuales necesita reorganizar en su mente, pues hace apenas unos minutos le informaron de por lo menos 5 casos tristes, de situaciones difíciles que se les han presentado a parte de sus feligreses, y que le han robado la atención y compungido el corazón.

Más él sabe que tiene un deber que cumplir.  Debe llevar el mensaje de la Palabra de Dios a una multitud que tiene expectativas, presentes allí para eso o para aparentarlo.  Llegado el momento, cita Lucas 23:26Y llevándole, tomaron a cierto Simón de Cirene, que venía del campo, y le pusieron encima la cruz para que la llevase tras Jesús.

El tema de Jesús siendo crucificado no es muy popular, ya que la gente prefiere que les hablen de prosperidad, de que les va a ir bien en la vida, o de que todo lo que pidan al Padre se lo van a conceder.  Estos conceptos encajan bien, en el mismo orden de nuestros tres protagonistas.  Sin embargo, el pastor ha preparado un tema controversial, que habla de momentos difíciles y duras pruebas.  No que lo haya hecho con miras de levantar un dedo acusador.  El pastor tiene un anhelo genuino porlas almas.  Oró y ayunó antes de preparar el tema.  Le pidió a Dios que le guiara en qué debía transmitir a la congregación, pidiéndole que el Espíritu Santo tocara los corazones, -transfórmalos Padre! –pedía…

“Entonces vemos cómo Jesús mismo en su agonía –predicaba- necesitó ayuda para llevar la cruz…  Así mismo, nosotros que somos llamados a ser un solo cuerpo, una congregación de muchos que se duele por lo que le pasa a su hermano, debemos ayudarles a cargar su cruz en momentos de duras pruebas”

Andrea suspiraba pidiéndole a Jesús con su voz interior, que le enviara ayuda.  Le decía que así como a él le faltó fuerzas, así ella ya no tenía para llevar el peso de sostener su familia.  Julio, sintiéndose confrontado,  cuando enfatizaban el ejemplo de Jesús sacrificando su Trono Celestial, su Deidad, su vida, por el bien de nosotros, personas que actuamos con egoísmo y ambiciones, sentía vergüenza al reconocer que constantemente pone sus deseos de diversión, por encima de pasar momentos con su familia.  Susana mezclaba en su cabeza las palabras del pastor con las palabras de su padre, diciéndole que se ha sacrificado para darle un futuro a ella y a sus hermanos, y que espera que sepa tomar sabias decisiones en su vida.  Ella sabe que el chico malo es devorador de niñas, no es hombre de una sola, y ha presenciado peleas entre las que se lo disputan, cosa que él disfruta.  Pero aun así, él se ha fijado en mi –dice auto convenciéndose- si yo le oro a Dios lo puedo cambiar…

Entonces,  cómo funciona un mismo controversial mensaje en las vidas de tantas personas?  Al final del servicio Andrea le dijo al pastor que ese mensaje era para ella.  Que le había convencido que no está sola y que Jesús es quien la ayuda a ella a llevar su cruz.  En eso, otro hombre de la congregación se le acerca diciéndole que lo acompañe a su carro, pues él le trajo una compra del supermercado, ya que el día anterior, había sentido en su corazón que Dios le indicó ayudarla.  La mujer se quebranta en llanto, pues no tenía con qué comprar comida para esa semana.

Julio comparó el dinero que se gasta cada vez que se reúne con los amigos.  Ya venía molestándole el hecho de que la mayoría de ellos bebían a costa de que él pagara.  Sin embargo, en su casa, hacía ya tiempo que los gabinetes de la cocina se estaban deshaciendo.  Una simple frase que dijo el pastor:  “Tu familia es tu primer ministerio, no tus amigos, ni tu trabajo.  Vela por ellos primero, y serás bendecido…”  le confrontó de tal manera, que determinó no juntarse más a beber, y proponer un presupuesto para arreglar los gabinetes.  Susana, bueno, ella ha crecido en la iglesia, ama a Dios, pero está fascinada con la idea de ser preferida por un chico popular.  Ella también fue confrontada, pero necesitará más prédicas y una mala experiencia para desilusionarse…  y con todo, Jesús la va a ayudar a llevar su cruz!

Lucas 23:27-3127 Y le seguía gran multitud del pueblo, y de mujeres que lloraban y hacían lamentación por él.28 Pero Jesús, vuelto hacia ellas, les dijo: Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí, sino llorad por vosotras mismas y por vuestros hijos.29 Porque he aquí vendrán días en que dirán: Bienaventuradas las estériles, y los vientres que no concibieron, y los pechos que no criaron.30 Entonces comenzarán a decir a los montes: Caed sobre nosotros; y a los collados: Cubridnos.31 Porque si en el árbol verde hacen estas cosas, ¿en el seco, qué no se hará? 

Hebreos 4:1212 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.

Santiago 1:12 Bienaventurado el hombre que persevera bajo la prueba, porque una vez que ha sido aprobado, recibirá la corona de la vida que el Señor ha prometido a los que le aman.

Bendiciones!!!